El 'divorcio' amistoso de Pepe Rodríguez y su hermano Diego en el restaurante El Bohío
El hermano del mediático chef ha decidido abandonar la jefatura de sala del restaurante familiar y dedicarse de lleno a su negocio hostelero
Pepe Rodríguez siempre ha dicho que él y su hermano Diego son muy diferentes. Juntos han trabajado casi 40 años en el negocio familiar, el restaurante El Bohío, del que el primero era el chef y el segundo el jefe de sala. Hasta hace unos meses, cuando Diego decidió ‘divorciarse’ de su hermano y abandonar el restaurante fundado por su abuela y su tía abuela allá por los inicios del siglo XX.
Los hermanos Rodríguez Rey siguen siendo socios de la empresa, junto a su padre, aunque Diego ya no trabaja allí. “Necesitaba un respiro -nos comentan fuentes cercanas a los hermanos-. Con la entrada de Pepe en ‘MasterChef’, Diego se cargó de demasiadas responsabilidades y al final prefirió apartarse, darse un descanso. Ahora dirige un negocio hostelero por su cuenta”.
Diego Rodríguez se hace llamar Diego Rey en su nueva etapa empresarial, en la que dirige el negocio Rent a Catering, empresa dedicada a la hostelería que suministra mobiliario y diferentes utensilios a restaurantes, entre ellos El Bohío. “Ofrecemos un servicio integral, asesoramiento en cualquier aspecto relacionado con la hostelería y la restauración. Porcelanas, cuberterías, cristalerías, utensilios de cocina a precios competitivos adaptados a su negocio”, señalan en la web de la empresa.
“No ha habido ni malos rollos ni nada, simplemente un cambio de aires. Pepe puede dedicarse a la cocina y a sus otras actividades y Diego quería mantenerse con cierta distancia”, nos cuenta una fuente cercana a la productora del programa Shine Iberia. Desde Vanitatis hemos intentado hablar con Pepe Rodríguez para saber cómo funciona el negocio sin su hermano y conocer de primera mano a qué se dedica ahora Diego, pero no hemos obtenido respuesta.
Diego fundó su empresa hace años, en 2003, y es administrador y socio único. No ha sido hasta hace poco que ha decidido dedicarse a ella por completo. Rent a Catering SL ha sufrido los estragos de la pandemia y en los dos últimos ejercicios ha registrado pérdidas, de 9.000 y 34.000 euros respectivamente.
La pandemia ataca
La crisis de la pandemia también ha tocado duro a El Bohío. Lo ha dicho el propio Rodríguez en numerosas ocasiones. “Si solamente tuviésemos los restaurantes, estaríamos hablando de otra cosa y sufriríamos de otra manera. No lo quiero ni pensar, hemos tenido suerte”. Una suerte que se ha mantenido en el tiempo pese a las crisis que le han perseguido. Entre sus clientes más ilustres no podemos dejar de mencionar a don Juan de Borbón, que fue con su hija, la infanta Pilar, o al Rey emérito, Juan Carlos I, cuyas fotografías guardan en el local con cariño especial.
Pepe se crio entre las paredes del restaurante familiar. Empezó barriendo y limpiando la barra y nunca pensó en trabajar en la cocina. Cuenta que lo hizo para salvar el negocio. Ahora, con una estrella Michelin y un prestigio que va más allá del país, Pepe admite que le gusta trabajar también en televisión porque ha supuesto “una de las cosas más bonitas” de su vida.
Valentina y Romana
El Bohío fue fundado en 1934 por la abuela de Pepe, Valentina, y su hermana Romana. Su padre, que sigue como administrador del restaurante junto con sus hijos Pepe y Diego, fue novillero y fotógrafo hasta que decidió tomar las riendas del negocio familiar. Algo que hicieron también sus hijos después de pasar un tiempo como camareros en el local.
Pepe, cuentan, sigue al pie del cañón siempre que los compromisos televisivos le dejan, claro. Intenta ir cada día al local, donde suele entrar a las 9:30 de la mañana y tiene la suerte, dice, de contar con un equipo que le permite ausentarse para otros quehaceres. Casado con su pareja de toda la vida, Mariví, tienen tres hijos, con quienes vive en Illescas, donde encuentra la paz y la tranquilidad que cree que Madrid no le permitiría tener.
Otros negocios
El mediático chef tiene otras empresas: es el propietario y único administrador de Asesoramiento Integral de Cocina SL, sociedad fundada en 2008 y que registra buenos números a cada ejercicio. En el último, el de 2018, los beneficios fueron de 98.431 euros, con unos ingresos de 216.600 euros. Con sede en Toledo y dedicada a “asesoramiento en temas culinarios y de hostelería en general”, esta sociedad se suma a la tercera, Estoy de Rodríguez SL, dedicada al “comercio al por mayor, no especializado, de productos alimenticios, bebidas y tabaco”.
Cuando llegó al programa televisivo, el restaurante familiar no pasaba por un buen momento. Con una estrella Michelin intacta desde 1977, la crisis financiera que arrasó con tanto a partir de 2008 tocó directamente a El Bohío. “Debo confesar que hoy tengo sentimientos encontrados. ‘MasterChef’ también a mí me ha cambiado la vida. Cuando me llamaron para ser juez estaba en una situación muy complicada, pero muy complicada. Los negocios son así y por más ilusión que le pongas no siempre cuadran las cuentas. Vamos, que estaba al límite”, ha dicho.
Situado en Illescas, en una zona donde la burbuja inmobiliaria estalló de lleno, el restaurante vio cómo muchos de sus clientes desaparecían. Así que la llegada de ‘MasterChef’ fue maná para los hermanos, un regalo que paradójicamente terminó por separarlos.
Pepe Rodríguez siempre ha dicho que él y su hermano Diego son muy diferentes. Juntos han trabajado casi 40 años en el negocio familiar, el restaurante El Bohío, del que el primero era el chef y el segundo el jefe de sala. Hasta hace unos meses, cuando Diego decidió ‘divorciarse’ de su hermano y abandonar el restaurante fundado por su abuela y su tía abuela allá por los inicios del siglo XX.