Interior inicia el proceso de retirada de la escolta a Urdangarin y se topa con problemas
El todavía marido de la infanta Cristina ha mostrado sus reticencias a perder la seguridad. Cuenta con un mínimo de cuatro agentes a su servicio, que seguirán en el cuerpo
Hace apenas unas semanas, el Ministerio del Interior dio la orden al equipo de agentes que tiene destinado a Casa Real de que se iniciaran los trámites de retirada de la escolta a Iñaki Urdangarin, tal como se hizo público en el programa 'Y ahora Sonsoles' y ha podido confirmar Vanitatis.
El marido de la infanta Cristina cuenta con un nutrido grupo de agentes del Cuerpo Nacional de Policía pertenecientes al grupo de Casa Real a su servicio, y el Gobierno, como responsable de esta asistencia, pidió que se iniciara el proceso para terminarlo. Pero se encontraron con algunos escollos, según detallan a este medio fuentes de Interior.
El primero, que ningún responsable del grupo se atreve a firmar los documentos de retirada de los escoltas. Otro: los mismos escoltas han mostrado sus reticencias, así como el propio Urdangarin, que ha manifestado su voluntad de seguir teniendo seguridad del Estado.
Facilitar la vida de su protegido
Es lógico, aseguran, que alguien no quiera perder el servicio de escoltas. Porque además de velar por la seguridad y evitar el asedio de la prensa, se dedican a facilitar la vida a la persona en cuestión. En el caso de Urdangarin le sirven para evitar que los fotógrafos capten momentos íntimos con su nueva pareja. El exduque de Palma siempre ha mantenido una relación excelente con los agentes, con quienes ha ido a hacer deporte y hasta a tomar algo, lo que ha provocado que se conviertan casi en amigos.
Cabe recordar las imágenes de aquellos escoltas subiendo comida al despacho Imaz & Asociados de Vitoria para que Urdangarin no tuviera que salir de su oficina y encontrarse con la prensa en pleno escándalo por las fotografías con Ainhoa Armentia. Aquello sorprendió a muchos, pero quienes saben cómo funciona una escolta no vieron nada extraño en la situación.
A por pizzas
Es más, en Ginebra, donde vive la infanta Cristina, los escoltas han llegado a ir a por pizzas a un restaurante para llevárselas a su ‘protegida’. Y en Madrid incluso han ido a comprarle lana a la infanta Elena para que pudiera seguir con una de sus aficiones: coser.
Las trabas con las que se ha encontrado Interior en la retirada de la escolta a Urdangarin han frenado el proceso que, pese a todo, no va a parar. Una vez se toma la decisión, ya no hay vuelta atrás. Con todo, la retirada de escoltas a una personalidad, en este caso a un exmiembro de la familia real, no es algo que se pueda llevar a cabo de un día para otro.
Así, informan a este medio de que lo más probable es que Urdangarin pierda su escolta hacia el mes de junio, justo cuando su hija menor de edad, Irene, cumpla los 18 años. Lo que sí queda claro, y así lo confirman, es que este es el primer paso hacia la inevitable y cada vez más cercana firma del divorcio de los exduques de Palma.
Irene y sus 18 años
Son muchos los factores que intervienen en el proceso de retirada de seguridad. Irene Urdangarin no cuenta con escoltas propios en Ginebra, sino que usa a algunos agentes destinados al servicio de seguridad de su madre. Son ellos quienes la acompañan a sus quehaceres diarios y velan por su integridad.
Cuando Irene viaja a España, algo que suele hacer con mucha frecuencia, es cuando Interior le destina un grupo de escoltas que la protege en territorio español. Pero en cuanto la joven cumpla los 18 años, el próximo 5 de junio, ya no contará con ese servicio. Desde que los sobrinos de Felipe VI dejaron de formar parte de la familia real y se convirtieron, por decreto, en familia del Rey, perdieron el privilegio de tener seguridad del Estado.
¿Cuántos escoltas?
Y así como con otros miembros de la familia del Rey la retirada fue paulatina, como en el caso de Felipe de Marichalar, en el de Irene, al vivir fuera, será de forma inmediata. Será entonces, de manera más probable, cuando su padre pierda también la escolta. Porque las mismas fuentes de Interior comentan a Vanitatis que no tendría sentido que se le retire la seguridad a la hija y no al padre, cuando Irene tiene más relación familiar con el Rey que con Urdangarin, que hace su vida alejado de su ex familia política desde hace más de un año.
Lo que indican estas fuentes es que, por mucho que se le retire la escolta al todavía marido de la Infanta, eso no supondrá un ahorro para Interior. Esos mismos agentes seguirán al servicio del equipo de seguridad de Casa Real, por lo que seguirán cobrando. Si son agentes asignados a Casa Real, como es el caso, seguirán en el equipo, ya sea en contravigilancia, en taller, con guías caninos… El abanico de posibilidades es amplio y trabajo no falta. Una vez que un policía entra en el servicio, tiene que haber un motivo para que lo deje, y que retiren la escolta a un miembro de la familia nunca lo ha sido.
Saber cuántos escoltas protegen al cuñado del Rey es algo complejo. Nadie quiere dar un número exacto, tampoco desde el círculo de Urdangarin. Lo que sí aseguran a este medio es que, como mínimo, tiene a cuatro agentes a su servicio y hay voces que incluso nos hablan de ocho personas. Hay que tener en cuenta que hay días de trabajo extra, jornadas libres, vacaciones, incidencias… Como mínimo, insisten, necesita a cuatro personas a su servicio.
Dinámica y estática
Otro de los puntos que confirman estas fuentes es que Urdangarin solo cuenta con escolta dinámica desde que salió de prisión. ¿Qué significa dinámica? Preguntamos a fuentes de Interior y explican la metodología: hay dos tipos de escolta, la dinámica y la estática. La primera es la que sigue al personaje en cuestión y le acompaña. La estática es la que se queda en un coche en el domicilio pendiente del movimiento que hay alrededor del sujeto. Urdangarin solo tiene escolta dinámica, lo que supone que los escoltas que vemos cuando pasea son los que van con él, no hay más.
Las infantas Elena y Cristina, por ejemplo, cuentan con los dos tipos de seguridad: siempre van con escoltas que las acompañan y velan por su seguridad de forma directa (dinámica) y con otros que aguardan en el coche y controlan la situación de forma más amplia (estática). Todo eso desaparecerá, como lágrimas en la lluvia, en pocos meses. Y entonces sabremos, o podremos intuir, que el divorcio entre una de las parejas más carismáticas de la realeza europea ya es efectivo.
Hace apenas unas semanas, el Ministerio del Interior dio la orden al equipo de agentes que tiene destinado a Casa Real de que se iniciaran los trámites de retirada de la escolta a Iñaki Urdangarin, tal como se hizo público en el programa 'Y ahora Sonsoles' y ha podido confirmar Vanitatis.