Íñigo Onieva ya es marqués de Griñón: repasamos las últimas personalidades que han llevado este título

Desde que Tamara Falcó e Íñigo Onieva pronunciaron el 'sí, quiero', el ya marido de la marquesa de Griñón ha adquirido su nueva posición nobiliaria como marqués consorte. Un título que Tamara recibió a raíz del fallecimiento de su padre, Carlos Falcó, a consecuencia del covid en marzo de 2020 y cuya designación supuso que la hija de Isabel Preysler perpetuara la saga del marquesado como la sexta persona en ostentar este título.

Un título nobiliario que se creó el 25 de febrero del año 1862 bajo el mandato de la reina Isabel II, a favor de María Cristina Fernández de Córdoba y Álvarez de las Asturias-Bohorques, condesa consorte de Villariezo e​ hija de Joaquín Fernández de Córdoba y Pacheco (VI duque de Arión) y de su esposa, María de la Encarnación Álvarez de las Asturias-Bohorques y Chacón.

Casi un año después de que su padre falleciera, el V marqués de Griñón, Tamara Falcó contó en el programa en el que colabora que había recibido la carta que la convertía en Marquesa y confesó que el contenido de la misma era muy emotivo. “Es algo que me ha dejado mi padre y que me hace mucha ilusión tener”, manifestaba la colaboradora de Pablo Motos.

Además del título en sí por el que Tamara pasó a ser la marquesa de Griñón, esta herencia conlleva otra serie de elementos y propiedades. Como el palacio de El Rincón, finca en la que Falcó y Onieva se han casado, sita en el municipio madrileño de Aldea del Fresno y cuya propiedad comparte con algunos otros miembros de la familia Falcó.

Al contraer matrimonio con Tamara, Íñigo pasa a ser marqués consorte de Griñón por pleno derecho y él decidirá si quiere o no usar el título a la hora de reclamar que se dirijan a él. Actualmente, Tamara es la sexta persona que ostenta el título por detrás de su padre y de Joaquín Fernández de Córdoba y Osma, cinco veces grande de España.

Los anteriores marqueses de Griñón

La primera persona en recibir este título, como contábamos unas líneas más arriba, fue María Cristina Fernández de Córdova y Álvarez de las Asturias-Bohorques, a petición del padre de esta, el militar Joaquín Fernández de Córdova y Pacheco, sexto duque de Arión. La primera marquesa de Griñón estaba casada con Fernando Manuel Ramírez de Haro y Belvís de Moncada, XII conde de Villariezo.

Al morir sin descendientes, el título pasó a manos de su sobrino nieto el 29 de septiembre de 1917. La segunda persona en recibir tal distinción de nobleza fue Joaquín Fernando Fernández de Córdoba y Osma, el abuelo materno de Carlos Falcó, quien legó su título a su hijo y III marqués de Griñón, Gonzalo Fernández de Córdoba y Mariátegui.

Sin embargo, Gonzalo Fernández de Córdoba murió en Suiza sin descendencia y en 1951 el título revirtió en su padre, Joaquín Fernando Fernández de Córdoba y Osma, que se convertiría en el II y el IV marqués de Griñón. A la muerte de este, fue Carlos Falcó, el padre de Tamara, quien recibió tal designación de grande de España de parte de su abuelo materno.

Los años que Carlos Falcó ostentó el título como V marqués de Griñón fueron años de esplendor para el marquesado, que vio cómo su nombre se comercializaba como designación de una célebre marca de vinos. Además de este título, Falcó poseía el título como XII marqués de Castel-Moncayo, legado a su primogénito, Manuel Falcó.

Con formación como ingeniero agrónomo y empresarial, se dedicó a la explotación agrícola de sus fincas, además de introducir en España las uvas Syrah y Petit Verdot, así como de la variedad Cabernet Sauvignon, en Castilla La Mancha.

En cuanto al terreno personal, Carlos Falcó ha sido hasta la fecha el marqués de Griñón que ha tenido una vida personal más prolífica. Casado en cuatro ocasiones, la última vez con Esther Doña hasta su muerte en 2020, tiene 5 hijos de 3 mujeres diferentes: Manuel y Xandra, los hermanos mayores de Tamara, la propia Tamara, fruto del matrimonio con Isabel Preysler, y por último Duarte y Aldara.

Al recibir de manos de su padre el título, Tamara Falcó Preysler se convirtió en la VI marquesa, completando el legado de esta saga nobiliaria. Con su matrimonio con Íñigo Onieva, este toma su posición como marqués consorte, puesto que tal y como recoge el BOE, la herencia y el nombramiento de títulos nobiliarios no distingue de géneros y recae de igual forma en un hombre o en una mujer.