La mirada enamorada de Letizia, joyas customizadas y otros detalles de la recepción de Buckingham

Con más de dos mil invitados y a escasas horas de celebrar una coronación histórica, es lógico que la recepción previa en palacio haya dado para un sinfín de curiosas imágenes, especialmente por ese cónclave de royals que tuvo lugar. Una de ellas, la protagonizada por la mirada de amor de Letizia a Felipe, mientras hablaban con el rey Carlos III, uno de los muchísimos detalles que se han desprendido de una reunión histórica.

Los gestos de cariño reales, versión 2.0

No era muy habitual, pero es cierto que, desde hace un tiempo, vemos que los reyes Felipe y Letizia muestran su afecto en público mucho más a menudo que antes, cuando guardaban mucho más las apariencias. Y juntos volvieron a protagonizar una de esas imágenes que nos gusta ver, un matrimonio relajado y cómplice. Ocurrió en ese único momento que pudieron compartir con el rey Carlos dentro de palacio, ya que el monarca tuvo que repartirse entre todos sus invitados en esa escasa hora que duró la recepción previa a la coronación. No hizo falta nada más que una pequeña charla y que el rey Felipe tomara la palabra para que la reina Letizia dirigiera hacia él sus ojos, brillantes y nos atrevemos a decir llenos de orgullo.

Guiños románticos

Además de esta mirada, vimos muchos guiños románticos entre las parejas que asistieron a esta recepción en Buckingham. No pasó desapercibido que los reyes de Bután iban cogidos de la mano al acceder a Buckingham, un gesto muy alejado de los protocolos royal. Además, la princesa Mette-Marit de Noruega no dudó en lucir un collar en forma de corazón con brillantes incrustados formando una H, la inicial de su marido, el príncipe Haakon.

Joyas desmontadas

Entre el gran desfile de joyas que se pudieron ver en la cita, que reunió a numerosos mandatarios internacionales, además de a nombres royal, vimos algunas muy especiales y customizadas. Además del broche en forma de lazo que lució doña Letizia y que pertenece a la reina Sofía, pudimos ver un collar de la princesa de Amalia con una historia curiosa, ya que la pieza colgante forma parte del broche que su madre, Máxima de Holanda, llevó en su atuendo durante el acto de abdicación de la princesa Beatriz, hace ahora diez años. También la reina Ana María de Grecia, que asistió acompañada del príncipe Pablo y Marie-Chantal, hizo algo parecido, puesto que llevó un fragmento de la tiara Antique Corsage, la misma que han utilizado todas las mujeres que han entrado en la familia real griega por matrimonio.

Moda británica

Muchas han sido las invitadas que han apostado por la moda británica, entre ellas la reina Letizia, que lucía un vestido de Victoria Beckham en un vibrante verde. Todo un guiño a sus anfitriones, muy en la línea por la que habitualmente opta cuando viaja fuera de nuestras fronteras. En esta ocasión lo combinó con zapatos y cartera de Magrit en color azul noche, además de unos espectaculares pendientes de zafiros y diamantes nuevos y una pulsera, con las mismas piedras preciosas, que ya habíamos visto en otras ocasiones.

La complicidad de los Reyes y los Windsor

Muy cariñosos se mostraron los reyes Felipe y Letizia con el rey Carlos y la princesa de Gales. Algo que se entiende si estudiamos el árbol genealógico de ambas familias reales. El duque de Edimburgo, padre de Carlos III, era primo hermano de Pablo de Grecia, a su vez, padre de la reina emérita Sofía. Además, el rey Juan Carlos y la reina Isabel II eran tataranietos de la reina Victoria. Una relación estrecha de vínculos familiares cercanos que se dejó sentir y notar en la recepción. Tanto Felipe como Letizia se mantuvieron sonrientes y cercanos ante los miembros de la familia real británica y, sin duda, este fue uno de los momentos memorables que pasarán a la historia en la recepción de bienvenida previa a la coronación.

La Reina, protagonista de la prensa británica

No es raro que doña Letizia protagonice titulares en los medios internacionales con sus diferentes apariciones públicas, especialmente en aquellas en las que su look llama especialmente la atención. Lo que no es tan habitual es que sea la protagonista del Daily Mail y más en un día como este viernes, en el que los grandes protagonistas eran Carlos y la familia Windsor.

Camila, la gran ausente

Lo más curioso de todas las fotos que se han publicado del interior del palacio de Buckingham es que en ninguna de ellas sale la reina Camila. El motivo es que, tal y como se apuntó desde los medios británicos, la reina consorte se quedaba en Clarence House, donde mantiene su residencia junto al rey Carlos, para prepararse para la coronación.