La triste realidad de la familia real británica con Archie: la verdad del gran desconocido
Una serie de decisiones tomadas por los Sussex unidas a unas inesperadas circunstancias han marcado, irremediablemente, esta distancia del niño con la familia de Harry
El pasado 6 de mayo, el hijo de los Sussex, Archie, cumplió dos años, un motivo de alegría que Meghan y Harry celebraron con la publicación de unas fotografías del pequeño y que aprovecharon para implicarse en una causa solidaria: pedir donaciones para conseguir vacunas a través de un comunicado que acompañó a las esperadas imágenes del niño.
Los fans de la pareja se quedaron, sin embargo, con ganas, una vez más, de ver con claridad una imagen actualizada de Archie. El hijo de los Sussex aparecía de espaldas en las fotos, por lo que fue imposible ver su rostro.
Por su parte, la familia real felicitó al pequeño a través de redes sociales, pero este gesto puso de relieve la triste realidad que todos viven con Archie. Según informa Daily Mail, los funcionarios del palacio se encontraron en una posición incómoda después de descubrir que no tenían una foto actualizada del hijo de Harry y Meghan para acompañar sus publicaciones. Se vieron obligados a usar fotos de prensa tomadas justo después de su nacimiento o fotos oficiales de su bautizo, algo que deja en evidencia el poco contacto que todos los miembros de la familia han tenido con el niño.
Según ha recalcado una fuente al medio británico, el príncipe Carlos solo ha visto en persona a su nieto en dos ocasiones desde que nació. Los Cambridge también pueden contar con los dedos de las manos las veces que han coincidido con el pequeño. "De hecho, todos los miembros de la familia de Harry pueden contar fácilmente con los dedos de una mano la cantidad de veces que vieron a Archie después de que naciera y antes de que la familia abandonara el Reino Unido. Es una situación muy triste", añade.
Una serie de decisiones tomadas por los Sussex unidas a unas inesperadas circunstancias han marcado, irremediablemente, esta distancia que ha terminado convirtiendo a Archie en el gran desconocido para la familia del príncipe.
Por un lado, los Sussex rara vez salieron de su casa en Windsor en los meses posteriores al nacimiento de Archie. Una de las veces que decidieron hacerlo, no permanecieron en Reino Unido, sino que se fueron de vacaciones en jet privado a Ibiza y luego al sur de Francia, donde fueron invitados por Sir Elton John.
Después se negaron a unirse a la Familia Real en sus vacaciones anuales en Escocia y, en noviembre, se trasladaron a Canadá antes de establecerse en California.
Cuando en enero del año pasado, Harry y Meghan regresaron a Reino Unido para anunciar que querían abandonar la Institución, Archie no los acompañó.
A pesar de ello, Harry había planeado, inicialmente, viajar de regreso al Reino Unido una vez al mes, pero entonces estalló la pandemia. Desde entonces, el Covid ha impedido, lamentablemente, que los Sussex vuelen de regreso a Gran Bretaña con su hijo para realizar visitas familiares. La reina y los otros miembros de la familia han tenido que conformarse con ver a Archie a través de videollamadas ocasionales.
Las fuentes cercanas a Palacio consultadas por Daily Mail enfatizan que todos comprenden que las actuales circunstancias generadas por la pandemia no son culpa de nadie. Quizás sea ese el motivo de que las tres casas reales - el Palacio de Buckingham, la Casa Clarence y el Palacio de Kensington - decidieran desear un feliz cumpleaños a Archie, un gesto muy significativo teniendo en cuenta que los Sussex ya no son miembros de la realeza y que, por lo tanto, no había obligación por parte de la familia real de reconocer públicamente el cumpleaños del pequeño.
"El hecho de que el Palacio de Buckingham y las otras casas reales lo hicieran público es claramente una señal de que se están haciendo todos los esfuerzos, al menos en su nombre, para tratar de mantener y fomentar una relación con Harry y Meghan", han confesado las fuentes consultadas.
El pasado 6 de mayo, el hijo de los Sussex, Archie, cumplió dos años, un motivo de alegría que Meghan y Harry celebraron con la publicación de unas fotografías del pequeño y que aprovecharon para implicarse en una causa solidaria: pedir donaciones para conseguir vacunas a través de un comunicado que acompañó a las esperadas imágenes del niño.