'La revancha de una discreta', así ve la prensa internacional el regreso de la infanta Elena

“Elena está de vuelta en la vida oficial”, esta es la conclusión a la que ha llegado la prensa francesa, tras analizar los últimos pasos de la infanta. Tras varios años con un perfil más que bajo, según afirman categóricamente desde la revista especializada en casas reales 'Point de Vue', la hermana mayor de Felipe VI habría encontrado en los últimos actos de su agenda (oficial y privada) la mejor reivindicación de su importante presencia en Zarzuela.

“A sus 55 años y, tras pasar varios años alejada de la vida pública, la hija primogénita del rey Juan Carlos parece haber protagonizado un regreso programado a la escena royal. Popular, irreprochable y Borbón hasta la punta de los dedos, Elena de España recupera su destino de infanta”, aseguran como introducción a una extensa lista de argumentos que sostienen su teoría.

Su escalada de presencia social, para ellos, no deja lugar a dudas. No solo ha protagonizado más actos que antes, sino que ha recuperado algunos en los que hacía más de una década que no participaba e, incluso, podría haber suplido a Letizia en uno de ellos. Pero, empecemos por el principio, ¿cuándo consideran que comenzó a poner en marcha su estrategia?

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La 'princesa intachable'

11 de mayo. La infanta Elena viaja hasta Jerez para asistir a la feria anual del Caballo. Lo hace “delgada, elegante y más Borbón que nunca con su abanico”, aseguran desde la publicación gala. Un evento ecuestre con fama internacional al que la primogénita del rey emérito asiste por dos motivos: su más que conocido amor por los equinos y la entrega de la medalla del 50º premio del Caballo de Oro al escuadrón de la escolta real. Nada más y nada menos. “Y para muchos, el mensaje está claro”.

Sobre todo para ellos. Los expertos de 'Point de Vue' consideran este acto como una auténtica declaración de intenciones. Se trata de “la revancha discreta de una princesa intachable”.

Y es que, a raíz de las alabanzas con las que describen la trayectoria vital de la infanta Elena, les resulta casi increíble que durante los años en los que se alargó el proceso judicial del caso Nóos, la primogénita de los eméritos fuera relegada a un segundo plano. “Parece como si en el palacio de La Zarzuela se hubieran acordado de repente de que el Rey tiene dos hermanas. Y de que la mayor, irreprochable, podía ayudar a redimir la imagen comprometida de la pequeña”, exponen a sus lectores, a quienes definen a la duquesa de Lugo como una pretérita reina ejemplar.

“Encarna la institución monárquica de maravilla y para los más conservadores, desde donde censuran los orígenes plebeyos de Letizia, Elena habría sido una reina perfecta”. Y no solo por sus aptitudes (ensalzadas ampliamente a lo largo del texto) sino también por sus actitudes. “Elena de España es alabada por ser la más andaluza de todos los miembros de su familia. Antes que Borbón, Elena se siente española, lo que le ha valido la alta estima de sus conciudadanos”.

Gran hija, mejor hermana (y mediadora)

A lo largo del artículo, no solo valoran su reciente trayectoria pública, en la que destacan su participación hace apenas unas semanas en la Copa del Rey de vela tras 11 años sin hacerlo, sino que se centran minuciosamente en su papel en la Casa Real de puertas para adentro.

De ella, no solo ponen en valor que haya conseguido mantener una “extraordinaria relación con la reina Letizia”, sino que además recalcan que es la que, posiblemente, mejor se lleve con su padre, la definen como “una mediadora esencial”.

Sobre todo, aludiendo a la delicada relación de su hermana Cristina con el resto de la familia. Recuerdan que no solo la ha visitado en Ginebra en numerosas ocasiones, sino que incluso llegó a visitar a su cuñado, Iñaki Urdangarin en la cárcel.

“Uno de los gestos más importantes de Elena hacia su hermana ha sido la reciente visita a la prisión de Brieva, poco tiempo después de la encarcelación de Iñaki Urdangarin. Según un empleado que se la habría cruzado ese mismo día: “Ella no se escondió ni lo más mínimo y parecía tranquila…”, en otras palabras, real.

Cuatro páginas de reportaje en el que reivindican la vuelta de una infanta cuyo deseo es “servir a su país” y su legado “recomponer la imagen de la monarquía”. ¿Volverá oficialmente a la agenda institucional después de esto?