El príncipe Louis, protagonista del balcón del Palacio de Buckingham

Pasadas las dos y media de la tarde en Londres (las tres y media en España), y con un cielo gris que dejaba caer una lluvia pesada pero que ha respetado bastante la coronación, los reyes Carlos y Camila han salido a saludar a la multitud congregada frente al palacio de Buckingham en compañía de la familia real británica.

Lo han hecho sin sorpresas, pues no se encontraban con ellos ni el príncipe Harry ni el príncipe Andrés, a los que no se esperaba tras su sonada ausencia ya en el Jubileo de Platino de la reina Isabel II, cambiando la imagen típica de la familia real al completo asomada al balcón.

Acompañados de los príncipes de Gales y sus tres hijos, Carlos y Camila lucían sus coronas mientras saludaban a una plaza repleta de seguidores, que con los paraguas abiertos han esperado bajo la lluvia para ver a los nuevos monarcas.

Una vez más, el pequeño Louis ha protagonizado grandes momentos, siendo de lo más espontáneo y señalando con su dedo con el brazo extendido. Su madre, Kate Middleton, parecía explicarle qué es lo que estaba viendo el pequeño, asombrado por la cantidad de gente que se congregaba para verlos saludar y por la flota aérea que ha sobrevolado el palacio en honor a Carlos III y su esposa.

Con la boca abierta y pareciendo gritar se mostraba junto a su hermana Charlotte, emocionados en este día histórico en el que además de estar pendientes de los aviones han saludado efusivamente a la multitud. Su hermano, el príncipe George, ha tenido un papel destacado en la coronación como paje real, al igual que los nietos de Camila, que también han estado con ellos en el balcón de Buckingham.

Igualmente, han estado en el balcón el príncipe Eduardo y su esposa, Sofía, junto a sus dos hijos, lady Louise y James, conde de Wessex. También la princesa real Ana, la única hija de la fallecida Isabel II, que estaba acompañada de su marido, el vicealmirante Tim Laurence.

Con el príncipe Louis una vez más como protagonista absoluto del balcón de Buckingham, robándole con su espontaneidad y sus llamativos gestos cierto protagonismo a su abuelo y la esposa de este, la familia real se metía al palacio para salir de nuevo poco después únicamente Carlos y Camila para saludar por segunda vez.

Entre los invitados al balcón no estaba el príncipe Harry, del que la prensa británica afirma se ha marchado rápidamente al aeropuerto de Heathrow para tomar un avión. Suponemos que quiere llegar lo antes posible a su casa de California para poder disfrutar al menos de un rato del cumpleaños de su hijo Archie, que este mismo sábado cumple cuatro años.

Sí se encontraban familiares de la reina Camila, que también han tenido un protagonismo especial en esta coronación. Sus tres nietos han sido igualmente pajes de honor: los gemelos Gus y Louis Lopes (de 13 años), hijos de su hija Laura, y Freddy Parker Bowels, de la misma edad y nacido del matrimonio de su hijo Tom con Sara Buys. El cuarto paje ha sido su sobrino nieto Arthur Elliot, de 10 años.