Nectar blonde, el rubio cálido y fácil de mantener de esta temporada
La primavera llama a la puerta de la coloración con el rubio más dorado y cálido de los últimos años. Su superpoder: iluminar los cabellos más claros a medida
El sinfín de técnicas de coloración disponible puede hacer que, a veces, el tono de nuestro cabello esté compuesto de tantos matices que resulte complicado recordar su nombre exacto: melting, balayage, tigereye, degradado, mechas californianas, babylights… ¿Cómo dar con la coloración adecuada? En esta cuántica capilar, parece destacar la importancia de lograr coloraciones personalizadas al máximo a cada cabello y cada cliente.
La exitosa creación del expensive brunette, capitaneado por Hailey Bieber o Karlie Kloss, es un ejemplo de esa customización en la que un solo color no vale. Precisamente, ese castaño claro que se ha convertido en la mejor forma de hacer la transición del cabello rubio al castaño de una forma natural dejaba un hueco en el mundo de las tendencias porque, por primera vez en muchos años, los cabellos rubios no encontraban una coloración de moda que se adaptase a sus necesidades.
Así veíamos como los marrones chocolates y los castaños iluminados se convertían en las coloraciones predominantes entre celebrities. Un ejemplo era Paula Echevarría. Mientras que otras, tradicionalmente rubias, se atrevían con el pelirrojo luminoso como Gigi Hadid -alerta spoiler, ha vuelto al rubio dorado-. Pero, tras meses de cabelleras morenas y mechas frías, sustentadas en los rubios cenizas y en transiciones ahumadas como el smokey hair, la inminente primavera trae consigo una nueva coloración, un rubio muy muy retro que ya se ha convertido en una realidad sobre la pasarela.
El, para muchos indescriptible rubio de moda es el nectar blonde, una coloración que recupera el rubio dorado de los 70 y 90, trabajando con cuidado tanto la raíz como medios y puntas, y que se apoya notablemente en el corte de pelo para conseguir un efecto más impactante. Igual que pudiera ocurrir con otros balayage, la raíz se mantendrá oscura para lograr un degradado muy natural y que no exija demasiado mantenimiento.
La primera regla del rubio néctar es que, precisamente, solo es apto para cabellos rubios ya que parte de una raíz rubia se cubre de un rubio oscuro. Este gesto permite que el cabello siga creciendo sin tener que recortar el cabello de raíz, para así crear el degradado.
Para conseguir esa luminosidad cálida y que le dé un aspecto dorado al cabello, de medios a puntas se aplica un rubio más claro, pudiendo ser desde un tono miel a un rubio vainilla, más cálido que el platino pero igualmente iluminador. Al tratarse de un rubio cálido y dorado, la idea es recrear un cabello como besado por el sol, salpicado de luz pero no con las clásicas mechas platino.
Los tonos ámbar que ayuden a dar a la melena un acabado cobre son el tono exacto que diferencia al rubio néctar de otros rubios anteriores, incluso hay quien apunta que la palabra ‘néctar’ haría referencia a una ligera tonalidad rojiza, similar a la del rubio veneciano que aporta calidez pero permite lucir un rubio más oscuro.
El color que caracteriza al rubio néctar se aplica en realidad a mano alzada y creando mechas gruesas, que conseguirán esa sensación de rubio más potente y homogéneo.
Uno de los puntos más importantes del nectar blonde es la zona en la que se aplicarán las mechas. Además del grosor y de incidir de medios a puntas, también se decoloran los mechones próximos al rostro, logrando así el face framing con el que se enmarca e ilumina el rostro. Las capas son las otras grandes aliadas de este rubio cálido pues, al resaltarlas con el tono vainilla, se aporta mucho más movimiento y matices al cabello.
El mundo de las tendencias vive en un constante regreso al pasado noventero, algo que vamos descubriendo al desgranar el éxito de maquillajes con sombras metalizadas o cortes de pelo repletos de capas.
Un manual de instrucciones muy concreto
Por si el hecho de que el néctar solo sea apto para los cabellos rubios no fuera suficiente, otra apreciación que ayuda a que la coloración se vea en todo su esplendor y que resulta fundamental para su éxito es el corte de pelo. Como decíamos, las capas se ven especialmente beneficiadas de las mechas gruesas de color miel, pero los degradados repletos de capas y con flequillos a juego como el buttleneck fringe son fundamentales para alcanzar la estética noventera de moda.
El pelo de Julia Roberts en los 90 o el butterfly haircut son excelentes opciones para lucir un nectar blonde. Basta con tomar como ejemplo a Pamela Anderson o Claudia Schiffer para comprender la reminiscencia sesentera en el volumen.
Sabiendo que este rubio cálido es fácil de mantener ya que permite que no sea necesario estar retocando las raíces cada mes, resulta curioso que, para que su tono exacto esté siempre en perfectas condiciones, no se debe lavar ni tratar con champús morados, sino que solo están permitidos los cosméticos para mantener la coloración beige. Solo así se tiene un nectar blonde dorado durante toda la estación.
El sinfín de técnicas de coloración disponible puede hacer que, a veces, el tono de nuestro cabello esté compuesto de tantos matices que resulte complicado recordar su nombre exacto: melting, balayage, tigereye, degradado, mechas californianas, babylights… ¿Cómo dar con la coloración adecuada? En esta cuántica capilar, parece destacar la importancia de lograr coloraciones personalizadas al máximo a cada cabello y cada cliente.
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