Es noticia
Menú
Esta es la condición que ha puesto Kate Middleton a la prensa en su viaje a Dinamarca
  1. Casas Reales
KATE EN DINAMARCA

Esta es la condición que ha puesto Kate Middleton a la prensa en su viaje a Dinamarca

Acostumbrada a tratar con los medios británicos, la duquesa de Cambridge también ha querido aplicar las costumbres de los Windsor a sus compromisos públicos en Copenhague

Foto: La duquesa de Cambridge, en Copenhague. (Reuters/Pool/Alastair Grant)
La duquesa de Cambridge, en Copenhague. (Reuters/Pool/Alastair Grant)

La duquesa de Cambridge ha estado en Copenhague poco más de 24 horas y la hemos visto haciendo de todo, desde visitando Amalienborg para ser recibida por la reina Margarita y la princesa Mary hasta mezclándose con los niños de una guardería. Sin olvidarnos del gran momento de su estancia en el país, cuando no dudó en lanzarse por un tobogán en el laboratorio de juegos de Lego. Pero, claro, tanto despliegue ha tenido un pequeño precio. Y es que hay una condición que Kate Middleton ha puesto a la prensa durante este viaje a Dinamarca.

Antes de llegar a eso, quizá es conveniente que expliquemos que la forma de trabajar que tienen los medios en Reino Unido es bastante particular. Cada cita pública de un Windsor se ciñe al Royal Rota. Eso no es sino un pool de prensa por el que a cada compromiso público solo está acreditado un pequeño grupo de periodistas que después distribuye el material gráfico y audiovisual al resto de medios. Así, se evitan multitudes que interfieran en el propio desarrollo de la actividad o que puedan poner en peligro el dispositivo de seguridad.

placeholder Kate Middleton y Mary de Dinamarca,  juntas en Copenhague. (Reuters/Mads Claus Rasmussen)
Kate Middleton y Mary de Dinamarca, juntas en Copenhague. (Reuters/Mads Claus Rasmussen)

El sistema funciona desde hace 40 años, así que las personas acreditadas son ya viejas conocidas de los Windsor. Por eso, entre ellos hay un pacto por el que los periodistas no suelen hacer preguntas ni a los duques de Cambridge, ni al príncipe Carlos y Camila, ni por supuesto a la reina Isabel. Es muy raro que este pacto se rompa y cuando vemos a los miembros de la familia real hablando ante las cámaras, siempre es algo acordado previamente. Por ejemplo, cuando el príncipe Guillermo quiso defenderse de las acusaciones de racismo, vertidas por Harry y Meghan en el programa de Oprah.

También hace unos meses les contábamos que una redactora había preguntado a Kate Middleton por su sobrina, Lilibet Diana, unos días después de nacer. La pregunta pilló a la duquesa de Cambridge completamente a contrapié, aunque supo salir del paso. Se trataba de una periodista estadounidense que cubría su encuentro con Jill Biden en Glasgow, durante la COP26. Una situación similar con un miembro de la prensa británica, simplemente, no se habría dado.

placeholder Kate Middleton, en Copenhague. (Reuters/Pool/Ian Vogler)
Kate Middleton, en Copenhague. (Reuters/Pool/Ian Vogler)

Mientras, en Dinamarca no se cuida tanto a la familia real y si hay algún tema polémico sobre la mesa, se pregunta sin ningún problema, incluso abordando a los príncipes herederos a la salida o entrada de alguna cita pública o, simplemente, andando por la calle. Es un sistema de trabajo completamente diferente, por eso ha sorprendido mucho la condición que ha puesto Kate Middleton a la prensa para poder cubrir su viaje a Dinamarca. Una condición que, de no cumplirse, puede traer consecuencias para el periodista en cuestión, como que no esté acreditado al resto de actos. Un gesto que nos recuerda mucho al sistema de trabajo que tienen también Guilermo y Máxima de Holanda.

La condición en cuestión es que nadie podía preguntarle nada sobre el príncipe Andrés, que se ha convertido en una auténtica piedra en el zapato para la familia, después de ser demandado por abuso sexual de menores y haber pactado con la supuesta víctima para no llegar a juicio. Ningún problema en preguntarle por la salud de la reina Isabel, actualmente con covid; ningún problema en preguntarle por Meghan y Harry, quizá el otro tema delicado para la familia Windsor; ningún problema en preguntarle por sus hijos o cosas tan personales como si querría tener más bebés. El único tema que la duquesa ha vetado es sobre su tío político, el duque de York.

placeholder Kate Middleton, en Copenhague. (Reuters/Pool/Stephen Lock)
Kate Middleton, en Copenhague. (Reuters/Pool/Stephen Lock)

Acostumbrados como están los periodistas daneses a preguntar lo que quieren, no es que les haya hecho demasiada gracia tener que acatar esta norma. De hecho, no han tardado en publicarse editoriales y artículos de opinión sobre este asunto, abogando por la libertad de prensa. Pero estas editoriales y la opinión de la prensa danesa parece que compensa el hecho de ahorrarse una situación tan incómoda como hubieran sido las preguntas sobre el príncipe Andrés y los últimos acontecimientos, en lo que supone uno de los mayores escándalos en Buckingham en décadas.

Y es que, a pesar de las reticencias, los periodistas que han cubierto la visita de Kate Middleton a Dinamarca durante estas dos jornadas han respetado esta petición -o imposición-. Así que todos sus compromisos públicos se han desarrollado en un ambiente de absoluta cordialidad y comodidad para la futura reina, que se ha sentido como en casa, desplegando todo su repertorio y sin preguntas hostiles.

La duquesa de Cambridge ha estado en Copenhague poco más de 24 horas y la hemos visto haciendo de todo, desde visitando Amalienborg para ser recibida por la reina Margarita y la princesa Mary hasta mezclándose con los niños de una guardería. Sin olvidarnos del gran momento de su estancia en el país, cuando no dudó en lanzarse por un tobogán en el laboratorio de juegos de Lego. Pero, claro, tanto despliegue ha tenido un pequeño precio. Y es que hay una condición que Kate Middleton ha puesto a la prensa durante este viaje a Dinamarca.

Kate Middleton
El redactor recomienda