Robbie Williams habla sobre la falta de sexo en su matrimonio: qué es ser anafrodisiaco

Para el cantante británico, de 49 años, es normal no tener relaciones sexuales después del matrimonio. Al menos, Robbie Williams y su mujer, Ayda Field, aseguran que ahora les ocurre eso. La pareja, según ha declarado al diario inglés ‘The Sun’, se encuentra en “el mismo nivel” en todo lo relacionado con su intimidad y están contentos, a pesar de la falta de actividad en la cama. El excomponente de la boy band Take That está casado desde 2010, y tiene 4 hijos: Theodora, de 10 años –que fue dama de honor en la boda de Eugenia de York por la cercanía que Robbie tiene con la familia real británica–; Charlton, de 8, y Coco y Beau, de 4.

Robbie Williams ha reconocido que tomó testosterona durante un tiempo, pero “tuve que dejarlo porque he sido un adicto en el pasado. De esa forma obtuve estos enormes hombros cuadrados y comencé a parecer un portero, pero no tenía buen aspecto”. Su aspecto ha sido motivo de preocupación entre sus fans, alertados por la suspensión de sus conciertos.

Sin embargo, no ha dudado en reconocer que los encuentros sexuales que tenían cuando tomaba hormonas eran “increíbles”. Confiesa que “lo hacíamos todo el tiempo. Éramos insaciables. Además, eso demuestra que seguimos enamorados, porque cuando estaba así, no podíamos quitarnos las manos de encima”. Y todavía ahora su mujer, reconoce, le recuerda que deberían tener sexo. “A veces lo intentamos”, añade.

Una forma de asexualidad

Robbie y su mujer pueden ser un ejemplo de que puede existir el amor sin sexo. Hablan de su asexualidad sin complejos, y no convierten en un problema de pareja su inapetencia sexual. La baja frecuencia del acto amoroso en un matrimonio tiene como principal causa el paso del tiempo y la edad.

Ya existe un nombre para aquellas personas que sienten poca atracción física hacia su pareja o no son capaces de responder a sus estímulos: son anafrodisiacos. También pueden recibir el calificativo como asexuales románticos: son felices con la otra persona, tienen vínculos importantes, pero no tienen deseo.

Además de hablar de asuntos íntimos, la estrella de pop, que lleva el torso tatuado, reconoce que sigue trabajando mucho su físico y que mantiene una batalla constante contra el peso. En el pasado, Robbie Williams llegó a temer por su vida.

El británico sufrió serios trastornos alimenticios provocados por su adicción a las drogas. En 2007 estuvo ingresado en una clínica de rehabilitación y superó un complicado periodo que le impedía cantar. “Ya he aprendido a aceptarme a mí mismo”, ha declarado a ‘The Sun’.

El intérprete de ‘Feel’, canción con la que luchó contra la depresión, tiene su propio pódcast, ‘At Home With The Williamses’, y acaba de terminar su gira del álbum ‘XXV’. Ya han pasado 25 años desde que inició su carrera en solitario tras su salida de la boy band Take That.