Diego Llorente: la vida familiar y el ADN madridista de la última baja de la Selección

En plena polémica por la decisión de vacunar o no a los jugadores de la selección española de fútbol cuando está a punto de comenzar su andadura en la Eurocopa, lo cierto es que se sigue hablando más de virus que de deporte. Tras el primer positivo de Sergio Busquets, ahora ha sido el defensa del Leeds inglés, Diego Llorente, el que ha dejado a Luis Enrique contra las cuerdas al dar positivo en las pruebas PCR.

Mientras que los restantes 22 futbolistas han tenido resultado negativo, según anunció la Real Federación Española. Fuera ya de la concentración, esta noticia supone un duro varapalo para este madrileño de 27 años que afrontaba ilusionado su primera gran cita internacional, pero ahora tendrá que conformarse con verla por televisión.

Pese a que ahora se encuentra viviendo su primera aventura internacional tras su marcha a la Premier League el año pasado, el central puede presumir de tener ADN merengue. El defensa fue quemando etapas en el Real Madrid hasta que en el 2013 se plantó en el filial blanco. Pero al no hacerse con un hueco en el primer equipo se marchó cedido al Rayo Vallecano y luego recaló en el Málaga para después irse definitivamente a la Real Sociedad.

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A. R.

Allí vivió tres exitosos años que terminaron con su fichaje por el equipo inglés. Llorente se despedía de los aficionados donostiarras con una emotiva carta en la que decía adiós a la ciudad "donde me he casado, he formado una familia, he visto nacer a mi hija y he sido inmensamente feliz".

Muy familiar, entre las numerosas fotos de fútbol que pueblan su cuenta de Instagram, no faltan Ana, su esposa, y su hija que acaba de cumplir dos años y que tiene un lugar muy importante en su muro y en su corazón. "Felicidades, princesa. Gracias por sacarme una sonrisa todos los días", era el mensaje que le dedicaba con motivo de esa fecha tan especial.

Muy especial fue también su último gol en Inglaterra, durante el partido que medía a su equipo contra el Liverpool. Tras anotar el tanto, el defensa señalaba al cielo en recuerdo a su abuelo, recientemente fallecido. "El gol es muy importante porque es para mi abuelo, que nos dejó hace dos meses", decía en una entrevista para 'Marca'.

En esa misma conversación aprovechó para hablar de cómo se ha adaptado a su nueva vida en Inglaterra. "Nada más llegar afronté muchos cambios: buscar casa, un estilo de entrenamiento distinto...", declaraba el madrileño. "Todo eso, inconscientemente, te afecta. Luego vine con la selección, que es algo que siempre me llena de orgullo, y sufrí un pinchazo que me obligó a volver a Leeds a recuperarme", añadía.

Una lesión aquella que fue poca cosa al lado de la gravísima que se produjo en 2018 cuando se fracturó el peroné y tuvo que estar varios meses de baja. Un duro golpe que afortunadamente superó, igual que a buen seguro hará con este último contratiempo con la Selección.