'Wicked' eleva a los altares a Ariana Grande y nos recuerda la leyenda de 'El mago de Oz'
Llega a las pantallas uno de los musicales más esperados del año. Su éxito o fracaso supone un punto de inflexión para el género
En un día de un lejano 1900, L. Frank Baum tecleaba en una habitación de su casa y trataba de pensar en un título para uno de sus libros. Mirando los cubos de letras de sus hijos su mirada se fijó en la 'O' y la 'Z'. Uniendo ambas, fue como nació el país de Oz y los cuentos sobre ese lugar imaginario, que consiguieron encandilar a niños y adultos a principios del siglo XX. Baum no imaginaba que, más de un siglo después, Hollywood estrenaría un musical cinematográfico llamado 'Wicked', derivado de ese universo que salió de su cabeza. Basado en el musical homónimo de 2003 (a su vez basado en una novela de los 90) y protagonizado por Ariana Grande y Cynthia Erivol el film es la gran esperanza de la taquilla de 2024. Conocida por su faceta musical y series como 'Scream Queens' , Ariana Grande se juega, con esta película, un salto al estrellato cinematográfico que podría ser definitivo; el espaldarazo definitivo gracias a una película que cuenta el lado luminoso de la Bruja Mala del Oeste (interpretada por una extraordinaria Cynthia Erivo, la gran protagonista de la cinta) y cómo se generó su enemistad con la Bruja Buena interpretada por ella.
Las buenas críticas y las previsiones de los expertos colocan a la joven no solo en el disparadero del éxito en la gran pantalla, sino también en la categoría del Oscar a la mejor actriz de reparto. Todo un logro para una figura de la música que gusta y disgusta a partes iguales. Su último disco, 'Eternal Sunshine', tuvo una buena recepción crítica pero no fue tan bien como los que publicó hace años.
Dirigida por John M. Chu, la película tiene que vérselas en la taquilla, este fin de semana, con 'Gladiator 2', un éxito recién estrenado pese a las malas críticas que han disminuido las posibilidades de Oscar de la secuela dirigida por Ridley Scott. Sin embargo, los analistas ya hablan del fenómeno 'Glicked' que engloba a las dos películas, simulando el 'Barbenheimer' que hizo de 'Barbie' y 'Openheimer' dos éxitos complementarios en el verano de 2023.
Lo que costará más es que 'Wicked' alcance el status quo de 'El Mago de Oz' película que, curiosamente, consiguió su aura mítica gracias a la televisión; a un primer pase que también tuvo lugar, como el estreno de esta cinta, alrededor de la festividad de Acción de Gracias. El origen de 'El mago de Oz' , en la que figura como director Victor Fleming aunque por el rodaje pasaron George Cukor o King Vidor, está en el éxito de la 'Blancanieves' de Disney. Louis B.Mayer, hombre de negocios como pocos, quiso replicar aquel taquillazo ('Blancanieves y los siete enanitos' fue, hasta la llegada de 'Lo que el viento se llevó', la película más taquillera de la historia) y eligió adaptar el cuento clásico americano por excelencia, que hasta entonces solo había tenido una adaptación muda.
Las historias sobre el rodaje son imposibles de enumerar en un artículo como este: Shirley Temple, niña prodigio por antonomasia, fue la primera opción para protagonizarla. Finalmente, la elegida para ser la Dorothy que siguió el camino de baldosas amarillas acabó siendo una Judy Garland adolescente a la que le vendaron los pechos para dismular su edad.
Al rodaje se sumaron más problemas: Buddy Ebsen, que iba a ser el hombre de hojalata, tuvo una alergia al maquillaje que le hizo renunciar a un personaje que podría haberlo convertido en mito. Jack Haley fue el que se llevó el gato al agua. Acompañado de Ray Bolger y Bert Lahr, fueron a ver a a ese mago fraudulento a la Ciudad Esmeralda. Además del señor hecho de 'hoja de lata' (así lo llamaba el doblaje español de la época), interpretaron al espantapájaros y al león cobarde respectivamente. Otra que sufrió aquella filmación fue Margaret Hamilton, la malvada Bruja del Oeste. Madre soltera que recaló en la meca del cine para mantener a su hijo, la actriz se enfrentó a un agresivo maquillaje verde que era tan fastidioso como el de sus compañeros de reparto. Los efectos especiales, que hoy podríamos considerar prehistóricos pero cumplían su función y resultaban más naturales que el omnipresente CGI de diseño de hoy, casi le destrozan la cara. En una secuencia, la bruja desaparece tras una nube de humo rojo. En realidad, una compuerta oculta en la parte del suelo la hacía bajar en una especie de ascensor para salir milagrosamente del plató. Los especialistas se equivocaron y la nube resultó tan real que casi le quema la cara a Hamilton. Contaba ella misma que el color verde no salió de su piel durante varias semanas debido al maquillaje incrustrado y a las quemaduras.
Con un presupuesto de casi 3 millones de dólares, 'El mago de Oz' se estrenó en agosto de 1939 y, en el considerado mejor año de Hollywood, no recibió grandes beneficios económicos. En los años 50, su primer pase televisivo construyó el camino de baldosas amarillas hacia la leyenda. No es nada raro que, aún hoy, cientos de tiendas en Estados Unidos incluyan souvenirs de la película o que el desfile de Acción de Gracias de los almacenes Macy's en Nueva York incluya, casi siempre, a varios actores emulando a los personajes. Tampoco es extraño que, durante la mayor parte de su carrera, Judy Garland cantase el 'Over the rainbow' en casi todas sus actuaciones en directo y que, como buen icono LGTBI que es, dicha canción fuese el origen de los colores de la bandera arco iris. 'El mago de Oz' es, indudablemente, un cuento cien por cien norteamericano, capaz de mirar cara a cara a las viejas historias de Europa narradas por los hermanos Grimm o Charles Perrault.
'Wicked' ha actualizado un universo que ha sido recuperado en las últimas décadas. En los 80, 'Oz un mundo fantástico', una especie de secuela de la película original, supuso uno de los mayores descalabros de la factoría Disney. Y en 2013, 'Oz, un mundo de fantasía' (muy originales los traductores de títulos de España) convirtió al hoy cancelado James Franco en el mago. El resultado fue tibio y pasó de puntillas por las salas de todo el mundo. Incluso con ese salto del blanco y negro al color que homenajeaba a la cinta original, donde Dorothy pasaba del sepia de Kansas al Tecnicolor de Oz.
'Wicked' cuenta con la garantía de ser uno de los musicales más exitosos de este siglo y su llegada a los cines puede reforzar la presencia del género en la gran pantalla. A juzgar por las buenas críticas, parece que el bueno de Baum no se revolverá en su tumba con el resultado.
En un día de un lejano 1900, L. Frank Baum tecleaba en una habitación de su casa y trataba de pensar en un título para uno de sus libros. Mirando los cubos de letras de sus hijos su mirada se fijó en la 'O' y la 'Z'. Uniendo ambas, fue como nació el país de Oz y los cuentos sobre ese lugar imaginario, que consiguieron encandilar a niños y adultos a principios del siglo XX. Baum no imaginaba que, más de un siglo después, Hollywood estrenaría un musical cinematográfico llamado 'Wicked', derivado de ese universo que salió de su cabeza. Basado en el musical homónimo de 2003 (a su vez basado en una novela de los 90) y protagonizado por Ariana Grande y Cynthia Erivol el film es la gran esperanza de la taquilla de 2024. Conocida por su faceta musical y series como 'Scream Queens' , Ariana Grande se juega, con esta película, un salto al estrellato cinematográfico que podría ser definitivo; el espaldarazo definitivo gracias a una película que cuenta el lado luminoso de la Bruja Mala del Oeste (interpretada por una extraordinaria Cynthia Erivo, la gran protagonista de la cinta) y cómo se generó su enemistad con la Bruja Buena interpretada por ella.