El coletero alemán que protege el pelo mientras duermes: hace ondas sin calor y evita las puntas abiertas
Su popularidad ha comenzado a extenderse en Instagram, en parte porque parece un corsé para el cabello, en parte porque deja las melenas espectaculares pero ¿cómo funciona el coletero?
Como friki confesa de la belleza, tengo una norma: cuando más de tres veces me aparece haciendo scroll un producto, tengo que investigarlo. Así, por ejemplo, descubrí que aquel roll-on verde que eliminaba los puntos negros en cuestión de segundos eran tan falso como el stick ‘efecto bótox’.
Tras rastrear el origen de los posts, revisar las reviews y visitar su web, resultaba sencillo descubrir que no había ningún tipo de respaldo científico, ni ingredientes a la vista. Decidí llevar a cabo el mismo método con el coletero corsé, en parte también para comprender cómo funcionaba y qué era lo que buscaba.
En los vídeos siempre aparece una melena larga que se recoge en una coleta baja con un coletero tipo scrunchie que, tras asegurar el cabello, se extiende a lo largo de toda la cola de caballo con la apariencia de un corsé.
Al retirar el coletero, el cabello parece tener unas ondas relajadas muy bonitas y no hay ningún tipo de frizz. ¿Magia?, ¿ciencia? o ¿simplemente un remedio casero mejorado con la tecnología del 2025?
El coletero en cuestión se llama HairHOME y nace de la mente de Karoline Heilmann, una alemana que, durante su baja maternal, luchaba contra el pelo encrespado cuando se despertaba cada mañana. Daba igual si el cabello estaba limpio o no, si estaba peinado o no, si se acostaba con el húmedo o seco, el frizz siempre estaba ahí.
“¿Y si existiera una goma para el pelo que protegiera mi cabello durante la noche y mantuviera la forma del peinado?” fue la idea que le vino a la cabeza, a la que siguieron varios prototipos hasta dar con el actual sistema de HairHOME.
La solución es un coletero de algodón desplegable que cuenta con varios sistemas para sujetar el cabello.
- Por un lado, el cierre del extremo con ayuda de dos cuerdas mantiene la presión a modo de coletero.
- Por el otro, a lo largo del cabello, el tubo de algodón que protege el cabello, permite que la cola de caballo no se mueva a través de una cordonera, con arandelas metálicas y un cordón de algodón mantiene el tejido fijado al cabello sin que se mueva durante toda la noche.
Aunque, originalmente, el invento estaba pensado para frenar el frizz, acción que se consigue en parte por el algodón, su creadora explica que, el propio movimiento de deslizar hacia abajo el coletero también contribuye a controlar el encrespamiento, pero que tiene dos favorables efectos secundarios: ayuda a alisar el cabello y potencia el brillo. “Mi cabello se sentía más suave y brillante, y las puntas abiertas de repente dejaron de ser un problema”, apunta Heilmann.
Si bien es cierto que estamos más acostumbrados a las fundas de almohada de seda para evitar que el cabello se encrespe durante la noche, no es la primera vez que el algodón se asocia con el cuidado del cabello. Por ejemplo, es muy extendida la recomendación de secar el pelo con una camiseta de algodón para evitar dañar la fibra capilar y que el pelo se encrespe.
Otro de los aparentes beneficios lo encontramos en las puntas. Como consecuencia del roce con la almohada y la fricción del propio movimiento al dormir, las puntas del pelo pueden abrirse, sobre todo si están fragilizadas. Al proteger el cabello desde la nuca hasta la punta, no se daña.
Sin embargo, y aunque no se trate de su finalidad original, la popularidad tiene más que ver con el efecto que se aprecia en el cabello al liberarlo a la mañana siguiente. Si antes de colocarlo habías hecho unas ondas en tu pelo, el coletero las preservará, si por el contrario, tienes el pelo rizado u ondulado y lo habías planchado antes de acostarte, al retirar el coletero estará tal cual lo dejaste.
Visto el éxito y la demanda del HairHOME, su creadora lo ha desarrollado en diferentes colores -el original era de color crema, pero también lo hay negro o rosa- y varias longitudes, para que se adapte al largo de cada melena. El más corto, de 25cm, tiene un precio de 33 euros, mientras que el más largo, de 72cm, de 50 euros.
Si funciona o no, lo descubriremos cuando llegue a nuestro país.
Como friki confesa de la belleza, tengo una norma: cuando más de tres veces me aparece haciendo scroll un producto, tengo que investigarlo. Así, por ejemplo, descubrí que aquel roll-on verde que eliminaba los puntos negros en cuestión de segundos eran tan falso como el stick ‘efecto bótox’.