El argumento de la defensa de Antonio David para cuestionar la dolencia de Rocío Carrasco

El 22 de diciembre de 2016, Rocío Carrasco denunció a su exmarido, Antonio David Flores, por un supuesto delito de lesiones psicológicas, por el que no fue ni juzgado ni condenado, pues fue sobreseído provisionalmente, algo que confirmaría posteriormente el Supremo. Un caso que solo se podría reabrir si se aportaran nuevas pruebas, antes de que prescriba, como nos han subrayado diversos expertos en Vanitatis.

Seis meses antes, en un informe pericial fechado el 3 de julio, encontramos el diagnóstico de la dolencia que padece la hija de Rocío Jurado, "trastorno de adaptación en su forma de reacción mixta de ansiedad y depresión". Un informe que aparece consignado en la causa, al igual que otro anterior del 25 de septiembre de 2012, en el que se realiza un diagnóstico de la misma naturaleza.

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¿Cuáles son las manifestaciones más comunes de esta dolencia, que en el caso de Rocío Carrasco reviste carácter crónico? En los 10 informes a los que hemos tenido acceso en Vanitatis leemos las siguientes conclusiones: “La sintomatología que presenta es compatible con un cuadro ansioso-depresivo con crisis de angustia y ansiedad generalizada”; "sufre síntomas de depresión con insomnio, sensación de tristeza, ideación mórbida”; “tiene bajo estado de ánimo y manifestaciones físicas múltiples derivadas de la ansiedad que padece”.

El equipo legal de Antonio David pone en duda esa sintomatología en el mencionado proceso y mantiene que "como previo de todas las faltas a la verdad y contradiciones de la denuncia y de la declaración prestada por la denunciante, tenemos que aportar como documento nº 3 la portada de la revista Hola de 24 de diciembre de 2014, en la que Rocío Carrasco concede una entrevista y como subtítulo manifiesta 'con todo lo bueno y lo malo que me ha pasado, creo que soy una persona muy afortunada".

Un argumento que refuta el equipo de Rocío Carrasco: "Existiendo un delito de acoso, de malos tratos, de depresión, etc, lo que aconsejan los profesionales de la psicología y la psiquiatría es, precisamente, tratar de llevar una vida con la mayor normalidad. ¿Qué pretende el defensor del investigado -o su propio mandante- que Doña Rocío permanezca en su casa 'con la pata quebrada, dicho esto en términos coloquiales?".

Y prosiguen: "Es un hecho incuestionable, de manual, que la víctima de tales delitos haga una vida completamente normal; precisamente habrá que compatibilizar dicha situación con el trabajo, aunque 'vaya dopada', porque, de lo contrario, automáticamente ello derivará en persistencias a los sentimientos de suicidio, depresión, etc".

De hecho, en el capítulo 10 de la serie 'Rocío, contar la verdad para seguir viva', Carrasco hablaba de lo terapéutico que le resultó trabajar en esa época en 'Hable con ellas', aunque no las tenía todas consigo de poder estar a la altura de las circunstancias por su situación clínica.

En esas fechas, Antonio David también trabajaba en Telecinco, lo que podía haber acabado propiciando que se cruzaran por los pasillos, aunque lograron evitarlo: "Ese programa me hizo mucho bien. No he dejado de estar en tratamiento desde 2011. He pasado por distintos tratamientos, siempre he estado medicada. Ese programa me dio mucha vida. Me costó en muchas ocasiones poder hacerlo, poder estar con mis cinco sentidos. Tomaba una medicación fuerte. Me daban ataques de risa, de repente lloraba y me reía. Disfruté haciéndolo".

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En aquel entonces, Antonio David Flores colaboraba en 'Mujeres y hombres y viceversa' y ponía en tela de juicio que su exmujer pudiera estar deprimida, según narraba Rocío en el capítulo, y ella manifestaba que "se alegra, porque es su condición humana. Es un tema que para los que lo sufrimos no es ninguna tontería, es un problema muy severo y muy importante, del que se habla muy ligeramente y muy libremente, sin tener información. Sin darle la importancia que tiene. Se habla con muy poco respeto de la enfermedad".