La parte del cuerpo que la reina Letizia ya no enseña (desde 2018)

Si algo pudimos confirmar en 2019 es que doña Letizia había introducido un perqueño cambio en su armario, un detalle que sigue presente en este 2020, por lo que parece ya ser definitivo: la Reina no quiere enseñar las rodillas y ha ido dejando bien guardadas las minifaldas que tanto le gustaban en su época como Princesa de Asturias, algunas de ellas bastante criticadas.

En lo que llevamos de año, no le hemos visto las rodillas en un solo acto. Una tendencia a la que es fiel desde mayo de 2018, cuando se las veíamos por última vez. Fue durante el desfile de las Fuerzas Armadas que tuvo lugar en Logroño, para el que llevó un abrigo de Carolina Herrera en color rosa con estampado floral y que había estrenado solo tres semanas antes, durante la bienvenida al entonces presidente mexicano, Enrique Peña Nieto, y su ahora exmujer, Angélica Rivera.

Desde entonces, Letizia ha rebajado el largo de sus faldas considerablemente, apostando por el midi. No sabemos si esto se debe a que quiere seguir las tendencias de moda o simplemente por que lo considera más elegante. El caso es que muy atrás han quedado modelos tan icónicos y comentados como el vestido de Teresa Helbig que llevó en los Premios Cerecedo de 2017 -sin duda, la más mini desde que llegara a la familia real- o el vestido de Felipe Varela que escogió para inaugurar la temporada del Teatro Real en 2015, coincidiendo con su 43 cumpleaños.

Eso sí, no es que Letizia de repente haya decidido lucir modelos recatados de cabeza a pies. Al contrario, ha tapado rodillas para dar paso a espalda, brazos y hombros. Algunos de los más representativos de esta tendencia es, por ejemplo, el outfit que escogió para el concierto de la Fundación Princesa de Asturias en Oviedo, con top palabra de honor de The2ndSkin, o el vestido rojo de Roberto Torretta con escote asimétrico, que estrenó en marzo de 2019 en Argentina y resultó ser uno de los más alabados del año.