Kate Middleton, monitora por un día para los niños de una escuela infantil en uno de sus lugares favoritos en Londres

Parece que la princesa de Gales vuelve a la normalidad en cuanto a compromisos públicos y ya ha estrenado el mes de febrero en una cita en pleno centro de la capital británica. Allí Kate Middleton ha ejercido de monitora por un día para los niños de una escuela infantil recorriendo uno de sus lugares favoritos, la National Portrait Gallery, de la que es patrona.

Las cámaras solo han podido captar el momento de la llegada a este museo, pero la princesa de Gales también ha hecho junto a los alumnos de cuatro y cinco años el recorrido desde la escuela infantil en un minibús, del que ha bajado junto a una pequeña que no le ha soltado la mano en todo el trayecto.

Coincide que, además del Día Mundial Contra el Cáncer, sobre el que este lunes hacía un pequeño recordatorio en redes, también es la semana de la Salud Mental Infantil, uno de los temas qué más le preocupan y la causa en la que se englobaba esta visita tan curiosa a la National Portrait Gallery.

La cita combinaba dos de sus grandes pasiones. Por un lado, el arte. Por otro, el desarrollo de los más pequeños en sus primeros años de vida. Se trataba de un recorrido por el museo, donde se habían organizado diferentes actividades en torno a los retratos expuestos en él para identificar expresiones faciales, sentimientos y emociones de los protagonistas de los cuadros.

No hay otro miembro de la Casa Real más indicada, puesto que la National Portrait Gallery es uno de sus patronazgos desde hace más de 14 años, cuando se lo adjudicó la reina Isabel II. Ha participado de forma activa en la organización de algunas de las muestras más importantes y son muchas las veces que ha protagonizado diferentes compromisos públicos en este icónico lugar, por lo que ningún Windsor se conoce su funcionamiento como ella.

Era una cita en la que la comodidad era importante, por lo que Kate Middleton ha tirado de un look más que discreto, mucho más cercano al de una profesora de escuela infantil que al de una royal. Así, ha echado mano del combo invernal infalible, con pantalones y jersey en color negro y una blazer marrón. Eso sí, no faltaban unos buenos tacones en sus stilettos de piel.

Un look discreto que ha quedado en un segundo plano, precisamente por esa normalidad en su agenda que parece haber recuperado la princesa de Gales, llevando un patrón muy parecido al de otros años. A excepción de 2024, cuando tuvo que ser operada, siempre reaparecía tras el parón navideño a mediados de enero y es lo mismo que ha pasado en este 2025.

Kate se estrenó visitando el hospital donde ella misma ha recibido tratamiento contra el cáncer, un proceso que finalizaba hace unos meses y que le servía para que remitiera la enfermedad, como ella misma confirmaba en esta cita.

Así, si cada aparición pública durante el 2024 suponía toda una novedad, no será igual este año. En lo que va de 2025, ya han sido cuatro las citas oficiales que ha afrontado, con un ritmo muy parecido al que tenía antes de ser operada y diagnosticada de cáncer. Un dato que confirma que Kate Middleton ha vuelto con todas sus consecuencias.