Julio Iglesias, la prueba de ADN y una fortuna a repartir: "No va a ser un tema fácil"

Los españoles han crecido con él, un joven espigado con un sorprendente parecido físico a Julio Iglesias que clamaba en los medios su relación con el cantante. Su breve carrera discográfica, sus intentos de que la Justicia reconociera la filiación y su historia personal han llenado horas y horas de televisión. Ahora, después de que un detective consiguiera una prueba de ADN que concluye al 99% que Javier Sánchez Santos es hijo biológico del cantante, comienza el enésimo intento de que los tribunales le den la razón. Su defensa la lleva el conocido abogado Fernando Osuna, el mismo que llevó el caso al Cordobés, quien se muestra muy esperanzado. En el horizonte, no solo la dignidad de una familia que lleva años peleando. También, por qué no decirlo, una fortuna valorada en 790 millones de euros.

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El juicio se celebrará a puerta cerrada para preservar la intimidad del proceso y no contará con la presencia de Julio Iglesias, un jarro de agua fría para el desfile mediático. "Me lo preguntó -explica el abogado valenciano Fernando Falomir-, pero yo le aconsejé que no viniera, no iba a aportar nada nuevo y la distancia también justifica su ausencia". Falomir ya ha anunciado cuál es la estrategia de defensa del cantante, acudir a uno de los principios legales más arraigados del mundo: ninguna persona puede ser juzgada dos veces por la misma causa.

"Nosotros mantenemos que el asunto ya está juzgado en varios procedimientos anteriores, en un total de tres: dos en Valencia (1991 y 1992) y uno en Marbella en 2004". El cantante y sus abogados se van a aferrar a esa idea de que sería la cuarta vez que se analiza esta demanda de paternidad en los últimos 28 años. Y su intención es agotar todas las vías legales hasta que la resolución que tome el tribunal en este sentido sea firme.

En el primer procedimiento no se incluyó como demandado al padre legal de Javier Sánchez Santos, como era preceptivo legalmente, por lo que la causa fue sobreseída; y en el segundo se admitió la paternidad de Julio Iglesias en primera instancia, pero posteriormente la Audiencia Provincial revocó esta decisión y, a continuación, el Tribunal Supremo e incluso el Constitucional reforzaron esta resolución. La tercera demanda de paternidad de Javier Sánchez Santos se presentó en Marbella (Málaga) y en esta ocasión el juez consideró que el asunto estaba ya juzgado y no siguió con el proceso.

Si el juez y sus instancias superiores deciden que no estamos ante una cosa juzgada, Falomir anuncia que "Julio Iglesias no tendrá ningún problema en someterse a la prueba de ADN". Será el momento de activar el plan B de la defensa, consistente en conseguir una prueba genética de Julio Iglesias con todas las garantías procesales. "El juez consideró que en un principio nos negábamos a hacernos la prueba; entonces elaboramos un escrito para explicar que lo que no podía ser era que se le sometiera a Julio Iglesias a una prueba de extracción del ADN de forma anticipada, antes de que se dirimiera si había o no causa", explica el abogado castellonense a Vanitatis. "Se hará cuando quede resuelta la cuestión que hemos planteado, entonces sí tendrá sentido, no antes".

La prueba genética que aporta Javier Sánchez Santos fue obtenida por un detective en Miami de un objeto personal de Julio José Iglesias Jr. "Nosotros cuestionamos tanto la forma en la que se obtuvo la prueba como el análisis en sí mismo", avanzaba Falomir este fin de semana en una entrevista para la agencia Efe. "Hay poca jurisprudencia sobre la licitud de este tipo de pruebas en procesos civiles. Cuesta mucho de entender que en un ordenamiento jurídico con tanta protección sobre nuestros datos personales alguien pueda disponer de la mayor información posible sobre un individuo, como es su ADN, y que eso se pueda obtener sin consentimiento o autorización judicial es cuando menos cuestionable".

Así, el plan es el siguiente. En caso de que el juez considere que se debe continuar adelante con el proceso, la defensa de Julio Iglesias instará la suspensión del juicio para la práctica de la prueba de ADN en el marco del proceso y con todas las garantías. El abogado Falomir reconoce que "no es un tema fácil, hay muchas cuestiones que pueden ser tratadas mañana [por hoy] mismo".

La cita es a las diez de la mañana en el Juzgado de Primera Instancia número 13 de Valencia. "Puede que se resuelva en el momento o puede que su señoría decida suspender el proceso para resolver la cuestión de la cosa juzgada, eso sería lo lógico teniendo en cuenta la dificultad y la enjundia del tema", dice Falomir, consciente de la repercusión mediática del mismo.

Si después de toda la legión de escritos y recursos que se preparan, finalmente Javier Sánchez Santos fuera declarado hijo oficial de Julio Iglesias, entraría a formar parte de una familia numerosa de nueve hermanos. Los tres primeros, Chábeli, Julio José y Enrique, nacieron fruto del matrimonio del cantante con Isabel Preysler, y los otros cinco, Miguel Alejandro, Rodrigo, Victoria, Cristina y Guillermo, de su relación con su actual esposa, Miranda Rijnsburger. Nueve churumbeles para repartirse una herencia estimada en 790 millones de euros, según datos de 'El Mundo', y que extiende sus tentáculos por España, Miami y el Caribe.

Pero también para lucir con dignidad un apellido por el que lleva tres décadas luchando.