La boda sin novia del príncipe heredero de Omán y su segunda esposa, la princesa Alya
La pareja se dio el 'sí quiero' en una ceremonia privada para celebrarlo por todo lo alto una semana después. La Casa Real ha compartido imágenes del novio, pero de la novia ni rastro
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Una boda sin novia. Así podemos describir el segundo enlace del príncipe heredero de Omán, Theyzazin bin Haitham Al Said, con la que es ya su segunda esposa y princesa Alya bint Mohammed bin Hilal Al Busaidi. La pareja se daba el "sí quiero' el pasado 24 de abril en una ceremonia estrictamente privada de la que no han trascendido imáganes. Una semana después, tenía lugar la celebración pública.
De estos fastos, que tuvieron lugar en la capital del país, Mascaté, sí ha distribuido imágenes la propia Casa Real. Hay fuegos artificales, bailes y diferentes ceremonias festivas en honor de los novios. Eso suponemos, claro, porque en las fotografías y vídeos no hay ningún tipo de presencia femenina: la novia, supuesta gran protagonista de todo enlace, no aparece en las imágenes.
La estrategia obedece a las estrictas tradiciones omaníes, ya que no era nada habitual que los ciudadanos del país conocieran el rostro de la esposa de un sultán. Algo que cambió con la actual primera dama Ahad bint Abdullah, quien, sin protagonizar demasiados actos públicos, sí se ha dejado ver, bien en alguna cita oficial -escasas, eso sí- o en retratos institucionales.
Tampoco ese hermetismo se cumplió con la primera esposa del príncipe heredero. Como fotógrafa, tenía una cuenta de Instagram abierta en la que publicaba su imagen sin ningún problema, un gesto inédito en la historia de los matrimonios de la familia real omaní.
Pero las excepciones precisamente lo son porque no se repiten ni hay un patrón y parece que con esta boda ya han establecido de nuevo esa tradición de no ver a la novia. De hecho, el divorcio de la princesa Meyyan bint Shihab Al Said, su primera esposa, hizo el mismo ruido que este enlace y se ha llevado con máxima discreción.
Aquella unión solo duró seis meses, sin que desde la Casa Real se proporcionara información de los motivos. De hecho, ni siquera se anunció oficialmente la decisión tomada por el príncipe heredero, a pesar de la pompa con la que celebró esa primera boda y las esperanzas que había puestas en el matrimonio, no solo por los lazos familiares de la pareja, sino por el hecho de que Theyzazin bin Haitham Al Said es el primer heredero oficial al trono y su paternidad aseguraba la línea de sucesión.
Precisamente, fue su progenitor, el actual sultán, quien quiso modificar la constitución para crear la figura del heredero, ausente en las cuatro décadas anteriores. Es una de las claves de su mandato, con una visión algo más aperturista que la de su antecesor.
De hecho, estamos viendo cómo ha puesto verdadero empeño en fortalecer las relaciones internacionales con otros países. De hecho, tenemos un ejemplo muy reciente, con la visita de Estado que realizó hace pocas semanas a los Países Bajos y será el protagonista del regreso de las cenas de gala al Palacio Real de Madrid, ya que vendrá a nuestro país el próximo 19 de mayo.
Pero, más allá de esta visión algo más aperturista, hay rígidas tradiciones que respetan a fuego, como el hecho de que no se conozca, al menos por el momento, el rostro de la esposa del futuro sultán. Así, las celebraciones en Mascaté fueron a lo grande, con fuegos articiales y actos en honor al príncipe heredero, pero sin rastro de la novia.
Una boda sin novia. Así podemos describir el segundo enlace del príncipe heredero de Omán, Theyzazin bin Haitham Al Said, con la que es ya su segunda esposa y princesa Alya bint Mohammed bin Hilal Al Busaidi. La pareja se daba el "sí quiero' el pasado 24 de abril en una ceremonia estrictamente privada de la que no han trascendido imáganes. Una semana después, tenía lugar la celebración pública.