Carolina y Chiara de Borbón-Dos Sicilias: su gran salto de princesas a modelos

Siempre no muy lejos del brillo de los focos y de la atención mediática, las princesas María Carolina y Chiara de Borbón-Dos Sicilias saltaban una vez más a primera plana de la actualidad cuando surgía la noticia del supuesto romance de esta última, nada menos que con el príncipe Christian de Dinamarca. Para disgusto de los fans del universo royal que ya imaginaban una boda que uniera a dos familias reales europeas, la hija menor de los duques de Castro desmentía este noviazgo asegurando que "aunque a todos nos gusta soñar con cuentos de hadas, lo que de verdad importa es la realidad". De este modo, nos quedábamos con ganas de verlas en la glamurosa cena de gala con la que el heredero al trono escandinavo, compuesto y sin novia, celebraba su mayoría de edad rodeado de otras princesas como Amalia de Holanda o Elisabeth de Bélgica.

Donde sí estuvieron las dos jóvenes y tuvieron oportunidad de brillar con luz propia fue en la reciente Paris Fashion Week, donde lucieron sus mejores galas en los desfiles de las firmas de moda más conocidas e incluso tuvieron la oportunidad de debutar en la pasarela.

No en vano, las hermanas italianas proyectan la imagen de lo que ellas opinan que una princesa debe ser en el siglo XXI, aunque no aspiren a portar algún día una corona. "Una mujer moderna que viva con su tiempo, que sea independiente, culta, libre y apasionada, pero que no debe olvidar sus valores y ha de permanecer orgullosa de su historia familiar", decía Chiara en una entrevista concedida a Vanitatis poco antes de cumplir los 18 años.

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Filántropas, estrellas de la televisión, estudiantes en Harvard y apasionadas por el mundo de la moda, esta última faceta se veía recompensada al participar al unísono en la pasarela para Pierre Cardin en la PFW. Sobre cómo fue esta inolvidable experiencia y sobre todo lo que supone para ellas el universo de los desfiles han hablado en exclusiva para Vanitatis.

"Fue una ocasión realmente única", nos dice María Carolina sobre su debut como modelo. "Nació gracias a nuestra amistad con Rodrigo Basilicati-Cardin y participamos con mucho gusto en su desfile", añade mientras destaca que fue especialmente divertido poder cumplir este sueño junto a su hermana. "¡También estaban nuestros padres, nuestra tía Anne y su hija presentes entre el público aplaudiéndonos!".

Pero la joven no solo se queda con el hecho de desfilar sobre la pasarela, ya que en su opinión "esta experiencia nos abrió un mundo sobre cómo es el backstage de un desfile de moda". María Carolina reflexiona sobre el hecho de que "las modelos que lucen perfectas en la pasarela muchas veces están estresadas y algunas están muy cansadas de hacer un desfile tras otro. Son muy diferentes a cómo se las se ve en la pasarela". Tras experimentarlo en primera persona, habla por las dos cuando nos dice que "pudimos comprender verdaderamente lo que significa estar en la pasarela y todas las complejidades que se esconden detrás de la escenografía de un desfile. Ahora sabemos cuánto trabajo y esfuerzo se necesita por parte de un gran equipo detrás de escena".

Como reflejaron con detalle en sus redes sociales durante esta edición de la PFW, ambas hermanas no perdieron la ocasión de acudir a los desfiles de otras importantes firmas de moda, destacando especialmente su presencia en el de L'Oréal, ya que para ellas "fue mucho más que una simple pasarela de moda".

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R. Riaño

Para las royals, el desfile "fue una experiencia feminista, una oda a la autoestima y un mensaje poderoso que resonó en todo el mundo de la moda. Rompió los estereotipos de belleza impuestos por la sociedad, afirmando que cada uno de nosotros es digno de respeto y estima. Lo que más nos gustó es que, por una vez, la pasarela no era solo un lugar para exhibir ropa de moda, sino un escenario para celebrar la diversidad y la individualidad".

Confesando algunas 'anécdotas beauty' sobre esta experiencia, María Carolina nos revela que para la ocasión decidió hacerse "un brushing con mucho volumen inspirado de los años 80", mientras que su hermana Chiara "tenía que hacerse un moño, pero no tuvo tiempo de terminar su peinado ¡y al final salió con un cepillado a lo Marilyn Monroe!".

Centradas en su carrera académica, las hermanas Borbón-Dos Sicilias nos aseguran que asistir a eventos como la PFW les ofrece "la oportunidad de conocer las últimas tendencias y creaciones de diseñadores". Recién graduadas en el Instituto Marangoni de moda, así pueden tener "de primera mano" una perspectiva del trabajo de campo en esta industria.

Además, para ellas asistir a los desfiles "te permite entrar en contacto con una comunidad apasionada por la moda, que incluye estilistas, diseñadores e influencers. Estos eventos ofrecen la oportunidad de hacer networking, ¡perfecto para nosotras que nos embarcamos en un proyecto de moda!", nos dice por último una ilusionada María Carolina, que apuesta por seguir siempre actualizada "sobre las últimas tecnologías, tejidos, estilos y técnicas".