El suegro de Pablo Urdangarin y su novia, Johanna Zott, sus mayores fans en las gradas

La distancia no ha hecho mella en la relación sentimental de Pablo Urdangarin y Johanna Zott, cuando están a punto de celebrar el primer aniversario de su amor. Pese a que la joven se ha mudado desde Barcelona hasta Alemania para estudiar la carrera de Medicina con una beca Erasmus, ambos hacen lo posible para verse a menudo. Por eso, Johanna no dudó en hacer una escapada hasta Granollers para ver jugar a su chico en la máxima categoría del balonmano español.

En esta ocasión, además, estuvo acompañada de su padre y de una de sus hermanas, porque a estas alturas su familia ya se ha convertido en un grupo de hinchas acérrimos del equipo de Pablo Urdangarin. No sabemos si las ganas de impresionar a su suegro, que desde las gradas le animaba luciendo una bufanda de la escuadra catalana, le pesaron al joven jugador, pero en esta ocasión tan solo pudo anotar un gol.

Los suyos echaron de menos sus tantos y el Fraikin BM Granollers rompía su buena racha al no ser capaz de pasar del empate en casa ante el modesto Rebi Cuenca (29-29). Eso no fue óbice ni cortapisa para que la familia política de Pablo viviera con tensión cada jugada en el Palau d'Esports de la localidad catalana y le animara sin cesar.

Al término del encuentro, los fotógrafos captaban los gestos cómplices entre Pablo Urdangarin y Johanna Zott, que no tuvieron reparo en regalarnos abrazos y besos, demostrando que su noviazgo va viento en popa.

También pudimos apreciar la buena relación del deportista con el padre de su chica. No en vano, cuando Johanna ha estado en el extranjero, sus suegros y cuñados son los que han tomado su relevo como hinchas en las gradas.

Un buen rollo este que se hace extensivo al que mostraba la infanta Cristina con su nuera hace tan solo una semana en este mismo pabellón. En la que suponía su primera visita a nuestro país tras conocerse que ya está divorciada de Iñaki Urdangarin, ambas pudieron celebrar una victoria de Pablo, después de vivir con intensidad todo el partido.

Entre sonrisas y nerviosismo por el resultado, la novia de Pablo Urdangarin y la infanta Cristina se mostraron totalmente cómplices durante todo el partido. En un momento dado, incluso la hija pequeña de los Reyes eméritos no dudó en compartir con ella lo que había en la pantalla de su teléfono móvil. Del mismo modo, Johanna parece haber hecho buenas migas con Irene Urdangarin, demostrando lo integrada que está en la familia de su novio.

Pero si Pablo Urdangarin tiene un espejo en el que mirarse, además de otro fan incondicional, ese es su padre. Iñaki Urdangarin también se escapa para ver jugar a su hijo cuando tiene ocasión.

Toda una leyenda del balonmano español, el que fuera jugador del FC Barcelona acudía recientemente a presenciar un partido de su hijo y a mostrarle su apoyo y ofrecerle sus consejos. Tras seguir desde la grada con atención todas las jugadas, no dudaba en bajar hasta el terreno de juego una vez finalizado el encuentro para mostrarle a Pablo su orgullo dándole un abrazo y un beso.