La nueva foto de la princesa Isabella de Dinamarca es pura Generación Z: tiara, vestido de gala y móvil en mano

La casa real danesa ha tirado la casa por la ventana para la celebración de los 18 años de la princesa Isabella. A pesar de no ser la heredera al trono, la hija de Federico y Mary ha festejado su mayoría de edad como una auténtica reina. Un acto en la ciudad de Aarhus, un concierto en el Teatro Real de Copenhague, la publicación de varias fotografías inéditas de su infancia y otras de ella vestida de gala con la tiara que le acaba de regalar su abuela, Magarita II.

Por si fuera poco, la corte ha querido publicar un nuevo retrato de la princesa que es pura Generación Z. Y es que durante la sesión de las fotos oficiales, la reina Mary, a quien le encanta la fotografía y estuvo presente para aconsejar a su hija y ver que todo iba como la seda, aprovechó un momento para fotografiar a su hija con la tiara, el vestido de gala y el móvil en la mano.

En la imagen vemos a una sonriente Isabella, toda regia, consultando su teléfono. Junto a la imagen, la princesa ha escrito un mensaje de agradecimiento: "Muchísimas gracias a todos los que me ayudaron a celebrar mi 18º cumpleaños. Ha sido fantástico que tanta gente haya dedicado tiempo, dedicación y esfuerzo para hacer de mi día algo especial. Significa mucho para mí".

Nos encontramos, sin duda, con una imagen mucho más natural que las oficiales, tomadas por Steen Evald. La princesa ha elegido para sus primeros retratos de gala un vestido naranja de la diseñadora Carina Grønning. Se trata de un diseño con escote Bardot y cuerpo drapeado ceñido a la cintura, de la que nace una sobrefalda con cola que da paso a una falda columna hasta los pies.

El naranja hace que destaque la banda celeste de la Orden del Elefante, concedida por Federico X con motivo de su cumpleaños, y también las joyas que porta la princesa, regalo de su abuela paterna. Margarita II decidió agasajar a la mayor de sus nietas con la tiara de turquesas, una joya que perteneció a Margaret de Connaught, casada con el rey Gustavo VI Adolfo. A su temprana muerte la heredó su hija Ingrid, quien se la dejó a su primogénita, Margarita II.

La pieza, en forma de bandeau, presenta 11 rosetones en forma de margarita -no es casualidad, teniendo en cuenta para quién fue creada- con diamantes y turquesas y forma parte de un parure con pendientes, que también luce Isabella en estos retratos oficiales. Eso sí, no se especifica en la información facilitada por la Casa Real si los pendientes también son un regalo o simplemente un préstamo.