Dieta de las 3 horas: ¿es necesario comer cada poco tiempo para adelgazar?

Uno de los errores más habituales que cometemos cuando queremos perder peso es dejar de comer. Aunque nos pueda parecer lógico, para adelgazar no es necesario comer menos o incluso saltarnos comidas o cenas, de hecho con esto solo lograremos maltratar a nuestro cuerpo y poner en riesgo nuestra salud.

La clave para poder llegar a perder peso es encontrar el equilibrio entre las calorías que consumimos y las que quemamos. Podremos ingerir menos calorías, hacer más ejercicio o ambas cosas, pero lo principal es cuidar lo que comemos, asegurarnos de que nuestra alimentación es equilibrada, saludable y, sobre todo adecuada para conseguir nuestro objetivo.

Por eso resulta tan necesario, tal y como siempre señalamos, ponernos en manos de médicos, nutricionistas y expertos en la materia, que puedan guiarnos y servirnos de apoyo, porque perder peso no siempre resulta tan sencillo como nos lo pintan, por eso necesitamos hacerlo de forma segura y eficaz.

Entre los muchos trucos que suelen ofrecernos para hacernos más sencillo perder peso, está el de comer cada tres horas. Esta recomendación tiene todo el sentido, puesto que es una forma de ayudarnos a no pasar hambre, comiendo cada poco tiempo evitaremos sentir ansiedad y optar por picoteos menos recomendados.

Por supuesto esas ingestas que hacemos no pueden estar compuestas por cualquier tipo de alimentos, deben formar parte de una dieta equilibrada, primando las frutas, verduras e ingredientes naturales frente a la comida rápida o los ultraprocesados. Es decir, no es fácil adelgazar si cada tres horas comes cosas que no te favorecen.

Lo que esta dieta propone es hacer tres comidas importantes, desayuno, comida y cena, y alternarlos con dos picoteos más ligeros, un aperitivo y una merienda. La primera ingesta sería una hora después de levantarnos, sobre las 7 de la mañana, y la última, tres horas antes de irnos a dormir, sobre las 7 de la tarde.

Al consumir los alimentos de esta manera evitaremos que el cuerpo interprete que hay una falta de alimentos y almacene las reservas temiendo carencias, mantendremos estables nuestros niveles de energía a lo largo del día, mantendremos activo nuestro metabolismo, haciendo que el cuerpo digiera los alimentos más rápido, y evitaremos la acumulación de grasa.

Sin embargo este truco puede tener también sus riesgos, porque la clave de comer cada tres horas es hacerlo repartiendo las calorías diarias que debemos consumir entre todas las ingestas. Comer más veces puede hacer que nos excedamos en las calorías pautadas o en las cantidades. Eso sin contar que cada persona es diferente y no todo el mundo necesita comer cada poco tiempo.

Este tipo de sistema nos ayuda a planificarnos, y es aquí donde reside gran parte de su éxito. Si sabemos que vamos a comer cada tres horas y tenemos claro qué vamos a elegir, nos ayudará a equilibrar la comida del día, haciendo que nuestra alimentación sea más saludable y que no dejemos fuera ningún macronutriente.

Así, si seguimos una dieta equilibrada, planificamos nuestro menú y hacemos un poco de ejercicio físico, seguro que conseguimos mantenernos más saludables y en forma.