La infanta Cristina da un vuelco a su estilo: por qué es la nueva Carolina de Mónaco española

La infanta Cristina ha dado la sorpresa este 2024. Si en términos estilísticos sus looks nunca habían despertado nuestra atención, el evidente y notable cambio que ha experimentado su fondo de armario han colocado a la hermana del rey Felipe, cita a cita, a lo largo de este año, en los rankings de mejor vestidas. Ya sea como invitada de boda, o para acudir a diferentes actos públicos, ha bordado cada puesta en escena valiéndose de un arma infalible: la elegancia atemporal. Una evolución que acerca su estilo al del icono royal por excelencia, Carolina de Mónaco.

En el caso de la hija de los reyes eméritos, se vale de diseñadores españoles (con Lorenzo Caprile a la cabeza de su guardarropa) y de firmas de lujo internacionales. Escoge piezas clave y looks que, escapándose de las tendencias, mantienen a raya esa elegancia atemporal que hemos señalado. Apuesta por tonos neutros y arriesga con algunos colores vibrantes y con estampados. Un coctel que, en la práctica, nos recuerda a los outfits insignia de la princesa monegasca y que ha ayudado a la infanta Cristina a dar un positivo y acertado vuelco a su estilo.

El año presente, en el que la infanta Elena y la infanta Cristina han recuperado protagonismo en la vida pública, ha servido para que la última pueda presumir de una imagen renovada. A sus 59 años, la cuñada de la reina Letizia está en su mejor momento: anímico, personal y fashionista. Sus looks son la prueba.

A principios de 2024, viajó hasta Londres junto a su hermana y uno de sus hijos, Juan Urdangarin, para asistir al funeral por Constantino de Grecia celebrado en la capilla de San Jorge, dentro castillo de Windsor. En su maleta, un dos piezas de chaqueta y falda plisada en color gris plomo. La americana, confeccionada con un tejido jaspeado, presentaba un patrón minimalista: cuello redondo, cremallera frontal, silueta ligeramente peplum, hombros estructurados y manga larga. A conjunto, una falda de largo midi con tablas, un básico en el armario de las royals europeas. A sus pies, unos zapatos de salón bicolores, y como bolso, un diseño bandolera acolchado en gris.

Durante el mes de abril se celebró en Madrid un funeral en recuerdo a su primo Fernando Gómez-Acebo, fallecido a principios del mes de marzo a la edad de 49 años. Apostando en este caso por un outfit de luto con traje de chaqueta negro, solo la camisa blanca rompió con esa estética 'total black' que distinguía el conjunto de la infanta Cristina. Conformado por dos prendas, una americana de doble botonadura con cuello de solapas de muesca y un pantalón de vestir con raya en relieve, y combinado con unos botines y un bolso de mano, lució un estilismo adecuado para el sepelio.

Amiga de la familia Villar Mir, tampoco faltó al funeral de Juan Miguel Villar Mir acontecido en la iglesia San Jerónimo el Real en Madrid hace unos días. Una cita para la que recicló la fórmula que lució en Londres: blazer y falda plisada.

Cambiando el gris plomo por el negro, la hermana del rey Felipe llevó una americana clásica con cierre frontal, bolsillos de muesca y manga larga confeccionada con un tejido rústico en textura, y una falda de largo midi con tablas por toda la silueta. Unos zapatos destalonados acabados en punta y con cuña en vez de tacón, y un bolso tipo cartera de mano con estampado tribal en la solapa, cerraron el look.

Abrimos el capítulo más brillante en su guardarropa durante 2024: los looks y los vestidos que ha llevado como invitada de boda. Empezando por el alabado conjunto que llevó al enlace de José Luis Martínez-Almeida y Teresa Urquijo celebrado en Madrid el 6 de abril.

Confiando en su diseñador fetiche, en Lorenzo Caprile, artífice de algunos de sus mejores outfits de gala y de su vestido de novia, la infanta Cristina se enfundó en dos piezas marrón chocolate. La parte superior, una blusa con el cuello perkins, silueta relajada, manga larga y arandelas plata decorando la pieza, resultó ser la pareja perfecta de un pantalón de vestir fluido y ancho. Sin necesidad de recurrir a grandes elementos accesorios, el atuendo creado por Caprile colocó a la hija del rey emérito Juan Carlos en el top de mejor vestidas de la boda entre el alcalde de Madrid y la abogada.

El 31 de agosto, en la boda de Victoria López-Quesada y Enrique Moreno de la Cova celebrada a puerta cerrada en Madrid, volvió a llevar un tándem como outfit de invitada. Aunque hizo su entrada en la finca Soto Mozanaque junto al rey Felipe y sentada en el coche, pudimos ver que la infanta Cristina se había decantado por una camisa blanca como parte superior del atuendo, no fue hasta la distribución de las imágenes oficiales del enlace por parte de Casa Real y realizadas por Bibiana Fierro, cuando descubrimos su look al completo.

La prenda más especial era la falda: un diseño largo fabricado en gasa con un estampado acuarela en tonos azules, negros y blancos. Una prenda que llamó la atención por encima del resto y que aderezó con un cinturón de terciopelo en azul navy. Un bolso de mano rígido con acabado 'shinny' y joyas de oro blanco y diamantes remataron su puesta en escena.

El atuendo que la hija de la reina Sofía estrenó este fin de semana como invitada a la boda de Teodora de Grecia no solo cierra el ranking, sino que justifica y pone de manifiesto ese cambio positivo de estilo que ha gestado poco a poco.

Apostando por el que parece ser uno de los colores de moda entre las invitadas, el azul, la infanta Cristina lució un vestido satinado en azul turquesa. Con un patrón minimalista que partía de un cuerpo desestructurado y drapeado, el vestido se ajustaba a la cintura para después continuar en una falda recta hasta los pies. Lo combinó con unas sandalias de cuña y un bolso caja con acabado brillante.