Los deseos frustrados de Meghan: parto en el hospital y escoltada por la policía
Tras la vorágine inicial, empiezan a salir a la luz más datos sobre el nacimiento del primer hijo del príncipe Harry, aunque la privacidad y secretismo siguen rodeando el acontecimiento
No pudo ser. Finalmente, los planes que tenía Meghan Markle sobre su parto se vieron frustrados. La periodista especializada en casas reales Rebecca English asegura en el 'Daily Mail' que la duquesa de Sussex tuvo que ser trasladada de urgencia a un hospital el domingo por la noche para dar a luz. Aunque entraba dentro de lo previsible y siempre se había dicho que, si los facultativos lo aconsejaban, daría a luz en un centro médico, su sueño era dar a luz en casa, cosa que al final no pudo hacerse. No se confirman los motivos, pero se entiende que fue por decisión médica.
Meghan tuvo que salir de Frogmore Cottage, donde estaba todo preparado, y trasladarse al hospital junto al príncipe Harry y un equipo de seguridad de Scotland Yard, que escoltó a la pareja bajo el más absoluto secreto. De hecho, el 'Daily Mail' asegura que nadie de la familia real sabía que la pareja estaba de camino al hospital y que la duquesa de Sussex estaba a punto de dar a luz. Este secretismo en torno al alumbramiento explicaría la confusión de horas que manejó y de las que informó Buckingham, que anunció que Meghan Markle estaba de parto hacia las tres de la tarde, casi diez horas después de que el niño hubiera nacido.
Sin duda, la decisión de privacidad de la pareja sigue siendo la protagonista de este nacimiento, ya que, a pesar de la exclusiva del 'Daily Mail' confirmando que la duquesa de Sussex ha tenido que dar a luz en un hospital, no se sabe cuál es el centro en cuestión. Rebecca English apunta que podría ser en el Portland, un hospital destinado exclusivamente a la maternidad, y en el que han dado a luz desde Sarah Ferguson hasta Victoria Beckham, pasando por Jerry Hall o Jemima Goldsmith. Se trata de un centro privado donde un alumbramiento puede costar al paciente en torno a las 15.000 libras. Tampoco se sabe qué medicos que trataron a Meghan, tal y como vimos en el anuncio oficial que se colocó en el exterior de Buckingham Palace, donde, a diferencia de otras ocasiones, no estaban reflejados sus nombres.
Lo único que parece claro es que la exactriz estuvo el tiempo indispensable en el hospital. Si ya Kate Middleton batió todo un récord yéndose a casa a las pocas horas de dar a luz a su tercer hijo, Louis, lo de Meghan ha sido aún más sorprendente. Según el comunicado oficial, el octavo bisnieto de Isabel II nacía a las 05:26 de la mañana y a la hora a la que lo publicaban, la pareja ya se encontraba con Doria Ragland en Frogmore Cottage, donde el propio Harry atendía a la prensa a media tarde para dar sus primeras impresiones sobre el nacimiento de su primer hijo.
No pudo ser. Finalmente, los planes que tenía Meghan Markle sobre su parto se vieron frustrados. La periodista especializada en casas reales Rebecca English asegura en el 'Daily Mail' que la duquesa de Sussex tuvo que ser trasladada de urgencia a un hospital el domingo por la noche para dar a luz. Aunque entraba dentro de lo previsible y siempre se había dicho que, si los facultativos lo aconsejaban, daría a luz en un centro médico, su sueño era dar a luz en casa, cosa que al final no pudo hacerse. No se confirman los motivos, pero se entiende que fue por decisión médica.