Los 35 años de Beatriz de York: de su vestido de novia a su polémica historia de amor

Beatriz de York cumple 35 años rodeada de grandes cambios en su vida. A través de sus fotografías, hacemos un repaso de lo mucho que ha evolucionado la princesa desde grandes momentos como el comienzo de su relación con su actual marido, que estuvo cargado de polémica, hasta su boda con su icónico vestido.

Nació bajo el título de princesa y tiene el tratamiento alteza real, al igual que su hermana Eugenia. Son las únicas de los ocho nietos de Isabel II que lo utilizan, ya que tanto la princesa Ana como los actuales duques de Edimburgo, renunciaron a esos tratamientos para sus hijos. Y desde pequeña ha sido patente su sintonía con el príncipe Harry. Tanto fue así que en 1990, durante la celebración del tradicional 'Trooping the colour', su primo la cogió en brazos para que pudiese ver por encima del balcón del palacio de Buckingham.

Su infancia estuvo marcada por los problemas que tuvo en la escuela a la hora de aprender, ya que sufre dislexia, un trastorno al que siempre ha dado visibilidad. Por otra parte, a diferencia de su hermana, la hija mayor del príncipe Andrés y Sarah Ferguson se mostraba más extrovertida en cámara.

En 1996, cuando Beatriz tenía 7 años, los duques de York anunciaron su divorcio. Tras ello, Andrés y 'Fergie' decidieron criar a sus hijas de manera conjunta conviviendo los dos bajo el mismo techo en el Royal Lodge en Windsor, la residencia que se disputó con su hermano Carlos III. Tras ello, en multitud de ocasiones, se la pudo ver asistiendo a algún evento junto a su madre y su hermana, como por ejemplo en la Copa Internacional de Polo de Cartier.

Sin embargo, el evento en el que Beatriz destacó en todos los titulares fue en la boda de su primo Guillermo con Kate Middleton, actuales príncipes de Gales. Escogió un abrigo de Valentino en nude que combinó con un curioso tocado.

La elección de este complemento fue tan comentada negativamente que lo llamarón el 'sombrero pretzel'. “Estábamos a punto de salir y ella se tambaleó un poco y lloró. Yo estaba cuidando de ella’’, confesó más tarde la princesa Eugenia sobre cómo recibieron las críticas y que recogió el diario británico 'Express'. Sin embargo, asumió el papel que desarrollaba dentro de la Casa Real británica, tal y cómo expresó en otra entrevista para la revista 'Vogue'.

Años más tarde cambiaría totalmente de estilo a un más sobrio y elegante. En el 2017, la princesa asistió a la boda de su otro primo, el príncipe Harry, con Meghan Markle. Escogió un vestido en tono azulado con mangas transparentes y hecho a mano por Roksanda Viola.

Un año más tarde, durante la boda de su hermana, conocería al arquitecto Edo Mapelli. Él estaba por aquel entonces con Dara Huan, una compañera de profesión, con la que tuvo un hijo. Los rumores afirmaban que mientras conocía a la nieta de Isabel II, también seguía viviendo con la que ahora es su expareja. Sin embargo, ellos siguieron conociéndose e ignoraron las críticas. Ahora, tras más de dos años de noviazgo y tres de casados, el tiempo ha confirmado que su relación va por buen camino.

Se comprometieron en 2019 y celebraron su boda en mitad de la pandemia un año después. Fue una de las bodas reales menos pomposas pero, como es costumbre en la personalidad de ella, no dejó indiferente a nadie. Lució una versión remodelada de uno de los vestidos que Norman Hartnell diseñó para la difunta reina Isabel II. Además, llevó la tiara Fringe, una de las joyas más significativas para los Windsor y que su abuela también llevó el día de su boda.

El septiembre de 2021, Beatriz y Edo dieron la bienvenida a su primera y única hija en común, llamada Sienna Elizabeth Mapelli. La pequeña fue bautizada a los siete meses de que naciera cuando ya comenzaron los achaques de salud de la abuela de su madre, la reina Isabel II. Un año más tarde, la monarca fallecería y Beatriz se sumiría en una gran pena, ya que era considerada su nieta favorita. "Qué mujer tan increíble y qué marca tan extraordinaria ha dejado en el mundo entero", comentó su marido Edo a través de redes sociales.

Actualmente, Beatriz de York es la novena en la línea de sucesión y mantiene una actitud bastante discreta. Es activa apoyando las organizaciones benéficas de dislexia y vicepresidenta de asociaciones y estrategia en la empresa de tecnología Afiniti. Con todo ello, compagina con su maternidad el apoyo a su madre Sarah Ferguson, quien no hace mucho ha sido operada de cáncer de mama. Un momento difícil en el que ha contado también con el aliento tanto de Beatriz como de Eurgenia.