Patricia Rato, 'funcionaria' del Ayuntamiento de Sevilla
Desde que se casó, recién cumplidos los veinte, la vida de Patricia Rato siempre giró en torno a Espartaco. El torero era la figura y ella la consorte,
Desde que se casó, recién cumplidos los veinte, la vida de Patricia Rato siempre giró en torno a Espartaco. El torero era la figura y ella la consorte, siempre a su vera y sin llamar la atención. Eligió ser ama de casa y dedicarse exclusivamente a la familia. A pesar de ser un personaje atractivo para la prensa, nunca concedió reportajes en solitario ni declaraciones ni protagonismos colaterales que pudieran empañar a su marido. A lo más que llegó fue a ser acompañante en todas las convocatorias públicas a las que acudía con Espartaco.
Pero todo cambió con el divorcio contencioso. No sólo el estado civil sino su economía. Si antes el torero era el mantenedor de la unidad familiar, después de la ruptura fue una sentencia judicial la que dictaminó los gastos que cada uno debía sufragar para el mantenimiento de los hijos. Patricia no solicitó pensión compensatoria y, aunque salió favorecida por la decisión de la jueza, debe trabajar fuera de casa para su sostenimiento personal.
Una de las actividades que va a desarrollar y que ella misma contó en ¡Hola! serán sus entrevistas solidarias para la revista Telva. Hasta que no publique la primera, es difícil explicar en qué consistirá su nuevo cometido, aunque aclaró en su día a Vanitatis: “Respeto profundamente el trabajo de los periodistas y, por lo tanto, no ejerceré de lo que no soy. Lo que voy a hacer en Telva tiene que ver con la faceta más comprometida de la gente”.
Pero ésta no será la única dedicación de Patricia, a la que han tentado otros grupos empresariales con diversas propuestas. Ella las estudia y sopesa, porque “lo primero son mis hijos y, por lo tanto, tengo que adecuar mis futuros trabajos a ellos”. Una de estas proposiciones vendría del Ayuntamiento de Sevilla, que la quiere para que se encargue del área de Cultura. Según parece, las conversaciones entre los responsables del Consistorio y la ex del torero han sido de lo más productivo.
Patricia Rato podría convertirse en breve en “funcionaria” de libre elección, como también lo es la hermana de la princesa Telma Ortiz. Respecto a su vida amorosa, las amistades que la frecuentan aseguran a Vanitatis que “ni tiene novio ni ganas de tenerlo. Otra cosa es que salga con amigos y que estos, a su vez, le presenten gente. Lo ha pasado muy mal y es natural que quiera divertirse“.
Enlaces relacionados
Patricia Rato, por la senda de Koplowitz
Patricia Rato: “No tengo novio ni ganas de tenerlo”
Desde que se casó, recién cumplidos los veinte, la vida de Patricia Rato siempre giró en torno a Espartaco. El torero era la figura y ella la consorte, siempre a su vera y sin llamar la atención. Eligió ser ama de casa y dedicarse exclusivamente a la familia. A pesar de ser un personaje atractivo para la prensa, nunca concedió reportajes en solitario ni declaraciones ni protagonismos colaterales que pudieran empañar a su marido. A lo más que llegó fue a ser acompañante en todas las convocatorias públicas a las que acudía con Espartaco.