La gran fiesta de Ágatha Ruiz de la Prada para recibir a los vendedores de su casa

Ágatha Ruiz de la Prada ejerció el jueves por la noche de anfitriona con la familia Kretz, dueños de una de las agencias inmobiliarias más importantes de Francia. El matrimonio formado por Sandrine y Olivier y sus cuatro hijos Martin, Valentin, Raphael y Louis son los protagonistas de una serie de Netflix donde comparten su vida laboral y familiar.

La dedicación de todos ellos es la compra y venta de inmuebles y el asesoramiento personalizado. En el reality se muestran tal cual y con personalidades muy diferentes que chocan a la hora de tomar las decisiones empresariales, aunque finalmente el voto de calidad acaba en manos de los padres, que tienen que hacer equilibrios con los caracteres tan diferenciados de sus hijos.

El reality es uno de los productos de más éxito de la plataforma y, entre los atractivos, muestra los lugares más llamativos de París y del resto del país. Lo mismo ofertan un castillo en el Loira que un apartamento de una habitación con una impresionante terraza y vistas a la torre Eiffel que un 'bateau mouche' como vivienda.

La reunión festiva, en la que la familia y la diseñadora compartían protagonismo, tenia como objetivo dar visibilidad a la agencia que en definitiva es quien se encarga de buscar compradores para la que ha sido la casa familiar de Ágatha. El ático, de 700 metros cuadrados distribuidos en dos pisos se encuentra en el paseo de la Castellana, una de las mejores zonas de Madrid. El precio estipulado es el de siete millones y medio de euros.

A las ocho de la tarde comenzaron a llegar a la casa de la empresaria los primeros convocados. En la puerta de entrada, Ágatha y el matrimonio Kretz ejercían de anfitriones. Los invitados se iban distribuyendo por la casa y la terraza mientras un grupo musical sonaba de fondo.

Los camareros ofrecían cava, vino y refrescos. Como no podía ser de otra manera, los canapés y sándwiches estaban agathizados en forma de corazones, lunas, estrellas y demás elementos esenciales en los diseños que crea Ruiz de la Prada.

Una vez que el grueso de los amigos y conocidos ya estaban instalados en el ático, Ágatha tomó la palabra y contó cómo fue su primer encuentro personal, ya que la serie es una de sus favoritas. "Soy fanática de esta familia. Que sean ellos los que se encarguen es una maravilla. Como me dicen, ha sido la venta de una casa menos confidencial que han tenido en su listado", contaba.

"Un día me llama el hijo, Louis, y a partir de ese momento nos hicimos muy amigos y esa es la historia de por qué estamos hoy aquí. Esta casa ha quedado grande una vez que mis hijos tienen sus vidas. He querido que esta fiesta sea el principio de todo lo bueno que está por llegar para mí y para esta familia tan fantástica", continuaba, dando las gracias a todos los asistentes por estar allí.

A continuación, tomó la palabra Louis que, junto con su novia, Adriana Pinos, son los jefes de Kretz Spain. El hijo tuvo un detalle con su pareja a la que presentó como su mitad.

Tras los discursos continuó la noche festiva. Entre los muchos asistentes se encontraban Carlos Benedito, Pilar Alvargonzález, Jordi y Raquel Folch, Kati Mikhailova, Pascua Ortega, Beatriz Silverio, decoradora de la casa de Tamara Falcó, Arnaud Millar y Alvaro Castejón (Alvarno), María Franco, de la fundación Lo que de verdad importa, Rocío Satrústegui, Ignacio Calderón, Blanca Entrecanales.

También asistieron la doctora Isabel Alonso, Elsa Anka, la escritora Lucía Montojo, a punto de publicar su libro de poemas, la mujer del cirujano plástico Juan Peñas, Tata Pérez Olmedo, Begoña Vázquez de la agencia Kretz, el abogado Ramón Porteirio y Tristán, el hijo de Ágatha y Pedro J. Ramírez al que felicitaron por su reciente paternidad.