La cara de Kim Kardashian es el nuevo canon de belleza: sus puntos más poderosos
Un óvalo afilado con los pómulos marcados, labios gruesos, ojos rasgados y cejas espectaculares. Estos son los rasgos de un rostro cada vez más demandado en las clínicas de estética
Las técnicas estéticas no quirúrgicas aplicadas al rostro suben enteros en los últimos años, pero lo que se pide ahora no tiene mucho que ver con lo que se pedía hace unos años. Adiós definitivamente a los antiestéticos labios abultados, a utilizar rellenos para redondear el rostro y a no tener en cuenta la calidad de la piel. “Las redes sociales y los selfies han cambiado la manera en la que vemos y queremos ser vistos, influidos por influencers con millones de seguidores", dice la doctora Josefina Royo, del Instituto Médico Láser (IML).
Y por encima de todos los demás, el rostro de Kim Kardashian se ha convertido en el modelo a seguir, el rostro que marca las pautas de la belleza en la actualidad”. ¿Cuáles son las claves de este modelo estético? La doctora Royo lo cuenta con detalle.
La boca grande y perfilada
El aumento de labios es muy preciso. En el caso de Kim Kardashian, se acentúa el arco de Cupido con dos gotas de un ácido hialurónico especial justo bajo cada pico del labio superior. Es una técnica que da un aspecto muy sensual a la boca y apenas se nota. Además, se perfila los labios trabajando los bordes y se les da más volumen y proyección, sobre todo al inferior.
Potenciar el filtrum
El filtrum es el espacio que va del arco de Cupido a los orificios de la nariz, una de las claves de la juventud. En los bebes es corto y parece que tira un poco del labio superior, que tiene un aspecto gordito y respingón. Con los años el filtrum va desapareciendo y el espacio entre la nariz y el labio superior aumenta y se aplana. El láser Lip Lift consigue elevar el labio, acortar el filtrum y hacer respingón el labio superior. Es una técnica sencilla (dura 35 minutos), ambulatoria y que se realiza con anestesia local.
Pómulos altos y con mucha presencia
Hay varias formas de conseguir este resultado que se utilizan siempre en función de los rasgos faciales de la paciente. En algunos casos, es aconsejable aumentar la proyección de los pómulos con ácido hialurónico; en otros, se utiliza toxina botulínica inyectada justo debajo de los pómulos. La toxina relaja los músculos, que pierden volumen y se afinan, lo que aumenta ópticamente la proyección de los pómulos.
Y la última: extirpación de las bolas de Bichart (igual que ha hecho su hermana Kendall Jenner), unas bolitas de grasa que están en las mejillas y que desaparecen a medida que nos hacemos adultos y el rostro se va afinando. Sin embargo, no siempre se atrofia y entonces da un aspecto de rostro 'mofletudo'. Esas bolitas se eliminan mediante la bichectomía, una cirugía que se realiza con anestesia local mediante una incisión en la mucosa del carrillo. El resultado es muy evidente porque define los pómulos y afina las mejillas.
La nariz, fina…
En este caso, podemos estrechar las fosas nasales, levantar la punta nasal un poquito –eso siempre es un rasgo de juventud– y corregir el arco para hacerlo discretamente cóncavo. Sí, la rinoplastia tampoco se le ha resistido a Kim Kardashian y es una de las claves de su perfecto rostro.
...Y las cejas, potentes
Una única dosis de toxina botulínica debajo de la parte inferior de la cola de las cejas las eleva y crea una sensación de ojos rasgados. Y para marcarlas, nada como el microblading, la técnica que permite remodelar las cejas, hacerlas simétricas, más importantes y darles el color deseado.
Una frente generosa
Una frente amplia y despejada es el último punto fuerte de este tipo de belleza. En algunos casos, se depila la primera línea del pelo, o los laterales o el pico de viuda que tienen algunas personas. Rita Hayworth ya lo hizo en su momento para conseguir una frente con mucho carácter.
Las técnicas estéticas no quirúrgicas aplicadas al rostro suben enteros en los últimos años, pero lo que se pide ahora no tiene mucho que ver con lo que se pedía hace unos años. Adiós definitivamente a los antiestéticos labios abultados, a utilizar rellenos para redondear el rostro y a no tener en cuenta la calidad de la piel. “Las redes sociales y los selfies han cambiado la manera en la que vemos y queremos ser vistos, influidos por influencers con millones de seguidores", dice la doctora Josefina Royo, del Instituto Médico Láser (IML).