Dimitri Rassam, marido de Carlota Casiraghi, debuta en el Día Nacional de Mónaco

No hay duda de que las celebraciones de la fiesta más grande del Principado de Mónaco este año eran especiales. Primero, porque era las primeras que se podían desarrollar sin restricciones, a diferencia de los dos últimos años. Segundo, porque suponían la vuelta de la princesa Charléne a esta jornada festiva tras su ausencia en 2021 por su enfermedad. Pero había otra presencia muy esperada, tanto como la de la sudafricana. Hablamos de Dimitri Rassam, el marido de Carlota Casiraghi, que ha debutado en el Día Nacional de Mónaco junto al resto de los Grimaldi.

Precisamente, las restricciones de las que hablábamos que marcaron los festejos de 2021 hicieron que Carlota viajara sola desde París, donde vive con su familia, y dejara a sus dos hijos en casa. Así que nos quedamos sin ese esperado debut de su marido, con el que se casaba en junio de 2019, precisamente en el mismo escenario donde hoy se desarrolla la parte más lúdica y festiva del Día Nacional, el Palacio Grimaldi, donde solemos ver las imágenes más entrañables, espontáneas y divertidas de la familia, habitualmente protagonizadas por los más pequeños.

Así, aunque costaba verlo en ese Te Deum de la catedral que marca el inicio de los festejos, el cineasta se situaba en una esquina del segundo de los dos bancos destinados a los sobrinos -de sangre y políticos- de Alberto y Charlène. El protocolo mandaba, lógicamente, así que las parejas han tenido que separarse. En el banco delantero, veíamos a su esposa, Carlota, junto a Alexandra de Hannover, hija pequeña de Carolina, y Andrea y Pierre Casiraghi, además de Louis y Pauline Ducruet. Detrás, el propio Dimitri junto a sus cuñadas, Beatrice Borromeo y Tatiana Santo Domingo, además de Marie Chevallier, esposa de Louis, y Camille Gottlieb. Precisamente esta última era la única de los sobrinos del príncipe Alberto que se situaba en el banco trasero, puesto que la joven está fuera del orden sucesorio.

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Terminada la misa y posteriormente en el patio del Palacio Grimaldi, ya podíamos ver bien a Dimitri Rassam, plenamente integrado en la familia y en las celebraciones, además de muy pendiente de su hijo Balthazar, que también hacía su particular debut. Ya había asistido en otras ocasiones a Raphäel, el hijo que Carlota Casiraghi tuvo de su relación con al actor Gad Elmaleh, pero era la primera que veíamos en estas celebraciones a su hermano pequeño, nacido en octubre de 2018.

El cineasta, a diferencia de otros miembros de la familia, ha respetado escrupulosamente el código de vestimenta indicado para la cita, optando por un chaqué, como también han hecho sus cuñados, Pierre y Andrea, y su primo político, Louis Ducruet. Mientras, Estefanía, sin tocado, y la propia Charlène, de largo, se saltaban ligeramente el protocolo.

Así, es la primera vez que Dimitri Rassam participa en un acto oficial de estas características. De hecho, es la primera vez que está en el principado tras su boda en 2019; al menos, en público. Hay que tener en cuenta que Carlota fue una de las grandes ausentes en las celebraciones del Día Nacional de Mónaco de 2019. Su hijo entonces contaba con solo un año, lo que pudo ser la razón de que prefiriera no participar. Y en 2020 se repitió su falta junto a la de su tía Estefanía. De hecho, es la primera vez en muchos años que la celebración cuenta con la familia Grimaldi al completo.

Así, en ese grupo también se encontraban otros familiares del príncipe Alberto, como su prima Melánie, la hija de Elisabeth-Anne de Massy, la prima de los tres hijos de Rainiero y Grace Kelly, fallecida en el verano de 2020 y muy querida por ellos. En otro extremo veíamos a Sean Wittstock, uno de los hermanos de Charlène, junto a su esposa Chantell, la misma que se convirtió en portavoz improvisada -y a veces desacertada- de la sudafricana durante su convalecencia. Llamaba especialmente la atención la ausencia de Gareth, el otro de los hermanos Wittstock, siempre un habitual de este tipo de celebraciones oficiales.