Volamos a Ibiza para cenar con Jordan Rocca, nuevo gurú del ocio nocturno internacional

Nacido en Génova en 1981, Jordan Rocca es un relaciones públicas nato que ya de adolescente organizaba fiestas en la escuela. Formado en la Universidad de Roma, con un MBA en Empresas, pasó por Londres antes de centrar su vida en ser bróker marítimo, sector del transporte petrolífero en el que ya trabajaba su padre.

En la capital británica descubrió en el mundo de la noche y su vocación. A orillas del Támesis fundó, junto a su socio Luca Maggiora, Project, un club rompedor con los mejores DJ que obtuvo un gran reconocimiento y que sirvió de germen para su negocio más exitoso, Toy Room, con el que dio el campanazo.

Amigo personal de grandes actores, músicos y deportistas internacionales, Rocca conoce a la perfección los secretos del funcionamiento del ocio nocturno en cada rincón del planeta. Sabe lo que la gente busca y sabe cómo llenar locales. Jordan es, además, representante de jugadores de fútbol en Italia e Inglaterra.

Rocca es socio fundador de las discotecas Toy Room —con presencia en doce ciudades del mundo—, su marca insignia; además, participa en distintas iniciativas del sector de la restauración, como la cadena de hamburguesas veganas Neat Burger —con Leonardo DiCaprio y Lewis Hamilton como socios— y es fundador del exclusivo club privado Socialista, en el corazón de Mayfair.

Tras dos décadas en el sector del ocio nocturno, la noche no tiene secretos para Rocca. Sus negocios se multiplican dentro y fuera de España. En su agenda escaseas los espacios libres: aperturas, acuerdos y todo tipo de negocios reclaman constantemente a nuestro protagonista.

“Cada cliente es un mundo. Para mí, en la relación cliente-club, lo más importante es el primer instante, el cómo te reciban al llegar —puntualiza Jordan Rocca—. Puedes tener el mejor club del mundo, el más increíble y sofisticado, pero si no cuidas bien a tus clientes, si no haces que se sientan como en su casa, lo estarás haciendo mal. La atención al cliente es vital. Y un secreto: no hay que obsesionarse con la caja, como le pasa a tantos propietarios”.

“La única prioridad es que la gente se lo pase bien en tu club; además, cuanto más se divierta, más dinero va a dejar”, Jordan Rocca

Para el empresario italiano, España es su nuevo enclave fetiche: este 2024, en Ibiza y Marbella, verán la luz varios proyectos con su firma vinculados al ocio nocturno y la restauración.

“Si hablamos de ocio, España está en boca de todo el mundo. Madrid es el mejor ejemplo durante todo el año, porque se están haciendo cosas increíbles y el nivel de aperturas es altísimo. España es sinónimo de disfrute y de calidad. Los hosteleros han entendido que para triunfar hay que invertir y estar al día”, Jordan Rocca

El 'Lado' bueno de Ibiza

Entre sus negocios en la cresta de la ola encontramos Lado, en Ibiza, destino turístico que ya navega a pleno rendimiento. Epicentro del lujo, del glamour y de la jet set mundial, la isla es también parada gastronómica ineludible. Ubicado en la marina Botafoch, uno de los enclaves más exclusivos de la capital y punto de encuentro de la socialité local, Lado saluda a la temporada 2024 de la mano de los chefs Paco Budia y Marc Quesada, ambos discípulos de Martín Berasategui.

La carta de Lado, diseñada para compartir, tiene un apartado de entrantes, entre los que destacan el pan brioche frito con atún rojo y caviar; la anchoa Cantábrico ‘00’ Casa Santoña; el jamón 100 % ibérico D.O. Los Pedroches; las croquetas —de jamón o de espinacas y queso con alioli de pera asada— o el caviar del Tíbet acompañado de blinis.

Lado también cuenta con un apartado de crudos; gamba roja acompañada de crema fría de almendras con tartar de remolacha en texturas, tataki de hamachi en salsa ponzu —con espinacas salteadas y salicornia—, steak tartar clásico —sobre pan brioche tostado con emulsión de cebollino y yuzu— o láminas de ternera, nube de parmesano y encurtidos son algunas de las recetas. Las ensaladas en diferentes versiones también forman de esta carta, como la de tomate ibicenco con atún rojo y piparras vascas o la de burrata con calabaza a la brasa, rúcula y pesto de sweet chili.

Los platos principales de Lado están protagonizados por grandes elaboraciones como el muslo de pollo payés deshuesado —relleno de duxelle de champiñones, zanahoria a la brasa y cremoso thai—, solomillo de ternera —acompañado de boniato, clorofila de pack-choi y salsa de ibéricos—, merluza en salsa verde con almejas, bacalao ‘El Barquero’ —con crema acidulada con caviar y crujiente de kale— y tarantelo de atún rojo—sobre un falso risotto de calabacín—. Del horno también salen carnes y pescados que varían según la disponibilidad del mercado.

En el apartado postres, el comensal puede disfrutar de la tarta de queso, del suflé de chocolate 70 % con helado de vainilla, del hojaldre de manzana con chantillí de armañac y helado de flor de azahar o del limón, té matcha y pistacho. La bodega, compuesta por potentes referencias internacionales, ejerce de compañera perfecta de la carta de comida. El colofón a esta superexperiencia gastro viene de la mano de los cócteles.

Un relaciones públicas innato

Con un carisma y un don de gentes innato, Jordan Rocca ha conquistado el mundo entero con su exclusiva propuesta de ocio nocturno que tiene como mantra la diversión más pura, sin complicaciones, ni malos hábitos. Además, promulga la cultura del esfuerzo y defiende la vida sana y la práctica del deporte.

“¿Mi proyecto pendiente? Instalarme en una playa con un hotelito de lujo en el que la gente pueda disfrutar de la mañana a la noche con la mejor música y la mejor gastronomía. Un hotel divertido y diferente con mi sello”, Jordan Rocca

Para la high class mundial es todo un gurú, lo llaman directamente cuando quieren divertirse a lo grande y sin preocupaciones porque… si lo organiza Jordan, la fiesta y el éxito está asegurado. En la discoteca Toy Room Madrid (C/ Arlabán, 7) —junto a los hoteles Four Season y Urban—, las fiestas del oso Frank, la mascota del club, se han convertido en imprescindibles entre la gente guapa.