Es noticia
Menú
Ricardo Sanz, retratista de la familia real, nos cuenta su experiencia con ellos y sus retos
  1. Famosos
ENTREVISTA

Ricardo Sanz, retratista de la familia real, nos cuenta su experiencia con ellos y sus retos

El pintor estrena exposición y echa la vista atrás... Recordamos sus inicios como artista, hablamos de los cuadros que tiene entre manos y del momento actual del arte

Foto: Ricardo Sanz, ante el retrato del rey Felipe con su hija Leonor. (Cortesía)
Ricardo Sanz, ante el retrato del rey Felipe con su hija Leonor. (Cortesía)

'La luz como esencia del arte' es el título que ha elegido el retratista Ricardo Sanz para la exposición que se ha inaugurado este 20 de septiembre en las salas del Colegio de Ingenieros de Caminos de Madrid y estará abierta al público hasta el próximo 8 de octubre. Entrevistamos al reconocido retratista apenas unas horas antes de la inauguración para echar la vista atrás y, avisados están, nos remontamos a tiempos de Sorolla y Zuloaga, hablar del presente y del futuro en el que la pintura seguirá siendo protagonista.

Sanz, que tiene a sus espaldas una larga carrera, ha tenido momentos de gran notoriedad pública por las personas que se han puesto frente a sus pinceles y a una mirada que siempre busca el mejor lado de la realidad. El artista retrató al Príncipe de Asturias en su juventud, posteriormente junto a la ahora reina Letizia, y al lado de su primogénita y heredera, la princesa Leonor. En el camino también encontramos un celebrado retrato de la reina Sofía, por quien profesa una gran admiración.

Ricardo se muestra reservado a la hora de hablar de la familia real, como no puede ser de otra manera, pues respeta profundamente la confidencialidad de este tipo de relaciones, pero se muestra mucho más expansivo a la hora de hablar de su pasión por la pintura, la búsqueda de la belleza y sus vivencias siempre en la búsqueda del perfeccionamiento profesional.

La luz es clave en toda su carrera pictórica y nuevamente lo deja patente en el título de esta nueva exposición.

Claro, 'La luz como esencia del arte', porque desde mis comienzos ha sido un punto básico, investigar tanto en los paisajes como en los retratos, en los interiores... Siempre pensaba en la luz, la luz, la luz...

¿Qué nos vamos a encontrar en esta exposición?

Los tres temas fundamentales que toco, el retrato, el paisaje y la composición de figura. En cuanto al paisaje, hay una parte dedicada a la inspiración que me produjo la pandemia al descubrir la belleza de los paisajes urbanos sin gente. Son de una belleza muy especial porque uno puede entender con más claridad los edificios, las calles, y disfrutarlas a pesar de la melancolía y la soledad.

placeholder 'Hijas del Albaicín', uno de los cuadros de su última exposición. (Cortesía)
'Hijas del Albaicín', uno de los cuadros de su última exposición. (Cortesía)

Ha retratado a gente muy célebre a lo largo de su carrera, pero del retrato que más orgulloso se siente es el de su madre. ¿Qué tiene de especial?

Fue hace muchos años y se produjo en unas circunstancias muy especiales y agradables, en verano, en San Sebastián, pintado sin prisa, charlando. Además, es que mi madre... El resultado, quizás porque era mi madre, era fabuloso.

También ha retratado a distintos miembros de la familia real y quería que hiciéramos un pequeño recorrido por ellos. Al primero que pintó fue al Príncipe de Asturias, ¿qué recuerda de esa experiencia?

Fue la primera vez que fui a Zarzuela y fue muy interesante y curioso.

placeholder Retrato de don Felipe y doña Sofía. (Cortesía)
Retrato de don Felipe y doña Sofía. (Cortesía)

Posteriormente, hizo un retrato de don Felipe con doña Letizia.

Sí, la experiencia fue distinta, ya tenía más experiencia con ellos, porque ya había pintado antes a la reina Sofía...

Luego hablaremos también sobre ese cuadro. Volvamos a Felipe y Letizia

Surgió la idea de pintar ese cuadro con los dos ya juntos y fue una experiencia estupenda. Posaron para mí, pero además se hizo una sesión fotográfica para luego poder continuar con el trabajo pictórico. De esa forma también se ahorran sesiones de trabajo y se puede ir adelantando. Antes se posaba más, pero cada vez es más complicado, así que este procedimiento resulta más cómodo para todos.

¿Es el mismo procedimiento que utilizaron entonces cuando el rey Felipe VI posó con su hija Leonor?

Sí, así fue.

placeholder Su retrato de la reina Sofía. (Cortesía)
Su retrato de la reina Sofía. (Cortesía)

Como usted decía, no podemos perder de vista el retrato de la reina Sofía, a quien pinta de una manera muy natural, sin atributos de reina...

Es un cuadro del estilo que ella quería. Yo hablo personalmente con ellos antes de realizarlo y por eso se realizó de esa forma. Me gustó muchísimo pintar a doña Sofía y fue una experiencia muy agradable.

Cuando se pinta a personajes públicos, ¿se siente el peso de que no se sientan bien retratados?

Aunque no sean personajes conocidos, eso nos gusta a todos... Nos gusta que nos saquen lo mejor posible. No se trata de mentir, sino de buscar la luz, el gesto, la pose que a uno le favorece más, ensalzar lo más bello que tiene una persona... La experiencia que tengo en ese campo hace que encuentre el mejor lado de la persona que voy a retratar.

Más allá de lo que ven nuestros ojos, captar la personalidad de cada uno, o si se prefiere, el alma, debe de ser lo más complicado.

Es muy importante. Yo hago un estudio psicológico muy profundo de la persona a la que voy a retratar. Y a partir de ahí miro a la persona de otra manera, el cerebro trabaja en esa dirección hacia lo que quiero conseguir. Aparte del parecido físico y de lo que hablamos, tiene que ser un retrato bello en sí mismo. Como nos ocurre cuando vemos cuadros de Velázquez... Nosotros no conocimos a Felipe IV y su retrato es maravilloso. El cuadro tiene que ser en sí mismo una obra de arte. Por supuesto, tiene que ser la persona, su interior, su forma de ser... Y también debe de tener algo de misterio en su mirada, que no lo diga todo. Cada espectador que ve un cuadro ve cosas diferentes. He escuchado comentarios de cuadros míos que jamás hubiera imaginado.

placeholder Su retrato de Jesús Posada. (Cortesía)
Su retrato de Jesús Posada. (Cortesía)

Otro de sus retratados es Jesús Posada, quien fuera presidente del Congreso de los Diputados. Hablamos de un cuadro histórico...

Hay una galería de retratos de todos los presidentes del Congreso de los diputados desde el siglo XIX, con las mejores firmas, desde Sorolla, Madrazo, Macarrón... Y allí se encuentra el mío de Jesús Posada, por lo que es una enorme satisfacción tener ese cuadro ahí.

Lola Herrera siempre ha sido una mujer guapísima e inteligente. ¿Fue un reto para usted retratarla?

Fue muy agradable porque tenía bastante tiempo en ese momento, pese a que se encontraba trabajando en televisión. Charlamos mucho, lo hicimos con mucha amistad y me siento muy satisfecho de ese retrato también. Es de uno de esos retratos que una vez los terminas te quedas muy satisfecho.

placeholder Su retrato de Lola Herrera. (Cortesía)
Su retrato de Lola Herrera. (Cortesía)

Usted parecía llamado a dedicarse al mundo del arte, porque su abuelo tenía en San Sebastián una galería por la que pasaban los mejores de la época, como Sorolla o Zuloaga, ¿qué recuerda de él?

Recuerdo lo que me han contado, porque mi abuelo murió cuando yo era muy niño y todo esto sucedió antes de la guerra. La gente más interesante de la sociedad española pasaba por San Sebastián en esa época y por eso los pintores más importantes pasaban por allí si no a exponer, a charlar. Se creó un ambiente interesantísimo.

Se fue a Francia y a Italia a aprender, pero donde acabó encontrando su lugar en el mundo fue en Madrid. ¿Qué tenía de especial?

En esa época había pintores excelentes en Madrid, con mucha fuerza. Como Macarrón, Torrent Lladó y otros menos conocidos eran retratistas que me interesaban muchísimo. Tuve la oportundiad de conocerlos. Era un jovencito que empezaba y quería aprender de una generación anterior que pintaba con una gran fuerza. Eran extraordinarios.

Y luego, como Manet en sus tiempos, encontraba la inspiración en el Museo del Prado.

¡Claro! Tomaba mis apuntes de los pintores que más me gustaban, para ver cómo lo hacían, con mis cuadernos, en los que iba tomando notas sobre las atmósferas, los espacios...

placeholder 'Luz de mañana en la calle de Alcalá', otra de las obras de su nueva exposición. (Cortesía)
'Luz de mañana en la calle de Alcalá', otra de las obras de su nueva exposición. (Cortesía)

Más allá de la pasión por la pintura, estudió Historia del Arte. ¿Le sirvió de ayuda esa licenciatura?

Muchísimo. Siempre me han gustado muchísimo las humanidades, la historia, la literatura. Era una carrera que me daba tiempo para pintar, dedicaba las tardes enteras de lleno a ello. Mis padres querían que tuviera una licenciatura, así que elegí esta.

Aunque no son los caminos que usted transita, ¿qué opina del arte urbano o de fenómenos como Banksy?

A mí personalmente no me atrae ese mundo, los tiempos cambian y habrá gente a la que le guste. No voy en esa dirección. Seguro que habrá cosas interesantes, pero a priori no tengo especial interés.

¿Y lo que conocemos como arte contemporáneo?

No sé por qué utilizamos la expresión 'arte contemporáneo', aunque yo también la uso... ¿Qué soy yo o los que, como yo, pintamos figurativo, unas momias? Parece que todo va en una sola dirección, pero hay mucha gente que hacemos otras cosas. No debería ser excluyente. No sé por qué no pueden estar en ARCO o en el Reina Sofía personas que como yo seguimos estas tendencias, aunque yo tengo un sello muy característico. No pasa nada...El sentido común de las personas está ahí y el que quiera engañarse, que se engañe. A mí lo que me interesa es el arte y el sentimiento, transmitir al espectador la belleza. ¿Cuál es el objeto del arte? El goce del espíritu, de nuestro ser más profundo. Para que vibre algo en nuestro interior cuando nos ponen ante la vista algo sublime. Por eso desde el principio de los tiempos se ha dado mucha importancia al arte.

placeholder 'La Gran Vía entre dos luces', otro de los cuadros. (Cortesía)
'La Gran Vía entre dos luces', otro de los cuadros. (Cortesía)

¿Qué personaje histórico o contemporáneo le gustaría pintar?

Muchísimos... Algún escritor del siglo XIX, que escribían esas novelas tan maravillosas, Victor Hugo. Flaubert o, por decirte algún español, Pio Baroja, no por él sino por las obras tan maravillosas que escribía. El siglo XIX fue muy interesante desde el punto de vista del arte, hasta entrado el XX.

¿En qué está trabajando ahora?

Tengo varios cuadros empezados. Con el verano y la exposición tenía un paisaje al que le faltaban unos toques, pero no lo he acabado. Y también estoy con un boceto del que solo he hecho los primeros trazos.

'La luz como esencia del arte' es el título que ha elegido el retratista Ricardo Sanz para la exposición que se ha inaugurado este 20 de septiembre en las salas del Colegio de Ingenieros de Caminos de Madrid y estará abierta al público hasta el próximo 8 de octubre. Entrevistamos al reconocido retratista apenas unas horas antes de la inauguración para echar la vista atrás y, avisados están, nos remontamos a tiempos de Sorolla y Zuloaga, hablar del presente y del futuro en el que la pintura seguirá siendo protagonista.

Rey Felipe VI