Marta Lozano presume de figura con un vestido de invitada tubo, gris y con escote drapeado

2024 apura su último mes con la celebración de bodas a las que acuden rostros conocidos de nuestro país. La mayoría de las parejas eligen los meses en los que las temperaturas son más altas para llevar a cabo sus enlaces, pero las hay que también se rinden a las celebraciones navideñas, una época del año que rodea de magia cualquier evento de este tipo.

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R. R.

Este ha sido el caso de una pareja amiga de la influencer Marta Lozano y del que es su marido desde 2022, Lorenzo Remohi. Estos amigos del matrimonio han decidido casarse este fin de semana en un enlace que han celebrado en Campo Aníbal, una grandiosa masía ubicada a solo 20 kms de la ciudad de Valencia y cuya actividad de eventos comenzó en 1997 cuando la familia Casanova, propietaria de esta casa palaciega, decidió transformar el lugar en un espacio exclusivo para la celebración de eventos de todo tipo, una idea que surgió de Paloma Cuevas y Enrique Ponce cuando visitaron el edificio en 1996, buscando un lugar especial en el que celebrar su propio enlace.

Marta Lozano se ha consolidado como una de las influencers de moda con más proyección en redes sociales, donde suele compartir con su millón de seguidores, además de aspectos personales de su vida, sus estilismos. Sus fans siempre toman buena nota de cada prenda o complemento que luce, conscientes de que su elegancia y estilo no pasan desapercibidos.

Entre sus prendas de invitada, no faltan los clásicos vestidos con drapeados como el que ha escogido Marta Lozano para acudir a este enlace. La influencer se ha decantado por una firma made in Spain que, según afirman sus creadores, diseña looks de invitadas perfectas en los que prima la elegancia, la calidad y patrones de lo más favorecedores.

Lozano ha vuelto a dar una lección de estilo compartiendo el estilismo escogido. Se trata de un vestido tubo de Mannit elaborado con punto de seda de color gris, que cuenta con falda midi que enfatiza su estilizada figura. Destaca el drapeado frontal a la altura de la cintura, así como el del escote con caída que se une a una de las mangas largas de la prenda dejando el hombro al aire.

El precio de este elegante y sofisticado vestido es de 240 euros y también está disponible en color burdeos.

Lozano ha complementado la prenda con unos zapatos de punta destalonados de tacón alto, en color claro, de Magrit, joyas de Swarovski y una estola de piel en color crudo.