La estrategia de Kate Middleton de combinar peinado y vestido para no romperse la cabeza

La apretada agenda de una mujer royal del siglo XXI poco o nada tiene que ver con aquellos días de gimnasio y lavado del pelo de la verdadera Sissi, no la que idealizamos con Romy Schneider. Kate Middleton de esto sabe un rato. Durante la cuarentena hemos podido disfrutar de su manejo con las tenacillas para peinarse antes de cada videollamada y así nos ha demostrado que es una mujer práctica.

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Y no hay nada más práctico que tener un look estrella que domines, no tardes tiempo en recrear y te favorezca. Bueno, sí, hay algo más práctico, que no tengas que pensar cómo te peinas a diario. Así que Kate Middleton ha descubierto un truco bastante útil y lógico que puede llevar utilizando años, pero al que solo hemos prestado atención ahora.

Kate tiene un código peinado-vestido, infalible. Aunque tendríamos que adentrarnos en su armario como un equipo de CSI para analizar cuándo se puso cada prenda y cómo la llevó, de momento tenemos claro que uno de sus looks fetiche, el vestido camisero, siempre va accesorizado con el mismo peinado.

Melenaza recta, con volumen y con ondas abiertas de estilo retro. La clásica melena suelta de Kate Middleton es el peinado que la duquesa de Cambridge siempre lleva cuando viste sus vestidos camiseros. Hace unos días, el peluquero Eduardo Sánchez nos explicaba cómo se consiguen esas ondas muy naturales que levantan cualquier look.

“Simplemente se aplica sobre el cabello húmedo una loción para dar volumen y definir rizos, después se seca el cabello y, a continuación, se pasan las tenacillas cogiendo mechones muy gruesos y dejando la punta sin rizo. Una vez realizadas las ondas en todo el cabello, se cepilla el pelo con un peine de dientes muy anchos”, detallaba el estilista.

Pero ¿por qué este peinado es la mejor elección para los vestidos camiseros? La particularidad de los vestidos camiseros que Kate Middleton adora es que prácticamente todos tienen cuellos muy marcados, de color distinto al del resto del vestido y almidonados con determinación. Dibujan líneas rectas que contrastan con el rostro redondeado de la duquesa y con su cabello ondulado.

Pero, además del contraste, el largo de la melena de Kate encaja a la perfección con el corte del cuello, casi como de un diseño geométrico se tratara. Prácticamente las puntas de la melena alcanzan el final de los cuellos. Mientras las líneas rectas del vestido crean un look más frío, las ondas le dan ese toque natural tan característico de Kate.

Tanto si el cuello del vestido está más abierto, ligeramente desabrochado dejando entrever el escote de la duquesa, el peinado es siempre el mismo, la melena con ondas gruesas y abiertas que comienzan a marcarse a la altura de las orejas. El rostro queda enmarcado por los bucles y el look parece mucho más pulido.

Truco royal que copiar.