Así luce Kylie Jenner sus 18 años recién estrenados

La benjamina del clan más mediático de Estados Unidos, Kylie Jenner, acaba de cumplir 18 años. Y, alcanzada la mayoría de edad, se erige como la enésima hija curvilínea de Kris Jenner. Para festejar la edad adulta –llevaba días anunciando en sus perfiles en las redes sociales los fastos que tenía previsto celebrar–, ha montado un sarao digno de celebrities de renombre. 

Y si su apellido está ligado a la excentricidad –cabe recordar que su padre Bruce Jenner se sometió hace unos meses a un proceso de reasignación de sexo y ahora se llama Caitlyn–, no menos lo iba a ser su fiesta de cumpleaños celebrada en Los Angeles para la cual no reparó en gastos. Según PageSix, la joven derrochó hasta 200.000 dólares para agasjar a sus invitados entre los que se encontraron su familia y amigos.

Además de estrenar años y melena –suele llevar el pelo teñido de negro azabache o el azul turquesa–, esta vez la benjamina optó por el rubio platino como otrora hiciera su hermana Kim Kardashian. Según la misma web, contratiempo le aguó la fiesta. Kylie tenía previsto cambiarse de vestuario durante su fiesta de cumpleaños. Acudió al baño y, al ver lo poco glamouroso de sus azulejos, solicitó a sus escoltas que la llevaran a otro local cuyo baño fuera digno de ella. 

A pesar de esta anécdota, a su fiesta no faltó nadie. O al menos nadie reseñable del clan: desde su madre Kris y su novio, a su padre Caitlyn (antes Bruce), su hermana Kendall o su hermana Kim y su cuñado Kanye West. También estuvo su novio Tyga quien no reparó en gastos a la hora de agasajar a su chica: le regaló un Ferrari blanco valorado en más de 300.000 dólares.

Y como buena it, recibió otro regalo propio de alguien de su 'rango': tal y como publicó en su cuenta de Instagram, alguno de sus allegados tuvo a bien regalarle el célebre Birkin de Hermès. Uno de los complementos más icónicos y cuya adquisición implica una lista de espera de años. Por estos y por otros motivos, Vanitatis realiza un repaso a las imágenes más provocativas y significativas (a partes iguales) del despegue mediático de la curvilínea benjamina del clan K.  

Fotos: Gtres e Instagram