Kitty haircut, el corte de pelo para una media melena esponjosa

El kitty cut parece predestinado a ser el gran corte de pelo del 2024. Titulares en medios especializados y una oleada de tiktokers entrando en salones de belleza y recortando su melena lo avalan.

Mientras las melenas bob, en todas sus variantes, han sido las protagonistas capilares en los últimos años, la forma de cincelar el cabello a base de capas y peinados redondeados del kitty se convierte en la alternativa más versátil para quienes defienden un cabello más largo.

Su máxima expresión, por el plus de volumen indudable, son sin dudas esas medias melenas, tipo clavicut. El corte kitty, que toma como referencia la estructura de un gato tipo bosque de Siberia o de Noruega, se adapta a todas las texturas capilares y puede accesorizar un corte bob o una melena larga.

La combinación de capas, especialmente en la parte posterior de la melena y el degradado frontal con el que se enmarca el rostro, puede recordar mucho a otros cortes de pelo, también inspirados en animales como el butterfly, el cobra, el octopus o el wolf. Sin embargo, el kitty cut busca una estructura menos recortada.

Como en el flequillo drape o la melena esponjosa de Matilda Djerf, parte del encanto y de la necesidad de que el corte de pelo lo realice un profesional reside en que las capas están perfectamente unidas al degradado y el flequillo. Es una perfecta fusión que, por supuesto, necesita más retoques que otros estilismos.

La inspiración del corte de pelo es, eminentemente, setentera ya que, igual que el cobra cut o el mariposa, se abre sobre el rostro, capa sobre capa, acentuando las facciones y aportando mucho volumen.

Para identificar un kitty cut, hay tres elementos distintivos: lleva capas largas, face framing -para enmarcar el rostro- y flequillo tipo curtain. La forma de peinarlo también es muy particular pues, mientras otros cortes de pelo son de inspiración setentera o sustentados en capas, el kitty busca la redondez y la esponjosidad. No olvidemos que la estética noventera sigue siendo el referente beauty de esta década.

La longitud de las capas, así como la cantidad de estas depende, por supuesto, del largo de la melena. Cuando decimos que se trata de un corte de pelo versátil, es precisamente por esto. En una melena bob, el kitty cut se convierte en un aderezo con el que cambiar de look tan solo recortando las puntas y realizando un face framing. Es por ello que también se considera un corte de pelo para transicionar del bob a una melena más larga.

La forma en la que las capas largas recortan tanto la parte posterior de la melena como el escalado frontal triplica el volumen del cabello, especialmente al peinarse en liso y crear un gesto curvo en las puntas. Este gesto es el responsable del volumen retro del corte de pelo.

Mientras en melenas más cortas, como bob, lob o clavicut, tan solo se aprecia una capa larga a escasos centímetros de la punta, cuando el corte kitty se realiza sobre una melena más larga, se pueden llegar a realizar hasta 3 capas. La doble funcionalidad de estas capas estructura la melena, creando un corte escalado pero muy discreto y, al ser pulidas en las puntas, el volumen aumenta con esponjosidad.

Con la excusa de conectar el flequillo tipo curtain (largo y fino) con el resto de capas, el corte de pelo kitty recurre a un desfilado frontal. De nuevo, no hay cortes muy marcados al estilo del hime cut japonés, sino que es un degradado hecho a medida para cada rostro y tipología de cabello.

En las melenas largas, el corte queda mucho más setentero que en las melenas cortas, pero su éxito está en ese efecto de estilismo trendy que se adapta a todos los looks y cabellos, de ahí que su popularidad se haya extendido en cuestion de semanas y ya esté llamado a ser el corte de pelo del 2024.