Guillermo, el profesional: el talento oculto del príncipe que deja sin palabras

Las últimas encuestas de popularidad sitúan al príncipe Guillermo como el tercer miembro más querido de la familia real británica, solo por detrás de la intocable reina Isabel y de su hermano, el príncipe Harry. Otros estudios realizados en los últimos años afirman que muchos británicos preferírian que asumiera el trono tras Isabel II, en lugar del príncipe Carlos, como corresponde. Y es uno de los que se libran de la 'limpieza' que quieren hacer los británicos en cuanto a los sueldos que reciben los Windsor, sufragados por dinero público.

Y es que el duque de Cambridge ha demostrado con creces estar preparado para ser rey en un futuro, algo para lo que aún pueden pasar un par de décadas, teniendo en cuenta la longevidad de su abuela. Y detalles como el que protagonizaba hace unos días son una pequeña muestra de su profesionalidad, una de sus cualidades más alabadas. Una anécdota que no solo ha dejado con la boca abierta a las personas que compartían evento con él, sino que también le ha hecho ganarse el aplauso de la prensa británica.

Fue el pasado martes, durante el encuentro que tuvo lugar en el palacio de Kensington con los ganadores de los Princess Diana Legacy Awards. Uno de ellos era Erick Venant, un joven de 25 años nacido en Tanzania. Guillermo no lo dudó y se dirigió a él en suajili, uno de los idiomas que se habla en el país. Un detalle que dejó al propio chaval y a los que estaban cerca sin palabras. Tessy Ojo, directora ejecutiva de la organización benéfica Diana Award y testigo del encuentro, afirmó al 'Daily Mail' que el duque de Cambridge había dejado al chico "atónito" y que había sido un momento muy especial: "No fue solo una frase; no era algo que hubiera leído en un libro un rato antes".

Lo cierto es que no es la primera vez que se lanza a expresarse en este idioma, ya que durante una visita a Tanzania, fue sorprendido demostrando sus habilidades lingüísticas con el presidente del país, John Magufuli. Aunque en ese momento se trataba de un viaje oficial y no chocó tanto como en esta ocasión, en la que estaba 'jugando en casa' y en un encuentro menos marcado por el protocolo. Lógicamente, el suajili -en el que se habría iniciado durante sus años universitarios- no es la única lengua que domina. Además de francés a la perfección, también maneja gaélico, galés y algo de español.