Tippi Hedren: el ejemplo del que deberían aprender Melanie Griffith y Dakota Johnson

Cuando ya creíamos que Jane Fonda había batido todos los récords convirtiéndose en icono de la belleza, frisando la barrera de los 80 (ahora ya los ha cumplido) ha llegado Tippi Hedren, con 88, a demostrar que siempre se puede estar vigente. Da igual la edad. Una lección que podrían sacar su hija, Melanie Griffith, y su nieta, Dakota Johnson, quienes están a años luz del estrellato que ella llegó a alcanzar.

Tippi Heddren es de las pocas actrices de la época dorada de Hollywood que nos quedan, por cuestiones cronológicas evidentes. Y al igual que Olivia de Havilland, que supera los 100, ha sabido rentabilizar el éxito de una filmografía no muy extensa para seguir dando que hablar. En el caso de la Melita de ‘Lo que el viento se llevó’, por llevar a los tribunales a la cadena FX Network y a la serie ‘Feud’ por el retrato que hacen de ella. Tiene al sistema legal de California trabajando a 'full' para ella, que espera en su retiro parisino la sentencia judicial. Como la reinona que sigue siendo.

Tippi, quien fuera una de las musas de Hitchcock, vuelve a ser actualidad por una maravillosa campaña publicitaria de Gucci de joyas en la que ha sido fotografiada por Colin Dogson. En ella, como podéis comprobar en el vídeo bajo estas líneas, interpreta a una pitonisa a la que visitan en su casa un grupo de jóvenes que se ponen en sus manos para conocer su suerte. Si no fuera porque está detrás de la misma Alessandro Michele, director creativo de la firma, nos atreveríamos a compararla… Bueno, dejemos el condicional: la vamos a comparar con aquella sección que tenía Lola Flores en su último programa de televisión, ‘Lola, Lolita, Lola’, en la que sacaba surrealistas conclusiones delante de una bola de cristal sobre sus no menos llamativos invitados. En el fondo, ambas tenían en común no solo el ser madres y abuelas de artistas, sino una forma de entender la fama que, desgraciadamente, ha caído en desuso.

No es que Tippi Hedren fuera muy prolífica pero hay ocasiones en las que un ramillete de trabajos es más significativo que una carrera repleta de títulos que no dejan huella. Las dos películas que rodó con Alfred Hitchcock, ‘Los pájaros’ y ‘Marnie, la ladrona’, de 1963 y 1964, han servido para conservar intacta su llama durante más de cinco décadas. En definitiva, es una leyenda.

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La relación entre la actriz estadounidense y el director británico, que falleció en 1980, fue muy tormentosa, como siempre se ha sabido. Es más, adelantándose al fenómeno #meetoo, le acusó de acoso sexual en su libro de memorias, ‘Tippi Hedren, a memoir’, que salió a la venta en 2016. Un libro, por cierto, en el que el director de ‘Psicosis’ era retratado como alguien pérfido y sin escrúpulos. “Él arruinó mi carrera, pero no pudo arruinar mi vida”, es uno de los titulares más legendarios de la actriz, que describen su lucha sin cuartel contra las veleidades del artífice de 'Atrapa a un ladrón' y 'La ventana indiscreta'.

Su vida sentimental fue errática, como la de su hija Melanie, a quien iguala en número de maridos, pero no en bodas (la ex de Antonio Banderas estuvo casada también con Steven Bauer, padre de su hijo Alexander, y con Don Johnson, con quien tuvo a Dakota; contrajo matrimonio en dos ocasiones). Tippi dijo 'sí, quiero' por primera vez a Peter Griffith, padre de Melanie Griffith, en 1952 y se divorciaron en 1961.

Tres años más tarde volvió a intentarlo con el agente publicitario Noel Marshall, que se convirtió en director de su mujer y su hijastra (la propia Melanie) en la película de aventuras ‘El gran rugido’, que les arruinó y se estrenó en Europa en 1981, un año antes de que firmaran su divorcio. En Estados Unidos hubo que esperar hasta 2015 para ver este filme en pantalla grande, lo que evidencia su gran fiasco artístico y financiero.

Cuatro años más tarde, Tippi se casó con el empresario del acero Luis Barrenechea, pero su relación también hizo aguas y no sobrevivieron juntos más de una década. Su último gran amor fue el veterinario Martin Dinnes, a quien estuvo comprometida durante seis antes de romper en 2008. Por ese motivo, en este 2018 tanto ella como su hija Melanie están solteras y sin compromiso... (salvo que tengan algun 'affaire' y no haya trascendido, que todo puede ser)

La despedida cinematográfica de Chaplin

Es cierto que en Hollywood existe el fenómeno que tanto denuncia Madonna, el ‘ageism’, básicamente que no te contraten por la edad si eres mujer, pero la decadencia de Melanie Griffith empezó de forma prematura y en su filmografía no hay títulos tan icónicos como los de su madre, quien, recordemos, intervino en la última película de Charles Chaplin, ‘La condesa de Hong Kong’, junto a Marlon Brando y Sofía Loren. También un fracaso en la época, pero revisada una y otra vez por ser la despedida fílmica del irrepetible Charlot.

Cuando Melanie se puso a las órdenes de Fernando Trueba, para rodar ‘Two Much’, mediados los 90, y se enamoró de Antonio Banderas, su carrera no atravesaba ya por su mejor momento. De hecho, acabó convirtiéndose a nivel mediático en la mujer de la bomba latina del momento que no era otro que el actor malagueño. Un rol que ella asumió con aparente naturalidad, aunque los medios no paraban de hacerse eco de los supuestos celos que tenía la actriz de las compañeras de reparto de su marido, entre las que se encontraban Angelina Jolie o Catherine Zeta-Jones. No sería de extrañar, para qué negarlo, que fueran leyendas urbanas con un poso de verdad más que otra cosa, pero la popularidad, a veces, también se sustenta con habladurías que sirven para alimentar el interés del público.

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Melanie Griffith no ha logrado remontar artísticamente, pese a ser una gran actriz, y en los últimos años ha hecho papeles sin relevancia en series como ‘Hawai 5.0’ y un cameo en la celebrada The Disaster Artist’. Su último papel relevante fue el año pasado junto a Al Pacino en ‘The Pirates of Somalia’, pero la película pasó casi inadvertida. Aún así, la actriz, a sus 60 años, no parece dispuesta a tirar la toalla.

De momento, salvo los cinétilos, no muchos parecen recordar sus papelones en ‘Doble cuerpo’, ‘Algo salvaje’ o ‘Crazy in Alabama’, donde la dirigió Antonio Banderas. Es más, para los millennials, como mucho, es la madre de Dakota Johnson o la íntima de Kriss Jenner, pero poco más… Algo que no le hace justicia, ni siquiera poética.

En contra de Melanie Griffith no ha jugado la alargada sombra de su madre, porque lleva décadas de semirretiro, sino, tal vez, sus pasados problemas con las adicciones, algo que han logrado superar otros actores como Christian Slater o Robert Downey Jr. La causa principal de su declive ha sido su afición a la cirugía estética. Su madre, que también está muy retocada, parece haber recurrido a mejores ezpertos o quizás escogió opciones menos invasivas. El propio Antonio Banderas admitía haberle recomendado a la que entonces era su mujer que dejara de operarse, pero quizás lo hizo demasiado tarde…

Aún así, fans de Melanie, no perdáis la fe. El día menos pensado se nos descuelga con un papelazo y hasta la nominan al Oscar. En Hollywood encantan las resurrecciones artísticas y si no que se lo digan también al operadísimo MIckey Rourke, que a punto estuvo de ganar un Oscar después de haberse destrozado la cara.

Chris Martin entra en la familia

Ahora ha llegado el momento de Dakota Johnson, quien está en la cresta de la ola, gracias sobre todo a los 'blockbusters' de la saga de ’50 sombras de Grey’. Juega a su favor estar en la lista A de Hollywood por haber encadenado dos taquillazos, pero el resto de su filmografía, hasta el momento, es bastante anodina. Ahora está muy 'on fire' por su noviazgo con Chris Martin, líder de Coldplay, y su madre está encantadísima. Le adora. ¿Cuál es el riesgo? Que su vida personal eclipse sus hasta ahora modestos logros artísticos, que no comerciales. Aún es pronto para sacar conclusiones: solo tiene 28 años.