Alicia Vikander, entre las 600 actrices suecas que denuncian el acoso sexual en el cine

Alicia Vikander, ahora de moda por ser la nueva Tomb Rider, ha sido la última actriz en sumarse a las demandas públicas tras haber sufrido acoso sexual por parte de un hombre de poder. Pero, tristemente, no es la única, dado que su nombre se ha sumado a la lista de la friolera de 600 actrices suecas que han firmado una carta en la que ponen de relieve los abusos sexuales que han padecido durante años en el ámbito de la interpretación de Suecia.

No solo Hollywood está en el punto de mira por los escándalos sexuales protagonizados por Harvey Weinstein, Kevin Spacey, Brett Ratner y otros muchos considerados ahora como 'depredadores sexuales'. Tal y como publica ahora 'The Hollywood Reporter', también en Suecia se han llevado a cano este tipo de prácticas sexistas por parte de productores, directores y otros hombres que hacían valer su poder en la industria cinematográfica pidiendo favores sexuales a cambio de papeles y fama.

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Como en Hollywood, los acusados de acoso sexual también eran muy conocidos y han llevado a cabo este tipo de prácticas deplorables bajo el conocimiento y la aceptación del resto de agentes del sector. Pero ahora se le está poniendo freno, especialmente desde que el escándalo de Harvey Weinstein diese como fruto el surgimiento de un movimiento conocido como #MeToo encabezado por Alyssa Milano. La actriz de 'Embrujadas' ha animado a todas las mujeres a que se sumen a este movimiento y denuncien públicamente a los sujetos que las han acosado a lo largo de su carrera. Esta iniciativa ha sido tan bien recibida, que los cimientos de la industria del cine se están viendo dinamitados, pero era más que necesario poner fin al miedo que sufrían las víctimas a denunciar.

“Directores, habéis fallado. Productores, habéis fallado. Compañías, habéis fallado. Mánagers teatrales, habéis fallado. Políticos, habéis fallados”. Esta sentencia se puede leer en la carta que firman 600 actrices suecas, entre ellas Alicia Vikander, que reclaman a estos sectores que “es vuestra responsabilidad asegurar que nadie sufra acoso sexual en el lugar de trabajo”. En la misiva se pide “tolerancia cero” ante este tipo de prácticas abusivas y vejatorias, para que se deje de encubrir los escándalos para salir indemne y continuar con el negociado sin sobresaltos.

“Nunca más nos volverán a silenciar”, prometen.