Kim Kardashian y Kanye West no se plantean el divorcio, pero hacen vidas separadas

Tras anunciar su candidatura, a la postre fallida, a la presidencia de los Estados Unidos, y sobre todo después de los polémicos comentarios lanzados durante un mitin sobre episodios familiares íntimos, nadie daba un duro por el matrimonio hasta entonces sólido que forman la estrella de 'Keeping up with the Kardashians' y el siempre excéntrico músico.

Pero desafiando a los titulares de la prensa estadounidense especializada en celebrities, que ya daban por inminente el divorcio entre Kim Kardashian y Kanye West, ambos siguen, al menos de momento, casados. Eso sí, según afirma 'People' citando fuentes cercanas a la pareja, los dos "viven muy separados" en este momento.

La revista añade que la influencer, que está estudiando para ser abogada, ha estado muy centrada en su trabajo y en "proyectos que son importantes para ella", y el rapero está haciendo lo mismo.

A pesar de estos supuestos problemas en su relación, la fuente dijo que Kim Kardashian "parece feliz" y sigue "muy centrada en el trabajo", en este caso sobre todo en pos de la reforma de la justicia penal en la que está muy involucrada, y sobre la que se ha llegado a reunir con Donald Trump. "Esta es su pasión y su familia está muy orgullosa de ella".

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El pasado mes de julio, la empresaria apoyó públicamente a su marido hablando por primera vez del trastorno bipolar que sufre Kanye West, señalando que esta enfermedad es "dolorosa de entender". "Entiendo que Kanye es objeto de críticas por ser una figura pública y sus acciones pueden despertar a veces opiniones y emociones fuertes. Él es una persona brillante y complicada (...). Los más cercanos a Kanye conocemos su corazón y entendemos que sus palabras a veces no se alinean con sus intenciones", aseguraba entonces.

La pareja también ha seguido manteniendo un frente unido de cara al público después de que West borrara un tuit en el que afirmaba que había estado intentando divorciarse de su mujer durante años.

Lo cierto es que las apariciones conjuntas del matrimonio son cada vez más escasas. Por el bien de sus hijos intentaron una reconciliación en agosto con un viaje en un jet privado a una isla del Caribe y la última vez que se les vio juntos fue durante la celebración del 40º cumpleaños de Kim.

Entonces, Kanye logró emocionarla a ella y a toda su familia política regalándole un holograma de su fallecido padre, Robert Kardashian Sr. Kim compartió el emotivo vídeo de su padre en Twitter, afirmando: "Ni siquiera puedo describir lo que experimentar esto juntos ha significado para mí y mis hermanas, mi hermano, mi madre y mis amigos más cercanos. Muchas gracias, Kanye, por este recuerdo que durará toda la vida".