Flores y sandalias: Máxima de Holanda da la bienvenida anticipada al verano

Máxima de Holanda sigue siendo una de las royals más activas fuera de palacio, en un tiempo en el que el coronavirus es el protagonista de las agendas de todas las casas reales europeas, haciendo que la mayoría de sus compromisos sean por vía telemática. Pero en los Países Bajos no es tan extraño que los Reyes tengan compromisos públicos, ya que las medidas de confinamiento son algo más relajadas. De hecho, en las últimas salidas de la argentina, la hemos visto sin guantes y sin mascarilla, dos elementos que se han vuelto imprescindibles para las citas de los reyes Felipe y Letizia fuera de Zarzuela.

Así, Máxima ha salido de nuevo de Huis ten Bosch este martes para visitar el centro de distribución del Banco de Alimentos en Delft, a pocos kilómetros de La Haya. Allí se ha reunido con los voluntarios de la entidad, que le han mostrado el proceso de empaquetado y distribución, además de trasladarle los problemas con los que se están encontrando a causa del coronavirus. Uno de ellos, la reducción del número de personas que contribuyen a la labor de reparto, ya que muchos son de avanzada edad y no pueden salir de casa por encontrarse en grupos de riesgo.

Como decíamos, Máxima no llevaba ni guantes ni mascarilla, por lo que podía lucir su primaveral vestido en su totalidad. Se trata de un diseño de la firma Rixo, un modelo de corte por encima del tobillo y con diferentes estampados de flores que ya le vimos en las fotografías que distribuyó la Casa Real holandesa el pasado abril para mostrar el trabajo de los reyes desde sus despachos. Dicho vestido se puede comprar aún en la web de la firma por 335,95 euros, aunque quedan muy pocas unidades y solo de algunas tallas. Y es que parece que, al igual que hablamos del 'efecto Kate' o el 'efecto Letizia', está claro que la reina de los Países Bajos también es un icono de estilo para muchas.

El buen tiempo del que disfrutan los holandeses estos días -aunque confinados- ha hecho que Máxima quiera dar la bienvenida al verano incluso antes de tiempo, y no ha dudado en colocarse unas sandalias de tiras negras, quizá por el ancho y práctico tacón, que le facilitaba recorrer las instalaciones del Banco de Alimentos sin que sus pies se resintieran demasiado. Una elección que sorprende, pero que es Máxima al 100%, al igual que su característico talante, del que hizo gala durante toda la visita.