Maderoterapia, ¿ahora también para la cara?
El masaje con maderas es un boom en los últimos años a la hora de mejorar la circulación de las piernas y la celulitis. Ahora también lo es para rejuvenecer el rostro
Celebrities como Paula Echevarría, Eva González o Cristina Pedroche se declaran fans en sus redes sociales de los rodillos y demás artilugios terapéuticos de madera. Aseguran estar encantadas con los resultados en piernas, caderas o glúteos, que notan más lisos y sin un gramo de celulitis. Lo cierto es que la maderoterapia corporal, que viene de Oriente Medio, ya lleva un tiempo de moda; lo que es más novedoso en Occidente es aplicarlo en la cara. Y es que al parecer, en manos certeras y -aún mejor- combinada con buena cosmética, hace maravillas a la hora de conseguir un efecto lifting.
Le preguntamos a Paz Torralba, propietaria del centro The Beauty Concept y pionera en introducir esta técnica. “Por sus maniobras en las facciones, tiene un resultado reafirmante, pues trabaja la estimulación de colágeno y elastina. También oxigena y activa la circulación sanguínea y linfática eliminando toxinas”. En realidad, tal y como reconoce Marta Barrero, directora de The Secret Lab, que también cuenta en su carta con el procedimiento, “lo que hace el uso de las maderas es potenciar los efectos de nuestras manos, intensificando notablemente los resultados, sea en el rostro o en el cuerpo. A nivel corporal, el efecto de descanso en las piernas es inmediato, y los beneficios en la mejora de la circulación, la celulitis o la grasa acumulada se notan bastante rápido”.
Maderas y manos, el mix estrella
En la cara, la intención tensora también se ve enseguida, aunque para conseguir un efecto lifting más profundo hay que insistir. “Nuestras manos y las maderas tienen mucho poder. Con ellas podemos actuar sobre el sistema linfático y detoxificar así las células; sobre el sistema circulatorio, haciendo que llegue más oxígeno y nutrientes a la piel y que se vea más luminosa; y sobre el fibroblasto, estimulando la síntesis de colágeno”, añaden desde The Secret Lab.
Como en todo, la maderoterapia tiene partidarios y detractores. Lo que está fuera de toda duda es que es un procedimiento arraigado y no una moda sin fundamento; se realiza hace miles de años en Oriente y, como explica Torralba, se comenzó a trabajar como una técnica terapéutica con el uso de algunos utensilios de madera y con las manos para conseguir un buen drenaje y tono dérmico y muscular. “Además de todo eso, regula cuerpo y mente con respecto a la energía y produce una sensación de relajación total”.
Paso a paso
En The Beauty Concept, a las maderas le añaden los potentes principios activos cosméticos de la marca suiza CellCosmet para que los resultados se potencien. Tras una doble limpieza y exfoliación llega el masaje con maderas y aceite de avellanas durante 40 minutos. Con el utensilio de bolas se elimina tensión muscular, estimulando el sistema linfático y sanguíneo. Sigue el rodillo estriado pequeño que trabaja a un nivel más profundo para estimular el fibroblasto, las arrugas finas y el contorno de los ojos. Además, es muy útil contra el bruxismo. El rodillo de doble mango estriado llega a la dermis profunda, hipodermis y tejido muscular para una acción tensora, combatir arrugas profundas y remodelar el óvalo y doble mentón. La copa sueca estimula la compactación dérmica, y la pala moldeadora, que actúa en superficie, elimina toxinas. Se finaliza con mascarilla antiestrés, seguida de la crema de tratamiento personalizada.
Natural y progresivo
Y, como ocurre con cualquier protocolo manual y no invasivo, el efecto es progresivo. Que nadie espere resultados a la altura de una infiltración, hilos tensores y mucho menos un lifting quirúrgico. Se trata de un ritual pensado para producir una oxigenación, luminosidad y tensión naturales y discretos, que mejoran con las sesiones. Lo ideal son alrededor de 10, una o dos por semana, y como mantenimiento, 1 al mes. ¿La edad ideal? Cualquiera: es eficaz tanto a modo preventivo en pieles jóvenes como en franjas de edad más avanzadas dentro de un proceso de antienvejecimiento, tal y como aconseja Paz Torralba. Desde The Secret Lab señalan a la maderoterapia facial como la perfecta para quien disfrute con las terapias manuales o quienes no pueden usar aparatología, bien por estar embarazadas o por tener la piel notablemente sensible. El precio varía en función de los extras y del tiempo empleado, pero para que te hagas una idea, sobre las 180 € cada sesión.
Celebrities como Paula Echevarría, Eva González o Cristina Pedroche se declaran fans en sus redes sociales de los rodillos y demás artilugios terapéuticos de madera. Aseguran estar encantadas con los resultados en piernas, caderas o glúteos, que notan más lisos y sin un gramo de celulitis. Lo cierto es que la maderoterapia corporal, que viene de Oriente Medio, ya lleva un tiempo de moda; lo que es más novedoso en Occidente es aplicarlo en la cara. Y es que al parecer, en manos certeras y -aún mejor- combinada con buena cosmética, hace maravillas a la hora de conseguir un efecto lifting.