Óscar Higares a corazón abierto: una vida por derecho y sin miedo

“En el toreo, entregaba mi vida a mi profesión. Ahora como actor, lo que hago es entregar mi alma” comienza diciendo Óscar Higares, quien interpreta a Romero en la serie 'Entrevías', número uno mundial en series de habla no inglesa en Netflix.

“José Coronado me dijo: si odian a tú personaje has hecho un gran trabajo”

"Espero que en esta temporada, en la que aparece el comisario Romero, no me odiéis mucho", dijo el actor durante la presentación de la tercera temporada de la serie. Acto seguido, José Coronado, uno de los protagonistas, le cogió el micrófono y añadió: "Óscar, déjalo... ¡que le odien! Si lo hacen, es que habrás hecho un buen trabajo".

Óscar soñaba con este momento desde niño. Se crió en el campo, en el seno de una familia humilde, donde su abuelo, labró su camino como mayoral y su padre, el torero Aurelio García Higares, siempre le inculcó el poder de la escucha. "Él me hablaba de toros, del campo… y siempre me decía que lo más importante era escuchar". Y eso hacía, y a día de hoy continúa haciéndolo. Quizás esa curiosidad es la que le ha llevado a abrazar la filosofía de querer vivir muchas vidas. Y así lo ha hecho, pero "siempre con muchísimo respeto en todo lo que hago" afirma.

Igual que a mis compañeros de ruedo les llamaba maestros, a mis compañeros de escena también. Para mí lo son, maestros

De hecho, a sus compañeros de reparto los llama maestros: “Cuando era torero, compartía cartel con las grandes figuras del toreo. ¿Cómo no iba a llamar maestros a Curro Romero, José Tomás…? Ahora, en la interpretación, me pasa lo mismo. Trabajar al lado de José Coronado y Luis Zahera, que ambos tienen un Goya, entre muchos otros compañeros… pues les llamo maestros”.

Sin duda, en cuanto a interpretación, su gran maestro es el director Enrique Urbizu, quien quiso contar con él para la serie Gigantes en 2018. “Óscar, aprovecha esto, porque es una universidad pagada”, le dijo Urbizu a Higares sobre su participación en la serie.

Cuando Óscar llegó a la primera reunión con el director, le preguntó: “¿Qué es lo que usted quiere de mí?”, a lo que Urbizu respondió: “Tienes campo en la cara, y yo quiero tu campo”.

Todo lo que he hecho en mi vida ha estado guiado por la verdad

“Quería lo rústico, la verdad, el campo… la dureza. Suelen preguntarme por qué todos los papeles que interpreto son de villano. Creo que es por mis rasgos duros, los de una persona hecha a sí misma, que se ha jugado la vida durante treinta años, que ha sufrido, que ha trabajado mucho, que ha llorado en silencio…”.

Precisamente esas vivencias son las que le permiten conectar con sus personajes y con su forma de interpretar: “Los personajes, a la hora de ser interpretados, necesitan vida y verdad. Araño en todo eso que he vivido. Al final, el toreo es una profesión muy introspectiva, de gestión de las emociones…”

De los proyectos que pudo haber grabado junto a Shakira o Madonna a su forma diferente de ver la vida

“Fue durante las grabaciones de 'Gigantes' cuando decidí retirarme por completo. Si me hacía daño o me lesionaba, me arriesgaba a no poder ir a grabar. Hubo una época en la que estuve toreando en festivales y lo disfrutaba mucho; en los pueblos me adoraban. Siempre tuve claro que no quería hacer una gran despedida ni hacer mucho ruido”.

Óscar compaginó durante muchos años el toreo con otros trabajos: “No entendía por qué un torero no podía hacer otra cosa además de torear. Durante la temporada había que estar centrado, entrenando y entregado, pero en el tiempo libre se pueden hacer otras cosas que, además, podían ser muy positivas para el toreo”.

La tauromaquia está presente en muchos ámbitos ajenos al sector, y Óscar recuerda oportunidades que dejó pasar porque su apoderado y su equipo de aquel momento no se lo permitieron: “Me llamaron para el videoclip de Madonna de la canción Take a Bow, que finalmente hizo mi compañero Emilio Muñoz. También para el de Shakira con la canción 'Te dejo Madrid'. No hice ninguno de los dos por eso, porque pensaban que, si lo hacía, no iban a tomarme en serio. Los toreros siempre hemos estado en primer plano; este tipo de cosas son positivas para la fiesta”.

Piensan que el físico abre puertas y lo que hace es que tengas que demostrar más

“Cuando despunté, después de toda mi etapa como novillero, tenía la sensación de que en la plaza me observaban con lupa por mi físico. Parece una ventaja, pero en muchas ocasiones no lo es. Siento que he tenido que demostrar mucho más”.

“Querer es una cosa y poder es otra. Una cosa es que lo tengas claro tú, y otra, que lo tenga claro el resto. A los demás hay que convencerlos: al público, a los directores, a los directores de casting, a los productores… Y eso se logra con talento pero, sobre todo, con trabajo”.

Óscar, de pequeño, quiso ser torero, pero ¿y actor?: “No lo sé… quizás sí. Quizás era un sueño que tenía de niño, y mi primer papel fue el de torero. La interpretación también es verdad… Yo siento que he venido a vivir muchas vidas. Siempre quiero investigar, aprender cosas nuevas”.

De ganar un concurso de monologos a la gran pantalla

Ese niño de campo nunca imaginó que terminaría en televisión, pero lo hizo, y de manera completamente casual, en el programa El Club de Flo, conducido por el humorista Florentino Fernández. “Era un programa de monólogos en el que participábamos perfiles que no teníamos nada que ver con la interpretación. Hacíamos guiones de 'El Club de la Comedia'. Gané aquel concurso y, a raíz de ahí, surgió mi primera oportunidad como actor”.

Tras aquella victoria, un productor vio algo en él y le propuso presentarse al casting de 'Rocío, casi madre', una serie de Canal Sur. “Me preparé para el casting como si no hubiese un mañana. Tengo mucho sentido del ridículo y un gran sentimiento de responsabilidad hacia las cosas que no conozco”.

Finalmente, le cogieron para interpretar a Mateo. La serie pasó a llamarse 'Ponme una nube, Rocío': “Ese fue mi primer trabajo como actor. De ahí también salieron otros actores que ahora están trabajando en muchos sitios, como Paz Padilla”.

De Mira quién baila a Masterchef y Maestros de la Costura

“Aquel concurso me abrió muchas puertas. Si te fijas, en todos los talent shows en los que he participado hay un aprendizaje: ya sea interpretar, cocinar, coser o bailar… Eso es lo que me atrae de los programas de televisión, aquellos en los que puedo retarme a mí mismo y evolucionar en lo que hago”.

Soy un apasionado de la moda, Maestros de la Costura está siendo un viaje precioso

En el programa '¡Mira quién baila!' fue finalista, y en 'MasterChef Celebrity' se quedó a las puertas de la final. Ahora está concursando en 'Maestros de la Costura Celebrity': “Siempre he sido un apasionado de la moda”.

De hecho, Óscar diseñaba sus propios trajes de luces, dibujaba y creaba los bordados para que después el reconocido sastre Fermín los confeccionara.

Me he reencontrado con amigos y he descubierto una Pilar Rubio maravillosa

Higares destaca, sobre todo, lo mucho que disfruta y aprende de sus compañeros: “En todos los concursos he aprendido de ellos. Ahora, en 'Maestros de la Costura', me he reencontrado con grandes amigos como Laura Sánchez; Edu Soto, con quien coincidí en la serie 'Bandoleros'; y María Esteve, que es una gran actriz y, cuando habla de sus padres, me quedo fascinado… También he descubierto a una Pilar Rubio maravillosa. Todos están siendo unos grandes compañeros de viaje”.

Su vida detrás de cámaras

Aunque Óscar asegura querer vivir muchas vidas, sin duda todas de la mano de su mujer, Sandra Álvarez: “Llevamos treinta y cuatro años juntos. Es discreta y muy trabajadora. Estoy muy feliz y orgulloso de ella y de nuestras hijas”.

"Mis tres hijas son diferentes, pero todas maravillosas. India, la mayor, estudia Arquitectura y es una estudiante excepcional. También tiene muchas inquietudes; le encanta leer, devora los libros. Ha trabajado como modelo en algunas ocasiones para sacarse un dinerillo para sus cosas, pero su prioridad son los estudios"

Mi mujer y mis hijas son el eje principal de mi vida

"Martina, la mediana, está estudiando Derecho. Es un bellezón, pero muy tímida y discreta. Nos han propuesto hacer cosas en revistas, pero ella no quiere", cuenta Higares, quien termina hablando de la más pequeña de la casa: "Chloe es la más artista; su gran pasión es bailar. Sabe que la prioridad siempre son los estudios, pero lo compagina con sus clases, y estoy muy orgulloso de que tenga también una vocación"

"El eje princial de mi vida son ellas, mi familia y también el legado que quiero dejarles: de sacrificio, esfuerzo, lucha…"

"El éxito no está solo en conseguir tus objetivos y en el reconocimiento, sino también en el esfuerzo. Y aunque no siempre se consiguen las cosas por mucho que te esfuerces, hay que luchar".

Óscar Higares, quien salió por la puerta grande de Madrid en varias ocasiones, hoy da la vuelta al ruedo de las emociones. Por derecho, como siempre ha hecho todo en su vida. Porque, como él dice, por encima del éxito están el sacrificio y el camino recorrido.