Piers Morgan y su guerra con Meghan: la analizamos con 5 periodistas 'reales'
El presentador de 'Good Morning Britain' ha dejado su programa tras sus duras críticas a la duquesa de Sussex, que habría formalizado una queja a la cadena
"Después de conversaciones con ITV, Piers Morgan ha decidido que ahora es el momento de dejar 'Good Morning Britain'. ITV ha aceptado esta decisión y no tiene nada más que añadir". Con esta economía de palabras, la cadena británica prescindía de uno de sus presentadores estrellas y una de las figuras más controvertidas de los últimos años. La gota que colmó el vaso fueron las últimas declaraciones a propósito de Meghan Markle y su polémica entrevista con Oprah Winfrey, que la propia cadena había emitido con un éxito de audiencia espectacular, al alcanzar los 11,3 millones de espectadores.
Se ha dado la circunstancia de que el día que Piers Morgan abandonó el plató de su programa por su intenso rifirrafe dialéctico con su compañero Alex Beresford, este espacio matinal derrotó por primera vez a su eterno rival, 'BBC Breakfast', desde que comenzara su emisión en 2014. Lograron 1,3 millones, frente a 1,25 de la competencia y el propio periodista celebraba en las redes sociales este éxito del programa que lo ha dejado marcharse.
Son muchas las especulaciones sobre la salida de Morgan y se dice que la propia duquesa de Sussex se habría quejado formalmente a la cadena por los comentarios que este realizó a propósito de su salud mental al asegurar que "no me creo ni una sola palabra". Un movimiento que podría haber sido definitivo para su salida del espacio. Aunque por el momento no se ha clarificado si la mujer del príncipe Harry ha tenido algo que ver con su inesperada marcha, si la propia cadena se ha cansado de sus habituales controversias o si incluso instancias superiores podrían haber levantado el teléfono...
Para analizar esta situación hemos contactado con cinco periodistas que nos han dado su punto de vista, y tenemos que subrayar que el común denominador de casi todos es que hasta el momento la trayectoria de Piers Morgan como némesis de Meghan no era muy conocida en España (lógicamente, hablamos de un fenómeno local) y algunos como Rosa Villacastín han resaltado el riesgo de que se traspasen ciertas líneas rojas cuando se informa o se opina sobre asuntos delicados.
"Todos los periodistas corremos siempre el peligro de que los políticos o personajes importantes pidan nuestra cabeza. Ahí está si se la entregan o no se la entregan. Depende de la fortaleza que esa persona tenga. A mí me parece horroroso. Si hubiera sido Meghan quien hubiera levantado el teléfono para pedir que le despidan, a quien habría que despedir es a ella. Para eso están los tribunales si ella considera que la está insultando o emprendiendo una campaña contra ella, a lo mejor lo gana".
Meghan y Hollywood
Villascastín se muestra muy crítica con la nuera del príncipe Carlos: "Ella se ha creído mucho lo de ser la esposa de Harry, estar emparentada con la familia real. Yo creo que nos va a dar muchos titulares, una vez que ha abierto la puerta a contar su vida y sus interioridades. Ella viene de Hollywood, aunque no era una estrella sino una actriz de segunda, y se ha dado cuenta de que esto puede darle más dinero. Creo que nos va a dar muchas alegrías en el sentido de que nos va a dar noticias", asegura.
La periodista, que ha tratado en las distancias cortas a nuestra familia real y tiene una brillante trayectoria, que comenzó en los años 70 en el emblemático diario 'Pueblo', avanza también un fenómeno que está ocurriendo mientras escribimos estas líneas: son muchos los ingleses que están pidiendo la vuelta de Piers Morgan a su programa.
"Habrá mucha gente que se posicione con él. Seguramente habrá presentadores y periodistas que se pondrán de su lado, entre otras cosas, para evitar que con ellos puedan hacer lo mismo. Una vez que esto empieza, van a querer controlar los medios. No es lo mismo que lo pretenda la Casa Real que Meghan, que ya está fuera. Acuérdate que lo de Lady Di estuvo a punto de tumbar la monarquía. La reina tuvo que salir a la fuerza a hablar y tuvieron que contratar una empresa para que les lavase la imagen. Te lo digo con conocimiento de causa. Y les acusa de racismo, que estoy segura de que lo son, porque medio mundo estaba pendiente de si el niño iba a ser negro o blanco, pero que se lo hagan en la propia familia y de forma tan evidente es muy duro", afirma.
Pilar Urbano, biógrafa de la reina Sofía, nos atiende mientras se encuentra inmersa en la preparación de su próximo libro, y se revela muy crítica con la monarquía inglesa. Celebra la entrevista de Oprah Winfrey y se muestra, sin embargo, muy severa con la labor de Piers Morgan: "Eso viene de una patria que tiene todos los defectos que puedan tener, entre otras cosas, que les guste el té y que lleven guantes y el bolso para andar por casa -dice, con su habitual sentido del humor-, pero no tienen libertad de expresión. Es que literalmente matan al mensajero, al medio. Si la señora Markle opina eso y se ha tenido que ir de Inglaterra porque son racistas y lo son en el Palacio Real, está en su derecho. Ya han hecho comentarios de antes de nacer la criatura, de si sería negro, mestizo... Tiene todo su derecho a decir que se ha marchado herida. Esto es muy fuerte en unos señores que forman parte de la Commonwealth. Las críticas de Piers Morgan no las he oído, pero mal, sería un ventrílocuo, la voz de su amo".
Y la autora de 'Pieza 25, salvar a la infanta' añade: "Aplaudo a Meghan Markle y a Oprah Winfrey. Ha sido muy negativo y pone boca abajo a un país, porque desnuda toda su hipocresía. Que ocurra esto en el siglo XXI, siendo la cabeza de la Commonwealth... ¿Qué tenían, súbditos o animales? Más que una tormenta mediática es una tormenta social, para volverles la espalda. Ahora se entiende que estos ingleses fueran vendedores de esclavos, porque para ellos un negro era un animal. ¿Quieren que nos pongamos ahora a remover quién mató a Lady Di? Se lo están mereciendo. No tengo más que una respuesta: indignación".
Pilar Cernuda, una de las cronistas políticas más importantes de nuestro país, que siguió a la Casa Real durante cuatro décadas y acompañó a los Reyes eméritos desde sus primeros viajes de Estado, subraya que la monarquía inglesa no es tan transparente como a priori pudiera parecer: "No conozco la trayectoria de Piers Morgan, pero tal vez la decisión de echarle venga porque ya acumulaba detrás. Hay otro elemento, no tiene nada que ver la forma en la que la Casa Real británica controla a los medios de comunicación, incluso han firmado acuerdos que ponen límites a determinadas informaciones, con lo que hay en España".
Y apostilla: "Aquí durante un tiempo parecía que los reyes Juan Carlos y Sofía eran intocables, pero luego cambió.. Y estoy convencida de que ellos no dieron ningún tipo de instrucción en ese sentido. No sé si fue por propia responsabilidad nuestra o alguna sugerencia de algún miembro del Gobierno. Yo no he recibido ninguna indicación en ese este aspecto nunca".
Los Windsor y la intimidad
Cernuda, autora de 'Genio y figura: Rey Juan Carlos. Recuerdos y anécdotas de una vida', establece una clara distancia entre las prácticas de nuestro país y las del Reino Unido: "Aquí cada medio actúa en función de su propio criterio y su propia responsabilidad. La prueba es todo lo que se está publicando de los Reyes no ahora sino desde hace mucho tiempo. Porque la famosa donación se publicó cuando se produjo hace más de diez años y libros ni te cuento. En el Reino Unido no tiene nada que ver cómo se ha informado sobre la Casa Real. Hace muchos años que se entró a saco en la vida privada del Rey y me consta que en la Casa británica no. A mí jamás se me ha dicho esta línea no se traspasa. Yo no sé si se lo han dicho a otros. A mí nunca y he hecho información de ellos 40 años".
Otra cuestión que pone sobre la mesa es cómo se protege la intimidad de los miembros de la Casa Real británica: "En el Reino Unido haces una foto a Meghan o a Harry en el jardín de su casa y te puede caer un paquete. Y anda que aquí no hemos hecho fotos... Yo no sé si levantan teléfonos, pero ha habido reuniones y acuerdos firmados de los medios de comunicación británicos con la Casa Real para que determinadas informaciones no se pudieran publicar. La vida privada no entraba, aquí eso no ha pasado nunca. La prueba es lo que se está publicando y lo que se lleva publicando hace años. Insisto, lo de la donación del rey saudí se publicó, aparece hasta en un libro de Jesús Cacho con todo tipo de detalles".
Pilar Eyre, finalista del Premio Planeta y autora de 'Yo, el Rey', que es uno de los libros más vendidos de los últimos meses, sigue con atención el devenir de los últimos días de Piers Morgan, quien fuera uno de los hombres fuertes del imperio mediático de Rupert Murdoch: "De este caso no sabía nada y ahora estoy apasionada. Que este periodista se haya convertido en un famoso rodeado de periodistas que le van siguiendo con el micro preguntándole cosas me alucina. Me parece muy divertido y peculiar".
La reconocida periodista y escritora incide en los límites entre la libertad de expresión y la descalificación a la hora de abordar esta polémica: "Recuerdo una frase mítica de Vasile de hace muchos años que decía: 'Ojalá Casa Real llamara tan poco como llama Moncloa'. Moncloa llama 0 y la Casa Real llama 100. Encima, el rey Juan Carlos tenía una relación muy próxima con Berlusconi en aquella época. No me parece nada extraño, si llama un ministro no va a pasar nada, pero si llama el Rey se van a cuadrar todos. Yo no conozco las palabras de este señor, una cosa es describir y otra insultar. También te digo que estoy viendo insultos constantemente en televisión a políticos y no pasa nada".
La visión de la autora de 'La soledad de la reina: Sofía, una vida' y 'María la Brava: La madre del rey' también incide en la falta de libertad de expresión que subrayaban su compañeras Pilar Cernuda y Pilar Urbano: "Tenemos la visión en España de que en el Reino Unido hay mucha crítica, pero hay que pensar que el 99% de los ingleses adoran a toda la Casa Real. Nosotros le damos voz aquí al 1% disidente porque es más divertido, pero todos los medios se ponen como un solo hombre al lado de la reina. Allí no hay ni un partido republicano fuerte. Como te digo, aquí nos llegan las voces disidentes, pero me gustaría saber qué repercusión tienen en realidad. Piensa en la protección de la que gozan"
Y va más allá: "Por ejemplo, el famoso libro de Kitty Kelley sobre los Windsor no se ha podido publicar en Inglaterra y los ingleses lo tienen que comprar en Estados Unidos. Está prohibido y seguro que hay más que no conozcamos. Si eso pasara aquí, habría un gran escándalo. Aquí se han publicado libros contra la monarquía, muchos, y no me refiero a los míos, porque yo no considero que escriba contra la monarquía. Aquello no es tan liberal y tan libre como nosotros creemos ni hay tanta disidencia como pensamos respecto a la reina".
Jaime Peñafiel, una de las figuras más legendarias del periodismo en España y una voz muy crítica a la hora de diseccionar las monarquías contemporáneas, se pone del lado de Piers Morgan: "A mí me parece que lo de Inglaterra se sale de madre. La prensa tiene obligación de ser crítica, yo lo soy. El tema de Meghan tiene un origen y la culpa la tuvo la propia familia real británica, la propia reina, autorizando esta boda. Fue recibida un poco de uñas, como aquí también fue recibida de uñas Letizia por la familia real, por las Infantas. Culpar ahora al mensajero es un gran error. Esta chica y su marido no se han comportado como debían. Es un desmadre total".
Piers Morgan podría volver
Aun así, tampoco se muestra condescendiente con el expresentador de 'Good Morning Britain': "Este señor es también un histriónico y no le han echado. Yo creo que la espantada la ha dado él, al final volverá... Tiempo al tiempo con lo de Meghan y de Harry, que se volverá en contra de ellos. Han negociado su vida, están poniendo precio a sus declaraciones. Son como los famosetes. Es una historia paralela a la que vivieron Diana y Carlos, con la diferencia que este tiene mucha más dignidad que su hijo. Ahora estamos con el impacto emocional, como pasó con Diana. Yo estuve en el entierro y me deprimió aquel dolor colectivo de los ingleses junto a la reina Isabel, que, como la propia BBC reconoció, fue la única que se comportó con gran dignidad. Ahora para los ingleses el nombre de Diana está escrito en el agua, ya nadie se acuerda de ella".
A propósito de la guerra judicial que mantienen los Sussex con los tabloides británicos, Peñafiel asegura que "yo no le llamaría prensa sensacionalista. Están criticando un comportamiento y es algo que está pasando en muchas monarquías. Antes la monarquía era muy endogámica. Solo se casaban entre ellos. Incluso la madre de la reina Sofía organizó un crucero del amor para que príncipes y princesas se casaran entre ellos. Luego empezaron a llegar chicas que no tenían nada que ver con las casas reales, que aportaban mucha frescura y modernidad, pero también en algunos casos vulgaridad. Y rompieron las familias reales. Trajeron cosas buenas y también malas".
"Después de conversaciones con ITV, Piers Morgan ha decidido que ahora es el momento de dejar 'Good Morning Britain'. ITV ha aceptado esta decisión y no tiene nada más que añadir". Con esta economía de palabras, la cadena británica prescindía de uno de sus presentadores estrellas y una de las figuras más controvertidas de los últimos años. La gota que colmó el vaso fueron las últimas declaraciones a propósito de Meghan Markle y su polémica entrevista con Oprah Winfrey, que la propia cadena había emitido con un éxito de audiencia espectacular, al alcanzar los 11,3 millones de espectadores.