Carlota Casiraghi vuelve a ser la protagonista del imaginario de Chanel

Virginie Viard le ha cogido indudablemente el gusto a presentar sus colecciones haciendo uso de los 'fashion films' que durante el confinamiento se convirtieron en la única ventana posible de los ‘fashion insiders’ y de los amantes de la moda para descubrir las novedades de las grandes marcas. La firma francesa organiza dos desfiles diferentes dentro de la Semana de la Alta Costura de París. Uno comienza a las 10, mientras que dos horas después, la maison presenta sus novedades para los invitados. Sin embargo, los que no tenemos invitación, lejos de poder disfrutar de las propuestas de la maison a través de las conexiones en directo que el resto de las marcas facilitan, hemos de esperar al documento audiovisual para disfrutar de las novedades.

Xavier Veilhan se ha vuelto a encargar de dar forma a una serie de cortos en los que borra las distinciones entre la segunda y la tercera dimensión para incluir a los personajes del universo de Chanel en una realidad alternativa en la que el pasado, el presente y el futuro conviven. Carlota Casiraghi, embajadora de la marca, interactúa con la modelo Vivienne Rohner en un paisaje repleto de elementos mecánicos que proceden del imaginario artístico de Xavier, que en el ‘fashion show’ se ha encargado de dar forma a la escenografía, que emula un parque infantil modernista diseñado tras habernos sorprendido en el pasado al crear el escenario en el que Casiraghi presumió de sus habilidades ecuestres. El desfile ha comenzado con Pharrell Williams, íntimo de la marca, tocando la batería, mientras las modelos han desfilado por una pasarela arenosa en la que los tules, los brillos y el tweed han sido las grandes estrellas del show.

Las siluetas, relajadas, se inspiran en los fines de semana de los que disfrutaba Coco Chanel en Biarritz, donde abrió su primer taller. Después de una oleada de brillos, las siluetas crinolina y los maxilazos han dado el toque maximalista a unas propuestas que invitan a las mujeres a jugar. Botines cowboy, sombreros de diferentes materiales y acabados y sandalias de silueta T han dado forma a los accesorios, mientras que los vestidos florales se han llenado de brillo esta temporada, en la que no han faltado sinuosos diseños de noche que abarcan desde el sensual 'vampire chic' hasta los diseños más ensoñadores de alma ‘womanspreading’.

La encargada de cerrar el show ha sido Jill Kortleve, enfundada en un vestido de novia sobre el que luce un chal y que combina con una gran lazada en el cabello que hace que la modelo parezca una muñeca real dispuesta a jugar en ese universo pincelado por Chanel. Los logos, que llevaban temporadas acompañando a la marca, parecen haberse tomado un descanso, y la manera en la que la firma ha querido que la maison siga renovándose y rejuveneciéndose ha sido llenar los diseños de pequeños detalles embellecidos sobre estampados tan tradicionales como la pata de gallo, reimaginada ahora en rosa, apostando por chaquetas de corte 'cropped' y combinando diseños de dos piezas metalizados con botas altas.

El clásico 'twin set' verde se moderniza ahora al apostar por faldas midi abotonadas y por pantalones ‘carrot’ combinados con chaquetas que sorprenden al tener al cuello aplicaciones brillantes efecto collar. Desde el front row, Anna Wintour tomaba nota de cada diseño, mientras que Sigourney Weaver ha hecho lo propio acompañada de otras invitadas al desfile, como Dua Lipa.

Al volver a invitar a artistas para reflejar la emoción y la perfección de la alta costura, Virginie Viard continúa un diálogo creativo que se inició en enero de 2022. Al colaborar con el escenógrafo Alexis Bertrand, la decoración creada por Xavier para esta nueva colección de costura aúna la armonía y la unidad del mundo 'couture'.