El otro gran secreto de Jorge Fernández (además de su novia): su faceta empresarial

El pasado fin de semana, Jorge Fernández sorprendía a quienes le conocen y le siguen de cerca haciendo algo que no acostumbra a hacer jamás, y es abrir una puerta a que se conozcan detalles de su vida privada. Lo hizo por todo lo alto, publicando en su perfil de Instagram no una, sino varias fotos con su pareja, Nora Aristegui, disfrutando de un romántico viaje por la capital de los Países Bajos.

Es algo que no había hecho jamás, y eso que hace años que comparten su vida y que él es muy activo en redes. Ella, sin embargo, es muy discreta en este sentido, utiliza esta nueva forma de comunicación, pero de manera muy puntual, pues se dedica a la dietética, y es ahí donde vuelca todos sus esfuerzos.

De hecho, es un interés que ambos comparten, pues Jorge es un activo defensor de los hábitos de vida saludables, de la importancia del deporte y la alimentación para la salud a largo plazo, para la longevidad y para disfrutar del día a día, algo que predica a menudo desde su altavoz virtual. El presentador es especialmente insistente en la importancia de que los niños, desde pequeños, adquieran prácticas beneficiosas para su salud. El vasco también es padre, aunque su hijo tiene ya 19 años. Según confesó a este medio, “desde que nació" es su "motor”.

Lleva 18 años al frente de ‘La ruleta’, y ha aprovechado esta estabilidad que pocas veces sucede en televisión para poder desarrollar en paralelo otros proyectos de su interés. El último de ellos, una aplicación que ayuda a sus usuarios a crear una dieta con la que lograr diferentes objetivos tales como ganar o perder peso, aumentar masa muscular, energía… Es decir, a aprender a comer mejor según sus necesidades.

Pero empecemos por el principio. El exmodelo comenzó su andadura en el mundo de los negocios en el año 2000 con Mondra Imagen SL, empresa a través de la que gestionaba su carrera como modelo inicialmente, pues solo un año antes había ganado el certamen de Míster España, y posteriormente también sus ingresos por sus trabajos como actor y presentador.

En 2013 esta entidad dejó de registrar actividad, pero en 2017 el presentador decidió retomarla y desde entonces permanece en activo y parece que con números cada vez mejores. En 2022 ha facturado 131.000 euros y mantiene un total activo de casi medio millón, 466.000 euros concretamente.

Años después, en 2009, probó suerte en un campo muy ajeno a lo que hasta entonces había explorado. Se aventuró con Vermunorte 2000 SL en el mundo de las inversiones inmobiliarias. Junto a otros socios, se dedicaba a invertir en fincas rústicas y urbanas. Pero fue un proyecto que pocos años después de nacer cayó en el olvido, pues desde 2013 no presenta actividad ni ha presentado cuentas.

En 2012 y junto a otros dos socios, comenzó a formar parte de Saned Norte SL, una sociedad dedicada a la hostelería con un fin muy concreto y muy acorde a las creencias y la lucha del ex Míster España. Se trata de una empresa cuyo fin es crear menús ‘gourmet’ y organizar el servicio de comedor, desayunos y meriendas de los colegios que lo requieran apostando por una comida con productos de calidad y cocinado prémium, según reza su página web, en la que también detallan que se ofrecen servicios de actividades extraescolares.

Es el compromiso con la buena alimentación infantil hecho empresa; sin duda, una iniciativa, cuando menos, original y con muchos valores, a la que, sin embargo, no acompañan los números. Desde 2020 no presentan cuentas, y en aquel año, tal como ocurrió a casi todo el sector hostelero, no fueron muy buenas. Registraron pérdidas de 15.000 euros a pesar de haber facturado casi 100.000. Pero lo cierto es que tampoco el año anterior la situación era muy boyante, pues en 2019 ya hubo pérdidas, aunque menores, no llegaron a los mil euros.

Esta faceta como empresario es casi tan desconocida como lo era su pareja. Jorge Fernández no es dado a hablar de lo que ocupa su vida más allá de la pantalla, no solo en lo referido a su situación sentimental, tampoco a su familia o a esta faceta empresarial desconocida. Lo que resulta evidente es que es un hombre comprometido que cuando cree en algo lucha por ello, de ahí que haya hecho uso de sus redes para hacer un llamamiento incluso a “los que mandan” pidiendo una campaña de concienciación social para la mejora de los hábitos de la población.

Y es que él mismo pasó unos años difíciles cuando sufrió la enfermedad de Lyme y una intoxicación de metales pesados, lo que le llevó a valorar aún más la salud, algo que se ha convertido además de en su eje de vida, en su otra faceta profesional.