La estancia más desapercibida de Zapatero y su mujer en Lanzarote
Cautivados por el paisaje de Famara, una zona situada al noroeste de la isla, el matrimonio se ha alojado en un bungalow con preciosas vistas al mar
“Hay pocos sitios en España y en Europa como Lanzarote. Lanzarote es todo naturaleza, es vida, es descanso, es amabilidad de la gente… He pasado ya varias vacaciones en esta isla y, desde luego, a todo el que pueda que venga a Lanzarote”. Así describía José Luis Rodríguez Zapatero el que viene siendo su destino vacacional desde hace varios años. Empezó veraneando en la isla canaria en 2005, cuando acababa de ser elegido presidente del Gobierno, y ocho años después, ya alejado de la política, ha vuelto a reunirse con su isla querida. Cautivados por el padisíaco paisaje de Famara, una zona situada al noroeste, Zapatero y su mujer, Sonsoles Espinosa, se han escapado a la isla canaria por una semana. La pareja aterrizaba en Lanzarote el día 11 de agosto y se marchaba el pasado domingo.
Mucho han cambiado las cosas desde ese verano de 2005. Con la llegada de Mariano Rajoy a la Moncloa, Zapatero desapareció de la vida pública y sus apariciones en los medios se pueden contar con los dedos de una mano a lo largo del año. Dicen quienes le tratan a menudo que desde que abandonó su cargoestá mucho más tranquilo. Una tranquilidad que no quiere que nadie le perturbe.
Tanto es así, que si en años anteriores las vacaciones de Zapatero eran retransmitidasa través de los medios, este año el socialista ha pasado totalmente desapercibido en su isla preferida, sin que haya trascendido imagen alguna. Su estancia sólo es constatada por los relatos de los lanzaroteños de la zona, cada vez más acostumbrados a la presencia del ex mandatario del Gobierno.
Predilección por Famara
La zona de Famara es uno de los enclaves favoritos de Sonsoles Espinosa, queen estos asuntos es quien lleva la voz cantante. Sus siete kilómetros de costa lo convierten en el sitio perfecto para practicar footing, el deporte favorito de su marido, y sus aguas reunen además a muchos amantes del windsurf y el kitesurf. Para hacer submarinismo, la gran afición de la soprano, Sonsoles tiene que desplazarse a las zonas de Puerto del Carmen, en el Barranco del Quíquere y los alrededores de Puerto Calero, donde se encuentra la lujosa urbanización en la que se instaló el matrimonio el verano pasado.
Tal es la predilección de Zapatero y Espinosa por Famara, que hace un año y medio volaron desde Madrid con la idea de adquirir una vivienda para alojarse en sus frecuentes estancias en Lanzarote. Para ello, el exlíder socialista contó con un grupo de asesores que nada tienen que ver con agentes inmobiliarios, sino más bien concargos del Partido Socialista de la isla, quienes ejercieron de ciceronescon él. Incluso le facilitaron una cartera de 4 o 5 casas que, por sus características y precio, se adecuaban perfectamente a las necesidades y gustos del matrimonio, entre las que se encontraba la misma que han elegido para veranear estos días. Pese a todo, finalmente no llevaron a cabo la compra de ningún inmueble, cuyo valor rondaría desde los 300.000 hasta los 700.000 euros.
Dos veraneantes más
En Famara el matrimonio se ha mimetizado con el entorno y se han convertido en dos veraneantes más. Según informa el diario Las Provincias, Sonsoles fue vista en un supermercado de la zona comprando pan de cereales y un bote de miel. Una de las pocas salidas de la pareja que prefiere no salir de su refugio. Un bungalow que han alquilado para estos días y que cuenta con todo tipo de comodidades y unas magníficas vistas a La Graciosa y los islotes del Archipiélago Chinijo. En el mismo residencial, que consta de unas 190 viviendas con parcela y jardín independiente, tiene su casa de verano el modelo Jon Kortajarena.
José Luis Rodríguez Zapatero y su esposa son ya unos grandes conocedores de los rincones de la isla, por eso, aparte de las playas, visitan sus mejores restaurantes. Este año, el matrimonio se ha dejado ver en La Casa Roja en Puerto del Carmen, local donde se dice que sirven las mejores gambas y licor de orujo, que traen directamente de Galicia y que de vez en cuandosu propietario envía al expresidente a su domicilio de Madrid. La pareja también ha comido en el restaurante La Cascada, de la misma zona, y en el Castillo San José, en Arrecife.
Algunos de estos comedores son también frecuentados por otras personalidades de la política, como el presidente de Canarias, Paulino Rivera, y el ministro de Industria, Energía y Turismo,José Manuel Soria, que casualmente también han veraneado en la isla estos días.
Vacaciones muy distintas a las de Rajoy
El mismo día que Zapatero iniciaba sus vacaciones en Lanzarote, el actual presidente del Gobierno, hacía lo propio en su tierra natal, Pontevedra. Unas jornadas de descanso que se han visto alteradas con la crisis diplomática generada por Gibraltar estos días y que aún hoy permanece. Con un paisaje mucho más rural que el que ha conquistado a Zapatero, Rajoy se ha decantado por A Casa Alicia, en Ribadumia, Un enclave con vistas a la Ría de Arousa con cerca de 3.200 metros cuadrados de terreno ajardinado, piscina, dos terrazas exteriores, tres habitaciones y salón con chimenea.
Si Zapatero ha aprovechado las costas de Lanzarote para hacer footing, Rajoy ha disfrutado en su tierra de su ruta favorita:la Ruta da Pedra e da Auga, un paraje idóneo en el que perderse y descubrir los secretos en granito de la vida rural gallega de principios del siglo XX.
“Hay pocos sitios en España y en Europa como Lanzarote. Lanzarote es todo naturaleza, es vida, es descanso, es amabilidad de la gente… He pasado ya varias vacaciones en esta isla y, desde luego, a todo el que pueda que venga a Lanzarote”. Así describía José Luis Rodríguez Zapatero el que viene siendo su destino vacacional desde hace varios años. Empezó veraneando en la isla canaria en 2005, cuando acababa de ser elegido presidente del Gobierno, y ocho años después, ya alejado de la política, ha vuelto a reunirse con su isla querida. Cautivados por el padisíaco paisaje de Famara, una zona situada al noroeste, Zapatero y su mujer, Sonsoles Espinosa, se han escapado a la isla canaria por una semana. La pareja aterrizaba en Lanzarote el día 11 de agosto y se marchaba el pasado domingo.