Paula Echevarría, el antes y el después de unas cejas sobredepiladas

Nada como unas cejas gruesas, de forma recta, con inicios muy naturales y ligeramente despeinados y ni una sola calva a la vista. Las cejas perfectas existen, y por suerte, si las tuyas no te agradan, puedes contar con los cientos de cosméticos especialmente creados para cejas, los Brow Bars de Benefit o maravillosas técnicas como el microblading o el brow lamination.

Pero aunque tus cejas sean ahora perfectas, tienen un pasado, y el ejemplo es Paula Echevarría. En una sesión de morriña, en plena cuarentena, la actriz compartía en sus redes sociales varias fotografías de la Paula de hace 15 años y sus cejas finas y casi despobladas en la cola captaban toda nuestra atención.

Paula, no estás sola, nosotras también seguimos esa maldita moda que defendía unas cejas ultrafinas, ligeramente arqueadas y nada favorecedoras. Si la bella Rachel Weisz se convirtió en otra persona el día que se dejó crecer las cejas, evidentemente lo mismo te ocurrió a ti.

Recapitulemos, era 2005 y Paula comenzaba a despuntar en 'El comisario', y claro, como chica de moda seguía las tendencias que tenían como objetivo recuperar las cejas de las flappers para convertirnos en Betty Boop… Cuando intentas compararte con un dibujo animado, el resultado no puede ser bueno.

Pero la moda cambió y se lo debemos en parte a Cara Delevingne, cuyas oscurísimas, tupidas y naturales cejas sacudieron el mundo de la belleza en pro de un look más natural y personal. No sigas normas o modas, lleva las cejas según nazcan. Y eso es lo que hizo Paula Echevarría, decirle adiós a las cejas hilo, como ya hiciera incluso Meghan Markle, y dejar crecer sus cejas para rediseñarlas en función de la forma de su rostro.

Con este cambio progresivo, la asturiana observó cómo su mirada cambiaba por completo. Sin duda, se trata de un truco que requiere paciencia pero que da sus resultados. ¿Quién quiere un retoque quirúrgico si el mejor lifting 'quitaaños' está en dejar de depilarte las cejas? Una vez las suyas recuperaron su forma y grosor naturales, Paula pudo peinarlas según la moda, como el lion mane, modificar ligeramente su color o darles una forma más rectangular. Magia.

El diseño paso a paso

El protocolo de diseño de cejas de Benefit señala por ejemplo tres pasos: “Comenzaremos por encontrar el punto de partida ideal de tus cejas... Este paso afinará tu nariz y aportará armonía a tus ojos. Después, buscaremos el punto natural más alto de tus cejas: el arco... Un poco de definición aquí puede realzar tu look al completo. Y por último, marcaremos el final de tus cejas. La longitud importa porque es lo que da proporción a tu rostro. Y... lista: presume de cejas bien definidas, bombón”.

Aliados para unas cejas perfectas

Aunque el grosor que Paula Echevarría ha conseguido en sus cejas es considerable, la actriz puede haberlo logrado con mucha paciencia, dejando que el vello poco a poco volviera a nacer y dejándolo crecer, además de aplicar de forma rutinaria aceite de ricino o sérums de cejas que fomenten el fortalecimiento del pelo.

Otra opción sería el microblading, el cual descartamos de entrada ya que se ve pelo, no hay rastro de micropigmentación. La última opción sería el transplante de cejas, pero la verdad es que la forma de las de Paula es la misma que hace 15 años e incluso se puede observar cómo hay zonas en las que la ceja no se ha recuperado por completo. Por supuesto, el maquillaje específico es el otro aliado de su cambio radical.

Brow Styler de Benefit (38,95€). Para definir al máximo la forma de las cejas, esta varita mágica alberga en uno de sus extremos un polvo que rellena cualquier calva, mientras que en el otro lado contiene un lápiz con el que diseñar la ceja e incluso dibujar algún que otro pelito suelto. El resultado es el de unas cejas más tupidas que duran perfectas más tiempo.

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Mister Brow Filler de Givenchy (23,95€). Otra forma de mantener las cejas a raya pero con un acabado ultranatural son los geles de cejas que funcionan como una máscara de pestañas. Esta, en concreto, fija el pelo en la dirección que deseemos y añade grosor pero sin dejar una sensación pesada ni rígida. Por supuesto, es superfácil de utilizar y el efecto dura varias horas.