La buena estrella de Sara Carbonero e Isabel Jiménez: así se ha revalorizado su negocio
Ellas no se han desvinculado de la parte creativa de la empresa: ambas siguen siendo las directoras, aunque ahora en calidad de empleadas
Cuando en febrero de 2015, Sara Carbonero, Isabel Jiménez y Mayris, una estilista que comenzó la aventura empresarial con ellas, dieron de alta Slow Love SL, lo hicieron con la ilusión y las ganas de ofrecer moda que llevara su esencia. Así lo explicaron hace ya casi ocho años, cuando presentaron al que entonces era su nuevo 'bebé'. Poco podían esperar en aquel momento que solo dos años más tarde pasarían a ser dos socias en vez de tres, y que siete después venderían la empresa al grupo Tendam, propietarios de Cortefiel.
Esta decisión se tomó después de varios años cerrando las cuentas en números rojos. Fue una determinación práctica que, a todas luces, era el salvoconducto perfecto para tener un soporte que las ayudara a reflotar la marca y a evitar un posible cierre. Ahora, un año más tarde y con las cuentas de 2021 sobre la mesa (la venta se hizo en marzo de ese mismo año), es evidente que la operación fue un acierto. Desde 2018, año tras año se iban presentando pérdidas. En 2020, último año en que las periodistas estuvieron al cargo de manera íntegra, cerraron con 122.000 euros en números rojos y un patrimonio neto de 305.000. Cifras que quedan muy lejos, teniendo en cuenta lo que el gigante textil ha conseguido con Slow Love bajo su ala.
En 2021 todo cambió: en solo nueve meses al frente, Tendam logró cerrar ese año con unas ganancias de 714.455 euros y un patrimonio neto de 1.747.953 euros, cifras asombrosas que dejan claro que Sara e Isabel hicieron lo correcto aprovechando la oportunidad de formar parte de este grupo.
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Además, ellas no se han desvinculado de la parte creativa de la empresa: ambas siguen siendo las directoras, aunque ahora en calidad de empleadas. Eso les permite centrarse en esa parte referida a la moda y no a los números, que al final es lo que a ambas les gustaba cuando comenzaron esta aventura.
Felices de entrar en la familia
De esta forma, han logrado que su sueño siga adelante y solo han tenido que modificar la manera de hacerlo, algo que en ningún momento parece haberlas disgustado sino todo lo contrario. De hecho, cuando Sara anunció la venta de la empresa, lo hizo con un mensaje absolutamente feliz y esperanzador: “Podríamos ser la portada de un disco, pero no… Felices de poder compartir que ya somos parte de la familia Tendam. Isabel y yo seguiremos al frente de la dirección creativa de Slowlove y continuaremos apostando por la moda 100% sostenible y esa filosofía tan nuestra del ‘slow life’. Gracias a Tendam, pero, sobre todo, al equipo Cortefiel por confiar y creer en un proyecto tan bonito y ser parte ahora de su dirección operativa”.
Pero son mucho más que las directoras creativas; son también, desde el minuto cero, la imagen y cara visible de la firma, las modelos, y ahora incluso las actrices, pues ambas forman parte del anuncio de la temporada de otoño-invierno junto a Andrés Velencoso, que también ha comenzado aventura con firma propia, Otto, y otros modelos que lucen la ropa de Cortefiel. Pero, sin duda, donde más dejan ver las nuevas prendas y ejercen de embajadoras es en redes sociales, donde Carbonero cuenta con más de tres millones y medio de seguidores, lo que convierte a la plataforma en el escaparate perfecto.
El poder de las redes
Instagram es, además, una nueva oportunidad laboral para la ex de Iker Casillas, que cada día trabaja más a través de las redes y está más centrada en el mundo de la moda y la belleza. Ahora mismo, y desde que el pasado mes de septiembre se cancelara su programa ‘Que siga el baile’, en Radio Marca, no está trabajando como periodista, pero ella siempre ha dicho que esa es su pasión y su prioridad, por lo que no sería sorprendente que en los próximos meses presentara algún nuevo proyecto laboral.
Mientras tanto, está centrada en Slow Love, en su familia y en su pareja. Pasada la tormenta mediática que supuso su divorcio del deportista, y hace unos meses el inicio de su relación con Nacho Taboada, un músico zaragozano vocalista del grupo Panamera, Sara se muestra feliz y tranquila, y no duda en pasear por la calle de su mano, ni en dedicarle muestras de cariño en público, pues ya han sido fotografiados besándose. Isabel, por su parte, continúa teniendo una vida muy tranquila al frente de los informativos del mediodía de Telecinco, y dedicando el tiempo a su familia y amigos, entre los que, evidentemente, tiene un papel destacado su ‘comadre’, que es como se llaman entre ellas Jiménez y Carbonero. Juntas tomaron una buena decisión y con ella se deshicieron de las responsabilidades administrativas y contables de su empresa. Ahora solo ponen su imaginación y creatividad, y atendiendo a las cifras, está claro que hacerlo de esta manera ha resultado ser la combinación ganadora.
Cuando en febrero de 2015, Sara Carbonero, Isabel Jiménez y Mayris, una estilista que comenzó la aventura empresarial con ellas, dieron de alta Slow Love SL, lo hicieron con la ilusión y las ganas de ofrecer moda que llevara su esencia. Así lo explicaron hace ya casi ocho años, cuando presentaron al que entonces era su nuevo 'bebé'. Poco podían esperar en aquel momento que solo dos años más tarde pasarían a ser dos socias en vez de tres, y que siete después venderían la empresa al grupo Tendam, propietarios de Cortefiel.