A la venta por 12 millones el cortijo marbellí del actor de cine clásico Stewart Granger
Resguardada en medio de un bosque tropical de 65 hectáreas se encuentra esta espectacular mansión, propiedad del protagonista de 'Las minas del rey Salomón'
En el corazón de la Costa del Sol, en el barrio de Estepona llamado El Velerín y refugiado dentro de un bosque tropical de 65 hectáreas, se encuentra el impresionante cortijo de una de las estrellas del Hollywood de los años 50. Ahora a la venta por 12 millones de euros, en esta maravillosa finca andaluza -salpicada de detalles traídos de todo el mundo- disfrutó durante décadas de sus conquistas Stewart Granger, protagonista de joyas cinematográficas como ‘Scaramouche’, ‘El prisionero de Zenda’ o ‘Las minas del rey Salomón’ (rodaje que le impulsó a adquirir estas tierras en España). Una mansión de 1700 metros cuadrados con siete habitaciones (incluida una suite secreta), sendos baños y una piscina con fuentes y vistas a La Concha.
Ahora el lugar, llamado el Cortijo San Francisco -que recibe su nombre en honor al encargado de la finca que le ayudó a 'resucitarla'-, se encuentra en busca de nuevo y millonario dueño. Por cierto, esta casa es propiedad, a día de hoy, de dos poderosos promotores inmobiliarios con sede en Madrid.
La vivienda, oculta en mitad de la sierra de Málaga, esconde grandes tesoros decorativos y arquitectónicos que el actor fue cosechando durante sus decenas de viajes por el mundo. Una 'macedonia' de estilos perfectamente combinados que hacen de esta mansión una de las más especiales de la zona.
Aunque, en un principio, el actor compró esta casa para disfrutar en ella de su retiro cinematográfico, lo cierto es que la mayor parte del tiempo, según han desvelado personas de su entorno a medios norteamericanos, la utilizó sobre todo para enamorar a sus numerosas conquistas. El entorno, entre tropical y andaluz, desde luego acompañaba.
Una vida de lujo y una vejez en la ruina
La construcción de la casa fue encargada a Manuel Camisuli (uno de los arquitectos que más casas construyó de lujo en esa exclusiva zona en la época) por un motivo: estaba acostumbrado a todas las peticiones (por muy excéntricas que fueran) de todos los millonarios que estuvieran dispuestos a pagar sus precios.
Granger fue uno de ellos. Su deseo era que integrase todos los elementos arquitectónicos y decorativos que fue adquiriendo durante los rodajes y viajes que hizo por todo el mundo, desde columnas romanas (que bordean la entrada y la piscina) hasta la imponente chimenea pintada a mano traída desde México en 1970 (toda una proeza de la época).
Pero estas no son las únicas combinaciones aparentemente imposibles que alberga la curiosa mansión. Inspirada en Kenia (allí rodó 'Las minas del rey Salomón') quiso integrar el estilo masái con el arte cordobés originario de la finca, a la que con los años y con ayuda del capataz de la parcela, añadió varias habitaciones anexas, en las que destacan los techos de cuatro metros de alto coronados por vigas de pino rojo y bambú o los canalones del tejado (de tejas verdes) con salidas en forma de cabeza de hipopótamo.
Una decoración de lo más extravagante que le facilitó el camino al corazón de muchas de sus conquistas internacionales de la época.
Aunque falleció en 1993, muy a su pesar tuvo que deshacerse de la casa 13 años antes, a principios de los 80, cuando tras hacer una inversión desastrosa de su patrimonio quedó totalmente arruinado. Una mala gestión de su capital que finalizó con la venta de la joya de su corona, este cortijo que tanta alegría le dio a su corazón británico.
¿Tienes un dispositivo móvil iOS o Android? Descarga la APP de Vanitatis en tu teléfono o tablet y no te pierdas la actualidad de nuestros famosos. Para iOS, pincha aquí, y para Android, aquí.
En el corazón de la Costa del Sol, en el barrio de Estepona llamado El Velerín y refugiado dentro de un bosque tropical de 65 hectáreas, se encuentra el impresionante cortijo de una de las estrellas del Hollywood de los años 50. Ahora a la venta por 12 millones de euros, en esta maravillosa finca andaluza -salpicada de detalles traídos de todo el mundo- disfrutó durante décadas de sus conquistas Stewart Granger, protagonista de joyas cinematográficas como ‘Scaramouche’, ‘El prisionero de Zenda’ o ‘Las minas del rey Salomón’ (rodaje que le impulsó a adquirir estas tierras en España). Una mansión de 1700 metros cuadrados con siete habitaciones (incluida una suite secreta), sendos baños y una piscina con fuentes y vistas a La Concha.