Aderezos bajos en calorías para que aliñes tus ensaladas de verano
Convierte las propuestas más tradicionales en platos exclusivos solo con estas ideas
Si alguna vez has desechado la idea de tomar una ensalada para comer o para cenar porque consideras que son aburridas, eso es porque todavía hay mucho que desconoces sobre uno de los platos más refrescantes del verano.
Puede que prefieras no tomarla porque la asocias a esas dietas aburridas, y poco saludables, en las que solo está permitido comer lechuga todo el día. Por suerte para ti tenemos buenas noticias y es que eso no es una buena ensalada. Nos centramos en preparaciones que están pensadas para no aburrirnos nunca, para probar la mezcla de ingredientes nuevos y descubrir siempre algo diferente.
No solo puedes tomarlas de lechuga, espinacas, kale o rúcula, también las ensaladas de pasta son una de las mejores elecciones para esta época del año, y una refrescante forma de seguir comiendo legumbres aunque haga demasiado calor para platos de puchero.
Además de contar con todas estas posibilidades y muchas más a la hora de prepararlas, también hay un secreto para conseguir que este plato aumente su sabor y se convierta en el preferido de toda la familia, confiar en los aliños.
Existe todo un mundo de posibilidades más allá del siempre recomendable aceite de oliva y su pizca de sal. A menudo nos resistimos a incorporar estas mezclas en nuestros platos porque pensamos que los estamos cargando de calorías innecesarias.
En ocasiones es así, pero también hay muchas maneras de disfrutar de estas salsas y aliños sin renunciar a cuidar nuestra figura. Te enseñamos unas cuantas recetas que seguro que te mueres de ganas de poner en práctica cuanto antes.
Aliños para tus ensaladas
Siempre es una buena idea comenzar por algo sencillo, que sabes seguro que te va a gustar. Por eso una buena opción es una vinagreta con mostaza. Esta especia le añade un sabor especial y además aseguran que puede acelerar tu metabolismo, por lo que quemarás más calorías.
Mezcla en un bol dos cucharadas de aceite de oliva con una de zumo de limón, otra cucharada de vinagre de vino, un poco de sal y un poco de mostaza. Si quieres añade un poco de pimienta molida y mezcla todo bien.
¿Te apetece algo diferente? Prueba a añadir jengibre a tu aderezo. Mezcla bien dos cucharaditas de jengibre fresco rallado, una cucharada de aceite de oliva, una de zumo de naranja, 1 diente de ajo machacado y sal y pimienta. Además, para evitar que el ajo repita, retira el germen, es decir, esa parte interior que suele ser un poco más verdosa.
Refresca tus ensaladas incorporando un toque de yogur con este aliño. Mezcla media taza de yogur natural, que no sea azucarado, con el zumo de medio limón, dos cucharadas de aceite de oliva, sal y pimienta al gusto. Puedes añadirle un toque de perejil.
Rematamos la selección con una un poco más dulce. Pica un poco de piña y saltéala con unas gotas de aceite y un poco de edulcorante. Cuando se ablande, bátela junto con una cucharada de aceite, vinagre al gusto, sal y pimienta. ¡Deliciosa y refrescante!
Ya lo ves, hay una gran variedad de aliños que pueden convertir tu ensalada tradicional en un plato especial, saludable y bajo en calorías digno del mejor chef.
Si alguna vez has desechado la idea de tomar una ensalada para comer o para cenar porque consideras que son aburridas, eso es porque todavía hay mucho que desconoces sobre uno de los platos más refrescantes del verano.